Don't break the promise (COMPLETA)

Capitulo 39

Durante la semana me dedico a estudiar ya que tengo una prueba de química el viernes. Algunos días Thomas se ofrece a ayudarme y pasa toda la tarde en casa. Pero la verdad de esos días solo puedo estudiar durante dos o tres horas porque cuando Thomas se aburre comienza a molestarme y no me ayuda mucho que digamos.

Me encantaría ir a Rose para poder terminar mi vestido y ademas debo seguir modificando y vendiendo prendas porque no me quiero quedar atrás con las cuentas, pero lamentablemente no puedo.

...
El viernes luego de la escuela salgo al aparcamiento aun con los nervios a flor de piel por el examen. Cuando llego a mi Jeep inmersa en mis pensamientos alguien salta detrás de mi y me agarra de la cintura. Grito y me doy vuelta para ver a Thomas riendo.

-¡Thomas deja de asustarme!- lo reprendo- acabo de salir de química ¿quieres que me de un ataque?- digo mientras recupero el aire. El sigue riendo.

-Lo siento lo siento- se disculpa y se acerca para plantarme un pequeño beso en la mejilla. Mi teléfono suena en mi bolsillo y lo atiendo haciéndole una seña a Thomas de que no hable.

-¿Hola?- hablo.

-Hola cariño soy Loren ¿como estas?- la dulce voz de la mama de Thomas se escucha al otro lado de la línea.

-Hola Loren muy bien ¿y tu?- miro al chico que tiene sus ojos avellana puestos en mi.

-Muy bien gracias, siento molestarte pero quería preguntarte si podrías cuidar a Lily con Thomas esta tarde, la ultima vez que la deje con él solos Thomas la dejó a cargo de Dean y al otro día Lily reproducía palabras... no muy bonitas- miro al chico de cabello negro y río.

-Claro me encantaría- respondo sonriente, aunque se que ella no me puede ver.

-Gracias eres un encanto, nos vemos- se despide y corto.

-Bueno, parece que estaremos de niñeros hoy- le sonrío a Thomas.

-¿Osea que no iremos a Rose?- pregunta haciendo pucheros y yo me río.

-Lo siento pero hoy no- lo agarro de las mejillas como a un niño.

...
Por la tarde, voy a la casa de los Gardner mas o menos a las 4. Toco el timbre y me recibe ese par de ojos avellanas enmarcados por largas pestañas que siempre hacen que mi estomago sienta mariposas. Su sonrisa ladeada demuestra seguridad y diversión. Mira rápido hacia atrás y como no ve a nadie se acerca y me da un rápido beso en los labios, el color sube a mis mejillas.

-Hola enana- la sonrisa de Thomas es encantadora. Lo saludo y paso.

-Amy cariño ¿eres tu?- se escucha la voz de Loren que unos segundos después aparece en el recibidor- ¿como estas?- se acerca y me da un abrazo rápido, inspecciona mi cara y frunce ligeramente el ceño- estas roja ¿tienes calor?- pregunta y creo que me pongo mas roja ante su pregunta. Escucho una pequeña risilla por parte de Thomas y en mi mente ya lo mate, resucite y volví a matar.

-No no, estoy bien- le sonrío. Lily aparece salvándome del apuro.

-¡Amy!- exclama y me agacho para darle un abrazo.

-Bien yo ya me voy, Arthur y yo llegaremos tarde así que por favor acuesten a Lily temprano y hay pizza en el microondas por si quieren cenar- dice tomando sus cosas- adios los quiero- saluda apurada y sale por la puerta.

-Bien, ¿que quieres hacer Lily?- le pregunto a la niña. Mala idea.

Pasamos la mitad de la tarde sentados en una pequeña mesita tomando el té con osos de peluche, lo mas gracioso fue cuando Lily quiso maquillar a Thomas. Logró pintarle los labios y con la foto que tome ya tengo para amenazarlo por un buen tiempo.

Cuando se hacen las 6 le sugiero a Lily que miremos películas de Disney, así que hacemos pochoclos y nos sentamos en la sala a buscar películas. Yo estoy en el medio de Thomas y de la niña. Decidimos ver High School Musical, con lo que estoy completamente de acuerdo porque siempre me encanto esa película, aunque Thomas se quejó un poco después cedió.

Para la mitad de la película Lily ya esta dormida.

-¿Podemos sacar esta película?- me pide Thomas cansado mientras yo canto muy a gusto una de las canciones.

-No por favor- le pido haciendo pucheros y el asiente. Como la pequeña esta soñando con ositos de peluche que toman té Thomas pasa un brazo por encima de mis hombros y me acerca a él, yo apoyo la cabeza en su hombro y seguimos mirando la televisión.

-¿Como puedes saberte la letra de todas las canciones?- pregunta Thomas riendo mientras yo saco mi mejor Gabriella. Me encojo de hombros y lo miro sonriente cuando termina la canción. Sus ojos me estudian, siento que me traspasan y pueden ver todo de mi, cuando me mira de esa forma siento un cosquilleo en todo mi cuerpo y creo que nunca me voy a poder acostumbrar.

-¿Que?- pregunto hipnotizada por sus ojos. El sonríe y niega lentamente con la cabeza.

-Nada- susurra y acerca su rostro al mío. Cuando nuestros labios se juntan las mariposas en mi estomago revolotean contentas. El beso es suave, tierno pero a la vez es como si Thomas estuviera demandando su territorio y hace que me derrita en sus brazos, por mas cursi que suene. Nos separamos cuando sentimos que algo se mueve a nuestro lado.

Los ojos marrones de Lily nos miran con sorpresa y luego una pequeña sonrisa sin dientes aparece en sus labios.

-¡Lo sabia!- exclama alegre, Thomas y yo la miramos atónitos, no sabemos que decir- sabia que terminarían juntos- dice con una tierna sonrisa, yo me pongo colorada.

-Lily por favor no digas nada- le pide su hermano.

-Pero ¿por qué? Todos van a estar muy felices- dice extrañada la niña.

-Queremos... decírselos nosotros cuando estemos listos ¿si?- Thomas la mira de forma intimidante. Lily se encoge en el sillón.

-Esta bien- se rinde- y ¿hace cuanto están juntos?- pregunta volviendo a su entusiasmo inicial. El chico de cabello negro y yo nos miramos y luego volvemos la atención a la niña.

-Umm... hace dos semanas mas o menos- respondo yo algo abochornada. Ella aplaude feliz, se parece a Molly y Val cuando se enteraron.

-Yo lo sabia, era bastante obvio- dice con tono orgulloso y Thomas y yo reímos.

-Muy bien experta en el amor, es hora de dormir- dice Thomas divertido y se levanta del sillón acercándose a Lily para hacerle cosquillas, ella se ríe y lo aparta. Hace pucheros pero después cede.

-Adios Amy, espero que vengas otro día- me saluda yendo detrás de su hermano.

Cuando Thomas vuelve y se sienta a mi lado suelta un suspiro y se ríe. Yo lo acompaño.

-No puede creer que nos haya descubierto- comenta mirándome.

-Yo tampoco- río.

-¿Que debo ponerme para la semana de Hoco?- pregunta.

-¿No leíste la lista de temas que nos dieron hoy?- le digo obvia. Él forma una sonrisa inocente haciéndome saber que no la leyó. Ruedo los ojos- bien si quieres puedes venir a comprar con Val y conmigo los disfraces- digo.

-Si gracias- me da un beso en la mejilla.