Idiota...
Así era precisamente como me sentía, como una completa y patética idiota.
Siempre había dicho que James me recordaba a alguien, y en varias ocasiones le había comparado con Axel... ahora lo entendía. ¡Claro que se parecían, eran hermanos! También entendía cómo era que James sabía tanto acerca de la vida de Axel; sus "amistades", los asesinatos...
Ya comprendía porqué James o Nick se enfadó tanto aquel día en la universidad cuando supo que yo estaba saliendo con Axel Evans, ellos dos siempre habían tenido esa rivalidad desde hacía años. Lo que no entendía era porqué ninguno de los dos fue capaz de contármelo, por qué razón me engañaron. Habían dejado que me sintiera mal durante meses por creer que Axel le había hecho algo muy malo a James, él mismo me dijo que Axel le jodió la vida. Él me contó que había estudiado otra carrera para dirigir el negocio familiar pero que al final no pudo ser y decidió estudiar medicina... Claro, su "padre" le había dado el puesto a Axel al saber que no era hijo suyo y por ello ambos hermanos habían discutido y casi ni se hablaban.
Estaba segura de que James o Nick, o como se llamase, sabía desde hacía tiempo que éramos familia, sino ¿por qué tuvo tanto interés en pasar el tiempo conmigo?¿por qué insistía a que fuera con él a los recreativos?¿por qué ese interés acerca de mi familia? Y no tuvo el valor de decirme nada, no fue capaz de contarme que era mi primo o mi cuñado.
¿Axel?... Axel había traicionado mi confianza... otra vez. Él era la persona con la que más vulnerable pero, al mismo tiempo, con la que más fuerte me sentía y él se había encargado de apuñalarme por la espalda al no contármelo, al creer que evadiendo el tema durante tanto tiempo yo no me enfadaría. Pues se había equivocado.
Sufrí mucho durante aquellos seis meses que estuvimos separados. Me había costado mucho poder esconder en lo más profundo de mí todo el dolor que sentí con nuestra ruptura para poder volver otra vez a estar con él, para darle una segunda oportunidad después de todo... Sólo le pedí que no existieran más secretos entre nosotros, que no me mintiera nunca más, y no fue capaz de cumplirlo. ¿Por qué debería seguir con él? ¿Por qué tendría que volver a fiarme de Axel? Ya no le creería, ya no sabría si estaría siendo sincero conmigo al hablarme...
Volvía a doler tanto...
Volvía a sentirme desganada, vulnerable y traicionada, y otra vez por culpa del hombre del que estaba enamorada. ¡Otra vez por la única persona que me hacía sentir fuerte, libre, querida...! La única persona en el mundo en la que confiaba con los ojos cerrados, la única por la que pondría una mano en el fuego, me había engañado y destrozado... de nuevo.
Giré sobre mi cama y me hice un ovillo bajo las sábanas con los ojos cerrados. No estaba llorando, pero tampoco tenía ganas de salir de la comodidad de mi habitación. Se sentía como si ahí dentro nada pudiera hacerme más daño, como si fuera un fuerte infranqueable que me protegía del mundo exterior. Por suerte no tenía que ir a trabajar hasta el día siguiente porque no me sentía preparada siquiera para ponerme en pie.
Podía escuchar a Masie moviéndose de aquí para allá por la casa. Seguramente estaría limpiando o buscando algo que se le había perdido; solía perder las cosas con frecuencia y yo siempre solía encontrárselas.
Suspiré por millonésima vez y me permití el lujo de intentar dormir un poco a pesar de los cientos de pensamientos que rondaban en mi cabeza. Sin embargo, mi intento se vio frustrado diez minutos después porque mi amiga llamó a mi puerta con suavidad.
–Alessa, ¿estás despierta?
Saqué la cabeza de entre las sábanas y la miré. Lo más probable era que ella no me viera porque toda mi habitación estaba sumergida en la oscuridad pese a que era por la tarde. Yo lo había querido así y por eso había bajado la persiana y corrido las cortinas.
![](https://img.wattpad.com/cover/207775194-288-k991057.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Nada más importa si estás junto a mí (Libro #2)
Teen Fiction(Continuación de "Nada más importa") Cuando lo vi de nuevo, no pude apartar mis ojos de los suyos ni por un segundo, la intensidad de su mirada era tan fuerte que me había quedado hipnotizada y petrificada en mi lugar. Mis extremidades comenzaron a...