De la ficción a la realidad

PARTE XXIV - Timmy

Hoy es 27 de diciembre y no he tenido contacto con mi hermosa ballena. No nos hemos llamado para desearnos feliz navidad ni nos hemos mensajeado.
Tuvimos una pequeña discusión por Wechat y todo por una foto que subí a Weibo.
Ese día subí una foto con uno de mis mejores amigos a Weibo deseando a todos mis seguidores un feliz navidad.

Horas después, vi las notificaciones y en ellas había un comentario de Johnny. Había unos emojis de vómito por lo que me molesté un poco. Más bien me sentí mal por mi amigo.
Me fui directo a Wechat y le escribí a Johnny.

Desde ese momento, no he hablado con él. Tal vez exageré en molestarme o algo así, pero tampoco pensé que fuera a ser tan celoso, quiero decir, no es como si yo fuera a enamorarme de cualquier persona.
Si realmente piensa que soy una persona que se enamora fácilmente sólo porque me pasó con él, creo que me lastimaría muchísimo y me decepcionaría de él.
Odio estar así con él. Me duele que estemos enfadados.
¡Vaya manera de recordar nuestra primera navidad!
Ahora veo la razón por la que le dieron el papel de Gu Hai, por lo celosos que son.
Aunque, a decir verdad, entre él y su personaje son totalmente distintos. Gu Hai es posesivo y rudo, pero Johnny es más tierno y lindo conmigo. En algunos casos es un poco brusco en sus juegos pero en la intimidad me demostró ser totalmente amable y tierno.
No sé si llamarlo o no. Temo que me rechace y no quiera hablar conmigo, pero si no lo hago, pasaré más tiempo si verlo y ya lo estoy extrañando mucho.
A la mierda, como sea, lo contactaré.
Tomo mi teléfono y busco su contacto.  Le mandaré un mensaje.

No lo sentí muy cercano a mí. Tal vez aún esté molesto.
Dejo mi celular y me voy directamente a prepararme para ir a su encuentro. Realmente estoy ansioso por verlo.
Cuando termino de hacer mis cosas, me ducho, me cambio de ropa, tomo el regalo que le compré a Johnny y me voy a su departamento, no sin antes pasar a comprar la cena; Pato a la pekinesa, Arroz chaufa y tofu. Con eso estaremos más que satisfechos.
Luego de comprar la cena, me dirijo hacia una farmacia. Algo me dice que necesitaremos de algunas cosas. Antes de bajarme, me coloco una gorra, unos lentes de sol y un tapabocas. Me voy de incógnito para no ser reconocido.
Si la farmacéutica ve la serie que se estrenará pronto, y me reconoce, comenzará a decir que ese chico que trabaja allí compró ciertas cosas en la farmacia. ¡Qué vergüenza!
Termino de hacer mis compras y me dirijo a mi destino. Mientras manejo, voy mirando el regalo que le compré a Johnny, no es mucho pero espero que realmente le guste.
Es una ballena de peluche.
Se la compré un día después de nuestra discusión. Cuando la vi, me acordé inmediatamente de Johnny, así que decidí comprársela para que siempre recuerde que el que regaló esa ballena es su dueño.
Llego a destino y toco el timbre esperando que él me abra.
Al parecer estaba muy ansioso porque llegué muy temprano. Son las 7 de la tarde.
-Hola-. Le digo mostrando la bolsa con la cena.
-Hola, adelante-.
Esperaba por lo menos un beso de bienvenida, pero nada :c
Cuando entro, Johnny tiene todo decorada la mesa de una manera muy romántica. Es un indicio de que también me esperaba.
Nos sentamos a la mesa, él comienza a servir los platos mientras que yo sirvo el vino en las copas. Comenzamos a cenar mientras charlamos de lo que se viene, nuestros planes, los proyectos, y todo lo que tenga que ver con la serie y nuestras carreras. Pero no hablamos de nuestra discusión.
Al rato, Johnny interrumpe la conversación.
-Oh, cierto, antes de que se me olvide...-, levanta un paquete y me lo entrega,-Feliz navidad-.
-Gracias-.
Lo abro y saco un peluche de una pareja de pikachu unidos con un corazón.
¿Cómo supo que megustaba pikachu? Como sea... ¡Está hermoso!

 Los detalles son bellísimos. Cada uno tiene una cinta. Rosa y celeste respectivamente. Indica entonces que son un macho y una hembra.
De alguna manera, puedo identificar que estos pikachu son él y yo sosteniendo un corazón que refleja el amor que nos tenemos.
¡Estoy demasiado feliz!
-¡Gracias! ¡Está hermoso!-. Le digo dándole un beso en la mejilla.
Yo también tomo mi regalo y se lo entrego.
-Toma. ¡Feliz navidad!-.
-Gracias-.
Comienza a abrirlo lentamente y saca su ballena.
-¡Qué hermoso! Gracias-. Se acerca y me da un beso en la mejilla también.
Su cara refleja lo contento que está con su ballena y me llena el corazón de alegría.
Terminando de cenar, Johnny saca los platos y comienza a lavarlos. Yo le ayudo a limpiar la mesa.
-Zhou Zhou-. Me dice con todo afligido.
-¿Sí?-.
-Perdona-.
-¿Qué? ¿Por qué?-.
-No debí reaccionar de esa manera. No lo sé, sentí celos al verte con ese chico. Soy realmente patético, ¿verdad?-.
Me acerco a él y giro su cuerpo para que me mire.
-Si alguien debe pedir perdón, soy yo. Reaccioné de mala manera y no debí decirte que no te metieras en mis cosas-.
-Es que... Yo sé que eres una persona seria y que no te irás con cualquiera que se interponga en el camino. No debí sentir estos celos tan ridículos-.
-Dejémoslo así. No estropeemos esta noche-.
-Sé que no dirás nada y tratarás de calmar las cosas, pero creo que es mejor hablarlo y aclarar las cosas. No quiero que pienses que soy una persona obsesiva o celópata-.
Nunca he pensado eso de él, ni tampoco lo haría porque yo también he sentido celos aunque él no lo sepa.
El hecho de que alguien ya probó su cuerpo antes que yo, me llena de ira.
Lo importante ahora, es que yo soy de él y él es mío.
-¿Te parece si lo olvidamos?-.
Le propongo mientras lo abrazo de la cintura y lo acerco a mí.
-Me parece perfecto-.
Acerca su boca y me besa de una manera desesperada y anhelada. Yo también correspondo a ese anhelo porque lo necesitaba.
Necesitaba sentir sus manos, necesitaba sentir sus beso, lo necesitaba a él.
-Te extrañé demasiado-. Le digo.
-Yo también te extrañé y mucho-.
Nos confesamos en medio del beso que parecía interminable.
Nuestras lenguas se entrelazan en una pequeña danza, compartiendo el néctar que nos ofrecemos.
Toma mis manos enlazándolas con las suyas y me va dirigiendo hacia su habitación sin separar nuestros labios ni un solo centímetro.
Esta noche volveré a ser suyo.
Volveremos a ser una sola persona.
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