La siguiente historia se basa en el momento en que Timmy y Johnny se conocieron cuando comenzaron a rodar la serie ADDICTED...
Más de alguno se habrá imaginado cómo era su relación privada, qué sentían y lo más importante cómo se enamoraron.
...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Al día siguiente, Johnny se levanta con un mejor ánimo que ayer. De hecho, se levanta primero que yo. Lo siento caminar de un lado a otro, pero no quiero abrir mis ojos, tengo mucha pereza para hacerlo. Se sienta a mi lado mientras siento que mastica una manzana. -Levántate-. Me dice con susurros en mis oídos. De la molestia, me tapo la cara con la frazada. -Hmmmm-. -Ya levántate. No seas perezoso-. Me dice cariñosamente. Con muy poco ánimo, me levanto con dirección al baño. Me lavo los dientes, ingreso a la ducha, me baño y al cabo de 10 minutos, termino. Al salir, Johnny estaba allí lavándose las manos. -Ahora sí-. Me dice. -¿Qué?-. -Que ahora sí puedo darte los buenos días-. Se acerca y me besa. -Ya nos tenemos que ir. Debemos ir a la reunión para revisar las siguientes actividades. Tenemos dos días seguidos de actividades, 25 y 26 -. Conversamos mientras hacemos nuestras cosas. Yo vistiéndome, él mirando su celular. -Sí, lo sé. Comenzamos mañana-. -Exacto. Déjame revisar en la agenda qué actividad es-. -Creo que es una sesión de fotos para YOHO!GIRL-. Le comento mientras me coloco la polera. -Sí, tienes razón. Después es un livestream, una campaña en contra de la violencia intrafamiliar-. -Sí...-. Al terminar de ponerme la ropa de ayer, tomo mi celular y me voy con dirección hacia la puerta de salida. -Me voy a mi casa a cambiarme de ropa. Te veo más tarde-. -De acuerdo, nos vemos-. Antes de irme, retrocedo hacia él y lo beso. -Nos vemos-. Le digo. Él sólo asiente y sonríe. Salgo de su casa y me voy en busca de mi automóvil que lo estacioné un par de cuadras más adelante del condominio de Johnny. Es una costumbre que adopté cada vez que vengo a su casa con mi automóvil. Un par de horas después, me encuentro nuevamente con su hermoso e iluminado rostro. Vivi, Li Hao, Johnny y yo nos reunimos para fijar horas, lugares y más detalles. El día se va sin ningún tipo de inconvenientes y con Johnny nos vamos a nuestros lugares de descanso. Aprovechamos la instancia de que estamos solos en el estacionamiento para conversar un momento antes de irnos. Acordamos separarnos estos días para tener nuestras mentes despejadas. -Y... acerca de lo sucedido, ¿ya estás mejor? Te veo con un buen ánimo-. Le lanzo la pregunta sin más rodeos. - No, aún estoy dándole vueltas al asunto, pero lo que me hace estar un poco mejor eres tú-. Me dice acercando su mano hacia mi rostro para acariciarlo. Lo detengo inmediatamente. -Eh, aquí no-. -De acuerdo, lo siento-. Terminada su frase, se despide de mí y se va. A los segundos después copio su actuar y me voy hacia mi hogar. ¿Será normal sentirme mal cada vez que no le dejo que me toque? Uff, de acuerdo, lo admito. Cada vez que ocurre una situación similar, me quedo con las ganas de sentir sus cálidas manos. Cuando apenas llego a casa, tomo mi celular y le mando un mensaje.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.