INSOMNIA [MINCHAN-BANGINHO]

VEINTICINCO.

Cuando llegó a su casa, se dio un baño y terminó su tarea mientras esperaba que su madre volviera. Cuando oyó la puerta principal abrirse dejó todo lo que estaba haciendo y tomó un profundo respiro para luego dirigirse lentamente a la sala.
Al entrar vio a su madre sentada en el sofá mientras mantenía sus ojos cerrados.

-Hola mamá.- Habló haciendo que ésta abriera sus ojos con sorpresa. -No quise asustarte, te estaba esperando.- Ella lo observó esperando que continuara. -Quiero pedirte perdón por lo de esta tarde. No quise ser duro contigo, sólo...- Y aquí pondría en práctica lo que le dijo Jinyoung. -me molestó que hablaras así ¿sabes? Las personas homosexuales no son diferentes al resto, ni tampoco van por la vida diciéndole a los demás que sean como ellos. Entiendo que creciste escuchando que eso está mal, pero ahora los jóvenes están más familiarizados con ello, y no lo vemos así. En un mundo que se está volviendo loco, donde la gente se pelea y mata entre ella, que haya amor, de la forma que sea, es lo único que importa.-

La mujer lo siguió mirando y mirando, Minho pensó que todo su esfuerzo había sido en vano. -¿En qué momento creciste tanto?- Finalmente habló, sonriendo con melancolía. -Perdón por mis malos comentarios, tienes razón. No me tiene que importar la vida de nadie más, sola la tuya. Mientras tú no seas como ellos, que hagan y vivan como quieran. No te preocupes, no hablaré más del tema. Ni tampoco te presionaré para que consigas una novia. Estoy segura que pronto llegará esa chica con la que te sientas pleno, lleno de felicidad y que al verla te des cuenta de lo enamorado que estás, y cuando estés cien por ciento seguro de que es la indicada, me la presentas.- Quiso hablar pero el nudo que se formó en su garganta se lo impidió. Su esfuerzo sí había sido en vano después de todo. -Me iré a bañar y descansar, deberías hacer lo mismo bebé.- Depositó un beso en su cabeza. -Buenas noches.-

Y otra vez lloró. Lloró porque se dio cuenta de que jamás lo apoyaría. Ella quería una vida completamente distinta para él. -Ya encontré esa persona que me hace sentir pleno, feliz y enamorado mamá, su nombre es Chris y si te dieras la oportunidad de conocerlo lo querrías tanto como yo.- Nuevamente le habló a la nada.

Su día comenzó bastante raro, por empezar al llegar al salón no encontró a su amigo, tampoco lo había visto en la entrada o pasillo. Pensó que estaba llegando tarde, así que sólo se sentó y empezó a sacar las cosas de su mochila. Cuando terminó y dirigió su vista a la entrada del salón, vio como su compañera Dahyun iba entrando y ésta le regaló una sonrisa.
Se sintió demasiado confundido, nunca nadie le dirigía la mirada, mucho menos la palabra.
Sacudió su cabeza y tomó su celular para mandarle un mensaje a su amigo.

Si ibas a faltar me hubieses avisado y no venía a clases tampoco.

A los pocos segundos su celular sonó.

Soy el peor, lo sé.
No estaba en mis planes hacerlo.
Mis padres salieron muy temprano y me quedé dormido :(
Todavía tienes tiempo de huir.

Justo en ese momento el timbre sonó.

Ya no.
Tecleó rápido y rió, justo cuando estaba guardando su celular alguien se paró a su lado.

-Veo que tu amigo no vino hoy, ¿te molesta si me siento en su lugar?- Habló el de pecas.

-Para nada.- Respondió amablemente. Tal vez si se hacía cercano a él podría pedirle consejos de cómo le dijo a sus padres lo que era y ayudarlo para poder hablar con su madre.

Su profesora de química entró al salón haciendo sonar sus tacones contra el piso.
-Buenos días alumnos, hoy les traigo una sorpresa.- Habló acomodando sus gafas. -Un trabajo práctico. Lo harán en grupos de a dos, llevará nota y tienen que entregar al finalizar la clase. Esto también influenciará en su nota final así que yo que ustedes me preocuparía por hacerlo perfecto.- Dicho esto, se giró para tomar las hojas y empezar a repartirlas.

-Bueno, veo que tendremos que hacerlo juntos.- Sonrió el rubio.

Comenzaron con las respuestas más fáciles y luego siguieron con las más complejas. A decir verdad Minho era muy inteligente, así que ayudó y explicó bien cada cosa que el contrario no entendía.
Felix era alguien muy agradable y divertido, todo lo opuesto a lo que su imagen aparentaba. Era casi como un niño, por esa razón Minho se distraía bastante. Era divertido verlo haciendo pucheros o caras de confusión cuando no entendía algo. En cierto punto le hacía recordar a Ungjae.

-Primer día y ya me dan un trabajo de vida o muerte.- Bufó.

-¡No exageres!- rió -Además, es tu segundo día.-

-Sabes a lo que me refiero.- Rodó sus ojos.

-Lo sé, pero es divertido verte sufrir.-

-¡Hey!- Le dio un leve golpecito y luego puso su cabeza en el hombro del contrario. -Ya estoy estresado.-
El aire que expulsó al decir esas palabras chocó contra el cuello de Minho y fue allí cuando éste notó lo cerca que estaba. Lo que lo hizo poner algo incómodo y tímido.

-Ya ya.- Rió dándole golpecitos a su cabeza.

.

Se arrepintió de haber salido en ese momento a buscar un libro que olvidó en su despacho, en ese caso no habría visto esa escena. Ese chico rubio, tan cerca de su novio.
Una sensación amarga se instaló en su boca y estómago. Quería entrar al salón y obligarle a que se alejara de él. Pero no era correcto. Además confiaba en Minho.
Así que sólo por eso siguió su camino, intentando borrar esa imagen de su cabeza.

¿Quién es el celoso ahora eh? 😏😂
Hola mis queridísimos lectores💗 ¿Cómo están?
Es casi la 1am donde vivo y recién ahora tengo tiempo libre, así que quería regalarles una actualización🥰
¿Qué opinan de este capítulo? ¿Tienen algunas preguntas o dudas? Las estaré leyendo.

Nos vemos en el próximo capítulo👋🏻💞