INSOMNIA [MINCHAN-BANGINHO]

DIEZ

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Chan no sabía qué decir o hacer, sólo se limitó a escucharlo.

-Nos asaltaron en la puerta de casa, papá había ido a buscarme a la escuela y se ofreció a llevar mi mochila.
Cuando los delicuentes aparecieron lucharon con él hasta quitársela, también lograron sacar su billetera y celular.
Todo hubiese sido distinto si yo me quedaba junto a él.- Hizo una pausa y soltó un sollozo que retumbó en los oídos de Bang e hizo que su pecho doliera. -En mi mochila llevaba una notebook que tanto había deseado tener y mis padres con mucho esfuerzo habían podido comprármela un mes antes...
Actué sin pensar Chan, era muy inmaduro en ese entonces y no pensé en las consecuencias.- Seguía llorando, aún con los ojos cerrados y apretaba su mano buscando consuelo en Bang. -Quise quitarles mi mochila en cuanto subieron a su moto, papá intentó detenerme, el delincuente pensó que fue él quien quiso arrebatársela y entonces le disparó. No una, sino dos veces.- Abrió sus ojos y todas las lágrimas agrupadas cayeron de inmediato. -Fue mi culpa.- Su voz era casi inaudible ya.

Chan se recostó a su lado y lo abrazó tan fuerte, como si quisiera evitar que se rompiera en pedazos. -No fue tu culpa.- Fue lo único que dijo y lo sostuvo entre sus brazos durante largos minutos, hasta que sintió como la respiración de Minho se normalizó y su cuerpo se relajó. Supo entonces que se había dormido.

-¡VOY A MATARTE POR DEJARME SOLO Y NO AVISARME QUE..- Entró de golpe Mark a su habitación gritando pero se detuvo en cuanto vió la escena.
Su amigo estaba acostado, con un muchacho entre sus brazos que a pesar de estar dormido lo abrazaba fuertemente por su cintura. Christopher le hizo una seña para que se callara.
-¿Qué es esto? ¿Quién es él?- Preguntó en un susurro acercándose a la cama para poder ver el rostro del muchachito. Pero Chan movió su brazo y lo posicionó de tal forma que no pudiera verlo.

-Luego te explico, ahora haz silencioso.-

-Está bien.- Respondió algo dudoso, todo en ese momento era demasiado confuso. En los años de amistad con Christopher jamás habían hablado de sus orientaciones sexuales, porque creía que era obvio que eran dos chicos heterosexuales a los que no les importaba tener una relación seria hasta ser profesionales y tener una cuenta bancaria estable que les ayudara a mantener una familia.
Pero al verlo así, abrazando a ese chico como con miedo a que pudiese romperse, con los ojos brillantes como nunca antes se los había visto, y mirándolo con una mezcla de preocupación y cariño, todo lo que creía saber o conocer de él se disipó.

Cuando Mark cerró la puerta tras él, Chan relajó su cuerpo y se movió lentamente para quedar en una posición más cómoda. Después pensaría como le explicaría todo a su amigo. Ahora sólo quería concentrarse en esa imagen que le proporcionaba ese ángulo, de Minho durmiendo tranquilamente sobre su pecho, con sus labios apenas sepados, con rastros de lágrimas secas sobre sus mejillas y sus manos levemente agarradas a cada lado de su cintura.
Ahí fue cuando lo supo, cuando los latidos de su corazón se lo dejó en claro.
Estaba perdida y completamente enamorado.