Élite: la sociedad de los chicos rebeldes

Epílogo

Años después

Tomo mis cosas y salgo del salón.

—¿Que harás hoy Lacey?— pregunta Maggie quien camina junto a mi, a mi lado izquierdo está Molly, mis dos compañeras.

—Tengo planes— las miro—Vendrán a visitarme.

Salemos hacia la entrada.

Ya hace años que estoy estudiando periodismo en  Stanford y me va de maravilla.

—Mira quien está—Molly señala con un movimiento de cabeza—Si no es nada menos que tu chico.

Ladeo la cabeza con una sonrisa mientras lo observo.

—Tengo que irme— me despido de ellas con un beso en la mejilla—Las veo el lunes.

Voy hacia allá, al llegar le doy un gran abrazo.

—Hola nena— dice en mi oreja mientras me abraza.

—Hola — me separo del abrazo —Déjame decirte que pronto comenzarás a vestirte igual a papá.

Me refiero a que está usando una camisa blanca con unos pantalones café claro, como beach, nada parecido a las chaquetas de cuero.

Luego de que me gradúe Jax decidió dejar esa vida, aunque no fue tan sencillo lo logró y también logró sacar a Cassie la cual ahora vive en Chicago con su novio y estudia. Jax y papá comenzaron a llevarse muy bien y él lo adentro a los negocios y así es como hoy trabaja en la empresa.

Él cambió por mi.

—Es lo mínimo si trabajo para una gran empresa como la de tu padre— me sonríe—Ahora ya deje las chaquetas de cuero y las motocicletas y sabes... es mucho mejor.

—Eso es grandioso—lo miro a los ojos mientras enrollo mis brazos en su cuello—Me gusta que estés feliz.

—Tengo algo importante que decirte— me mira.

—¿Ajá?— preguntó con una ceja alzada.

—Te aviso que llegaremos tarde— me susurra en el oído.

—Oh si, verdad— me separo rápidamente de él y subo al auto.

Jax conduce hasta casa, cuando él comenzó a ganar dinero quiso comprar una casa para que viviéramos juntos. Vivimos a varias cuadras de mi familia.

Al llegar nos bajamos del auto rápidamente y entramos a casa.

—¿Me toca a mí cierto?— me pregunta, le doy un guiño.

Él se saca la chaqueta y se pone un delantal.

Queremos la vida más simple que podamos vivir juntos.

Luego de estar cocinando juntos por unas horas finalmente terminamos.

—¿Te parece si me quedo así?— me pregunta, está completamente sucio—¿Me veo mal?.

—Nunca te has visto así — lo miro para enseguida tocar su nariz con mi dedo que tiene harina.

—En cambió...— él se aleja y me mira —Tú te ves horrible.

—¿En serio?— preguntó con el ceño fruncido.

—No, como sea te verías hermosa—se acerca y me da un corto beso—Ahora vamos a cambiarnos, Darla se pondría a llorar si la recibiéramos así.

Subimos las escaleras y vamos al cuarto, nos cambiamos de ropa por algo más lindo.

—¿Te gusta?—le preguntó mientras me pongo el arete.

—Si, ese vestido rojo te sienta bien— me mira con sus manos en los bolsillos—Cuento los minutos para arrancarte....

—Basta — lo detengo, sonrió—Compórtate.

Él timbre suena.

—Los extrañaba —miro a Jax para enseguida bajar rápidamente las escaleras.

Abro la puerta y veo a Darla de la mano de Clarck quien resultó ser el hombre que siempre quiso Darla.

—¡Hola chicos!— me acerco a ellos y les doy un abrazo.

—No sabes cuánto te extrañé— me dice Darla mientras entramos—Pero por fin ya me gradué y comenzaré a trabajar en Chanel, no es un gran puesto, pero ya es una locura trabajar para Chanel.

—Eso es increíble, se que pronto abrirás tu propia línea—le sonrió.

—Hola Darla— Jax la saluda—Es un gusto volver a verte.

—¿Cuando diablos cambiaste?— pregunta Darla, todos reímos.

Suena otra vez el timbre, me acerco a la puerta y abro.

—Te extrañamos— dicen todos al mismo tiempo, son Matt, Jossie, Tom y Lena.

—Hola chicos —abro la puerta hacia atrás y ellos entran—Vamos al sillón.

Todos tomamos asiento, Jax saluda a todos, él se lleva bien con todos.

—Tanto tiempo— dice Tom con una sonrisa.

—Por favor, vivimos en la misma ciudad—río.

—Pero no hemos tenido tiempo para vernos— habla mirándome.

—Tú eres el que no tiene tiempo nunca—habla Matt, los dos se sonríen.

—Hasta tienes el acento inglés—Darla bromea con él—Supongo que eres todo un cuidando inglés, incluso imagino que ahora la reina es tu diosa.

—Cállate Darla— le dice Matt.

—Bueno...—habla Lena, veo como mira a Tom—Tenemos algo que decirles—todos nos callamos—Estamos comprometidos.

Lena nos muestra su lindo anillo.

—¡Dios, eso es fantástico!—exclama Jossie de felicidad.

—Quien se imaginó que serían los primeros del grupo—habla Matt—Todos pensamos que la primera sería la loca de Darla.

Darla solo rueda los ojos.

—Déjame diseñar tu vestido— Darla la mira, Lena sonríe.

—¿Porque no viniste con tu novia Matt?— le pregunta Jossie.

—No puede viajar.

—¿Porque?—preguntó.

—Está embarazada, seré padre—sonríe.

—¡Amigo mío!—Tom se pone de pie —Felicitaciones.

Los dos se abrazan.

—Hemos crecido—Darla apoya su cabeza en el hombro de Clarck—Hace unos años solo nos importaban cosas como los partidos de fútbol y las fiestas, pero ahora Matt será padre y Lena y Tom se van a casar.

—Y seguirán viniendo cosas mejores—Jossie le sonríe a Darla.

—Iremos a visitarte pronto a Inglaterra Matt— Darla lo mira.

—¿Como te a ido Lacey?— me pregunta Tom.

—Bien, pronto terminaré y comenzaré a trabajar en una editorial— le sonrió.

—Esto es increíble— dice Jossie abrazando a Matt.

—Si— digo tomando la mano de Jax sin dejar de mirarlo.