Pequeños rayitos de sol se colaron por la ventana y cortinas, impactando en el rostro de Minho, lo que hizo que éste abriera lentamente sus ojos.
Aguardó un momento para poder ubicarse en tiempo y espacio, y recordó dónde se encontraba. Justo en ese momento sintió un brazo sujetando su cintura sin intención de dejarlo ir, sonrió medio adormilado y comenzó a girarse lentamente para quedar cara a cara con Chan.
Un poco más allá, en la mesita de noche pudo ver como el reloj marcaban un poco más de las 8am. Al volver su vista, observó detenidamente el rostro ajeno. Vio como todas sus fascinantes facciones se veían aún más bellas con la luz del sol chocando con ellas.
No supo cuánto tiempo siguió viéndolo, pero en un momento sus ojos volvieron a cerrarse.Cuando volvió a abrirlos se percató de que se encontraba solo, volvió a mirar el reloj y ahora éste marcaba las 10:40am. Frotó un poco sus ojos y se sentó en la cama justo en el momento en que la puerta se abrió. Agradeció estar sentado, de haber estado parado hubiese caído al piso al ver esa escena.
Chan entró a la habitación sólo con una toalla rodeando su cintura y otra pequeña con la cual secaba su pelo.
Pudo ver lo tonificado que estaba el cuerpo ajeno, sus abdominales bien marcados y sus grandes hombros y brazos.
Cuando sus ojos se cruzaron sintió que su cara estaba en llamas, así que inmediatamente miró hacia otro lado.-Creí que seguías dormido.- Habló Chan intentando ocultar una sonrisa, y fue en busca de ropa para vestirse.
-¿Qué? Ah... Acabo de despertar- Se odiaba por sonar tan nervioso.
Chan volvió a voltearse para mirarlo. -¿Quieres darte una ducha mientras preparo algo para desayunar?- Minho asintió y torpemente quiso salir de la cama, enredándose con las sábanas. -Hay toallas limpias en el baño, en el estante que está al lado del espejo.- Y sin más el menor salió de la habitación a pasos torpes. Chan reía en silencio.
Siguió las indicaciones de Bang y se metió a la ducha. Se dio leves golpecitos en la cara mientras el agua caía por su cuerpo. "Tranquilízate idiota" se decía a sí mismo.
Al cerrar la canilla se dio cuenta de algo: no había llevado su mochila con su ropa. Suspiró resignado e hizo el mismo acto que Chan, aseguró una toalla a su cintura y con otra secó su pelo.
Agradeció haber dejado su cepillo de dientes allí en la noche, así que tomó largos minutos cepillándolos.
Ya no podía seguir escondiéndose más tiempo así que tomó valor para salir lo más rápido posible hasta la habitación de Chan para vestirse. Con suerte éste estaría en la cocina y Mark... Bueno no sabía nada de él, pero rogaba que si se encontraba en casa siguiera durmiendo aún.Caminó sigilosamente y cuando escuchó ruidos en la cocina suspiró aliviado. Pero no duró mucho, ya que en la puerta de la habitación chocó con otro cuerpo que iba saliendo de allí. Chan lo observó de arriba a abajo y sonrió de costado con picardía. -El desayuno ya está listo, te espero abajo bonito.-
Y allí estaba Lee Minho nuevamente, queriendo ser tragado por la tierra.
-¿Por qué sonríes como idiota?- Atacó Mark apenas entró a la cocina.
-Porque acabo de ver tu horrible cara y me dio risa.- Contraatacó.
Mark rodó sus ojos y le dio un último sorbo a su jugo. -Me voy, saluda al niño bonito por mí.-
Segundos después de que éste abandonara el departamento, Minho ingresó a la cocina. -Creí que hablabas con alguien.- Dijo mientras se sentaba en una de las banquetas.
