Amnesia olvídame

Capítulo 17

Tenía un nudo en la garganta de tanto llorar.

Necesitaba contárselo a alguien ya. Necesitaba que la comprendiesen.

Un nombre le rondó la cabeza por alguna razón.

–Sonic.

Cogió su teléfono y marcó el número de manera temblorosa.

–Por favor cógelo.

Un tono, dos tonos, tres tonos.

–Hola Amy. ¿Qué pasa?

–Necesito que vengas a mi casa.

–¿Ha pasado algo?

–Sí. Ven, por favor. Ven.

–Dame dos minutos.

Sonic corrió lo más rápido que pudo a casa de la eriza. Sonaba muy angustiada.

–Pica a la puerta y Amy le abre– ya estoy aquí.

Se abalanzó sobre él para abrazarlo.

Sonic se puso tenso, esos abrazos no le traían buenas sensaciones.

Amy lo notó y se apartó, no quería agobiarlo, solo quería sentir apoyo y un poco de calor humano.

Se sentó en el sofá con los ojos llorosos. Sonic se puso a su lado.

–¿Qué ocurre?

–Yo… Yo… –respira hondo–. Contraté a los detectives Chaotix. Quería averiguar más sobre el asesinato de mi madre y el intento del mío. Quizás tenían una relación –se seca un poco los ojos–.
Leí y recordé cosas para las que no estaba preparada. –Empieza a entrecortarse– n-no puedo… no puedo… –se tapa la cara con las manos y empieza a llorar.

Sonic se quedó bloqueado por unos cuantos segundos. Se había derrumbado delante suyo.

Sentía quemazón en el estómago.

La abrazó y dejó que escondiese la cabeza en su hombro.

Ella soltaba llantos, a lo que él reaccionaba abrazándola más fuerte. Tenía la esperanza de poder calmarla en algún momento. Notaba como su hombro se iba mojando.

Ahora entendía el abrazo que le había dado en la puerta, no eran como los de hace años.

Estuvieron un tiempo abrazados hasta que empezó a llorar más despacio.

–Aquí están los informes –se los acercó aún con los ojos llorosos y se levantó para ir al baño. No sabía si para despejarse la cara o para seguir llorando. Iba secándose las lágrimas conforme caminaba.

Sonic empezó a leer los informes.

Cuanto más leía y más fotos veía, más erizadas estaban las púas de su espalda.

Llegó a la parte de la declaración de Amy.

Ella salió del baño y se sentó a su lado, ya un poco más calmada.

La miró una vez y empezó a leer su declaración.

Amy se fue a prepararse otra manzanilla para calmar más sus nervios.

Al acabar de leer el texto se le formó un nudo en la garganta. No sabía que había vivido eso de forma tan horrible, no conocía esa parte de su pasado.

Siguió leyendo el siguiente informe: "Intento de asesinato de Amy Rose". Lo hacía con mucho detenimiento.

No lo había podido hablar de manera explícita con ella. Ahora podría saber lo que había pasado aquel día.