Tu eres la razón [Vol.1]

•《 17 》Beach Party

Sábado, 8:25 p.m.

Los días habían pasado, y con ello el fin de semana había llegado. Me encontraba alistando los últimos detalles de las cosas que me llevaría a la playa. Al final resultó que París conocía a una chica cuyo hermano daría una fiesta en una de las playas más concurridas y conocidas de la ciudad. «Al parecer media ciudad estaba invitada a tal evento». Oficialmente sería la primera gran fiesta del verano para mí. Ya que en lo que llevamos de vacaciones había estado ocupada la mayor parte del tiempo en el trabajo, y no tenía realmente muchos amigos como para salir de fiesta. Así que por lo menos, algo bueno saldría de esto.

Planeo que esta noche sea mi momento de relajación, detendré el tiempo por solo unas cuantas horas y fingiré que soy una adolescente común y corriente que sale de fiesta con sus amigos.

Oí el claxon del auto de Paris sonar afuera de la casa. Cogí la mochila con todas mis cosas y me di una última mirada en el espejo antes de salir de la habitación. Eran casi las 8:30 p.m. Nos encontraríamos con Julián y su hermana una vez que estuviéramos allí. Al bajar por las escaleras pude ver que las luces de la casa aún seguían encendidas. Oí algo de bullicio proveniente de la cocina, al parecer Holly y Mía discutían otra vez.

Suspire con cierto cansancio.

Yo sabía que ellas también irían a la fiesta que se estaba realizando en la playa en ese momento dado que no habían parado de hablar de eso en todo el día. Me apresure rápidamente hasta llegar a la puerta y salí de allí. Al subirme al auto salude a París, luego esta se dispuso arrancar y dirigirnos hacia el sector predispuesto.

Una vez que llegamos al lugar quince minutos después, mi mejor amiga tuvo que aparcar su auto hasta el fondo dado que la fiesta. «La cual por cierto estaba abierta a todo público». Había comenzado hace una hora atrás y el lugar se había llenado rápidamente de gente. Se podía oír la música y el bullicio de todas las personas que se encontraban allí mientras caminábamos por la arena de la playa. Había luces de colores, un buen Dj subido en una gran tarima y un montón de adolescentes bailando, jugando juegos estúpidos y alcoholizándose por doquier. Además había un montón de fogatas. Pero lo que más me llamó la atención había sido ver a unos chicos saltando la cuerda mientras que esta se encontraba en llamas. Había un montón de gente a su alrededor alentándolos y haciendo fila para poder intentarlo por ellos mismos.

«¡Dios esto es una jodida locura!». Sonreí. Bueno supongo que esto es lo que hacen los adolescentes normales. ¿No?

Sacudí mi cabeza y nos dispusimos a acercarnos hasta la gran barra en donde tenían a varias personas trabajando para que sirvieran alcohol y demás bebestibles. La decoración se veía muy al estilo Hawaiano, con muchas luces y diversos colores. Pedimos que nos prepararan dos mojitos y nos sentamos a esperar. Una vez que estuvo listo nos los entregaron y junto con ello venían unos collares de flores fluorescentes, las cuales nos las pusieron sobre nuestras cabezas a forma de diadema. Ni siquiera nos pidieron identificación preveía, fue bastante espontáneo y algo raro. Le envié un mensaje a Julián avisándole que ya habíamos llegado, a lo que él respondió rápidamente.