-Hablaba con Mark, acaba de irse. Te dejó saludos.- Habló dejando un té y tostadas con mermelada frente al menor. -En textuales palabras me dijo "saluda al niño bonito por mí"- Lo imitó con voz burlona al momento que agarraba su café y se sentaba al lado de Minho.
Lee rió y bebió un sorbo de té. No era la primera vez que Chan le preparaba uno, en las tardes cuando él se dedicaba a corregir o hacer exámenes y Minho estudiaba para otras materias, preparaba té y un café para él. La primera vez le había dicho "Sé que el café es rico, pero si tienes problemas para dormir no deberías beberlo. Mejor toma un té y luego duermes un rato antes de volver a casa." También le había dicho que si él lo quería, también dejaría de beber café y lo reemplazaría con té. Cosa a la que Minho se negó rotundamente, se sintió demasiado bien al ver como el mayor se preocupaba por él y hacía lo posible para hacerlo sentir bien, pero no haría que dejara las cosas que le gustan por él, jamás lo permitiría.
-¿Dormiste bien?- La voz de Bang lo sacó de sus pensamientos.
-Sí, muy bien ¿y tú?-
-Bien... Algo intimidado.-
-¿Por qué?- Se sorprendió.
-Porque unos lindos ojos marrones no dejaban de verme esta mañana.-
Minho casi se atraganta con el trozo de tostada que acababa de tragar. -¿E-estabas despierto?-
-Siempre despierto temprano, incluso los fines de semana.. Es costumbre.-
-Oh.. lo siento.- Lee era más vergüenza que persona.
-¿Por qué te disculpas?- Rió.
-Es verdad, no soy yo quien debe disculparse.. Yo no tengo la culpa de que seas tan hermoso.- Sonrió victorioso al notar que logró poner tímido al mayor.
-Bueno entonces deberías disculparte por andar semidesnudo por mi casa, casi logras que me desmaye.-
Y la sonrisa de Lee desapareció dándole lugar a un exagerado rubor en su cara. -¡Cállate!- Se estaba muriendo de vergüenza y el mayor se aprovechaba de eso.
Terminaron su desayuno entre risas y sonrojos. Lavaron lo que habían ensuciado y al terminar Minho volvió a hablar. -Creo que debo irme.- Un pequeño puchero se formó involuntariamente en sus labios.
-Prometo llevarte después, pero hay algo importante que quiero decirte.- Luego de decir eso usó la fuerza de sus brazos y lo sentó sobre la mesada, abriendo un poco sus piernas para poder quedar delante de él.
El corazón de Minho parecía querer explotar. -¿Qué haces?- Rió nervioso.
-Quería preguntártelo anoche pero después de todo lo que pasó no me pareció adecuado, así que..- Llevó una de sus manos al bolsillo trasero de su jean y sacó una pequeña cajita aterciopelada de color azul. Al abrirla se encontró con un delicado collar plateado con pequeñas perlas negras en él. -Te compré un regalo.- Sonrió dulcemente. -Lee Minho, ¿quieres ser mi novio?-
¡Pequeña actualización sorpresa! Porque ayer fue el día de San Valentín.
¿Ustedes tienen a alguien a quien amar? Ya sea pareja, familia, amigos o mascotas. Todo, mientras sea amor, es válido. Y también recuerden que el amor más lindo y puro es el amor propio, por sobre todas las cosas.
Por mi parte, como buena Minho biased, tengo muchos gatos a los que amo más que a nada en este mundo. También a mi familia y unas buenas amigas. Y estoy aprendiendo a quererme poco a poco.Espero que les guste este capítulo, realmente me emocionó escribirlo (por eso es un poco más largos que los demás)
Gracias por leer💖 see u the next time!
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INSOMNIA [MINCHAN-BANGINHO]
FanfictionPrimer día de clases, nueva escuela, nuevos alumnos. Había varias cosas de las que el profesor Bang podía preocuparse. Sin embargo, todo eso se esfumó de su mente cuando al entrar a su nuevo salón de clases y presentarse se percató de aquel muchacho...