Al día siguiente
Miércoles 15 de abril.
Arrastro mis pies con cierta pesadez mientras medio camino por el campo de fútbol americano dentro del instituto, era la hora del receso al fin, las clases de la mañana había sido una completa mierda, gracias a dios ya la mayoría casi habían acabado.
A mi alrededor las personas se reían y se movían dentro de su propia burbuja de felicidad ajenos a todo lo que yo estaba experimentando en silencio por dentro en este momento.
Por alguna extraña razón ya no los observo, ya no me da curiosidad lo que están haciendo, ya no me llama la atención observarlos desde la distancia, desde hace días que le estaba siendo totalmente indiferente al mundo entero y a cualquiera que decidia interponerse en mi camino.
«Ya no tengo ganas de seguir perdiendo mi tiempo».
No después de haberme dado cuenta de que existían cosas mucho más importantes dentro de mi vida, cosas que poseían más peso que mi ordinaria vida cotidiana en la actualidad.
- Mady ¿Una foto para nuestro último anuario escolar?- me intercepto de la nada un chico rubio, tenía una cámara sobre sus manos.
«Jared, el rarito de las fotografías».
Agh.
Dios, ese pensamiento ha sonado fatal pero con la amargura que me había abarcado durante los pasados días, no podía evitarlo, aunque, ¿qué me importaba a mi si era un rarito en este momento?.
-Ahora no Jared.- me excuse con desgana y segui de largo esquivandolo en el camino.
-¿Te sientes bien?- lo oí exclamar demasiado alto al ver que me alejaba de él.
Pero no volví atrás, ni le respondí, simplemente me marché para seguir con mi solitaria caminata y lo ignoré descaradamente.
¿Qué me estaba pasando?
Yo no era así.
Pero tampoco tenía ya las ganas de remediar aquello.Las circunstancias me daban la excusa perfecta para ser un poco egoísta con el mundo y comenzar a velar por mi propia paz mental de una vez por todas.
Quizás iba a ver más de un daño colateral en el camino, pero eso ya no me afectaba en nada.
Con tal de que no volviera a ser yo otra vez, que se jodiera el mundo entero por toda la mierda injusta que tuve que soportar durante años sola.
«Comenzando por la muerte de mi madre».
Me detuve en seco al notar el lugar al cual había llegado inconscientemente y la persona con la cual casi había chocado por estar mirando a la nada.
«La biblioteca del instituto».
Me cago en todo el puto mundo.
Unos ojos celestes, como el cielo de hoy, me observaban algo indecisos al ver cómo él intentaba salir del lugar y yo por otro lado, tan estúpida e inconscientemente intentaba entrar.
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Tu eres la razón [Vol.1]
Teen FictionLIBRO #1 DE BILOGIA "TU ERES" A través del tiempo, con él, aprendí que todos en este mundo eran tan vacíos y miserables. El detalle de las cosas radicaba en que ellos solían ocultarlo mucho mejor que yo. Él era una persona bastante compleja, misteri...