Isco

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— No puedo creer que me hayas traicionado así — dijo Marco hecho un mar de lágrimas.

Nos encontrábamos en el vestuario. Éramos los últimos, los demás chicos ya estaban con ___ afuera esperándonos.

— ¿Pero de que hablas tú? Ellos se conocieron solos. A demás tu fuiste quien la dejo por Sandra — dije molesto. Tanto tiempo que costó encontrarla para que él hiciera semejante cagada.

— Es tu culpa, mierda, ¿por qué la invitaste? Si ella no hubiera venido probablemente jamás lo hubiera conocido.

— ¿Querías que la dejará en su casa donde estaba pasando un verdadero infierno gracias a ti? Mierda, que egoísta eres — dije dejándolo solo.

Marco podría ser mi mejor amigo pero si hay algo que no tolero es que jueguen con las personas, Marco lo hizo con ____ y por ser así ahora apoyo completamente a ____.

Al salir me encontré con todos platicando muy alegres.

— Listo, ¿vamos? — dije sonriente.

Todos asintieron y nos dirigimos a los coches. Sería una pequeña reunión en mi casa con mis amigos. Estaba por subirme a mi auto cuando Marco se aparece frente a mi.

— ¿Puedo ir con Sandra? — preguntó. Sus ojos estaban cristalinos de tanto llorar.

— Sabes que si, a pesar de todo sigues siendo mi bro — dije dándole una palmada en el hombro.

Y si, si ___ estaría ahí con James no encontraba nada de malo que Marco llevara a Sandra. Total, no podíamos separarnos por un romance fallido.

Ya nos encontrábamos todos en mi casa, solo faltaba Marco con Sandra pero nadie le dio importancia. Para ser sinceros, a nadie le agradaba Sandra.

Nos encontrábamos bebiendo unas cervezas mientras James y ___ se echaban una partida de FIFA. La apuesta al parecer era una cita si él ganaba.

Escuchábamos música probablemente a todo volumen, el ambiente era bueno. Me encontraba charlando con Nacho mientras Dani y Lucas hacían sus tonterías.

Todos dirigieron su mirada a la puerta y ahí fue cuando los vi entrar. Marco llegaba tomado de la mano con Sandra.

— ¡Ja, te gane, ahora saldrás conmigo! — dijo James emocionado.

____ parecía no entender por unos minutos hasta que se dio cuenta que dejó de jugar por mirar a Marco. Perdió por culpa de Marco.

— S... si, felicidades, será genial — dijo sin sin entender nada. Parece que todos pudimos notarlo menos James.

La tensión entre ___ y Marco se sentía a kilómetros, probablemente hasta en otro continente la sentían.

— ¡_____! — le saludó Sandra. Nadie entendía nada, ni el mismo Marco.

¿Ellas eran una especie de amigas?

— ¡Sandra! — trató de imitar el chillido de su voz. Ambas se abrazaron dejándonos a todos excepto a James con la boca abierta.

— Con permiso, te la robó un momento, necesito que me ayude a traer más bebidas — dije tomando de la mano a ____ llevándola conmigo a la cocina — ¿Se puede saber que mierda fue eso? — pregunté sorprendido.

— La he conocido en las gradas. Ella se acercó y me preguntó por James, es muy linda... la verdad, aquí al que debo odiar es a Marco, no a ella, así que no encuentro mal en tal vez no ser su amiga, pero tampoco portarme grosera con ella... no se, al final todo es culpa de Marco y no de ella — dijo encogiéndose de hombros.

Fue ahí cuando me di cuenta de él gran corazón que tiene. Ni Marco ni James la merecían, la merecía yo.


Ah que dijeron, mentira, nadie la merece.
Y me comprometo conmigo mismo a no dejar que ninguno de esos trogloditas la lastimen, nunca, ningún hombre.

Ibiza [MA20]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora