Min YoonGi
Las manos de GaYeong jalaron de mi brazo forzándome a caminar más rápido. Me congele en el momento en que mis ojos cayeron sobre ella, mire hacia otro lado, no quería que sus brillantes ojos conectaran con los míos porque el día de hoy se veía más hermosa de lo que normalmente lo hacía, su cabello caía suavemente por sus hombros y su gran sonrisa eran lo que más podía destacar. Me apresuré para alejarme de esta situación incómoda.
Hoy era el día en que todo terminaría...
Después de la graduación pase un tiempo con GaYeong y su familia; invente una excusa para regresar pronto a casa, lo que más necesitaba en este momento era estar solo y GaYeong lo único que hacía era asfixiarme.
Escuché el sonido de un carro, cuando observé por la ventana noté que HaNeul había llegado con su familia, tenía que ser valiente y hablar con ella pero no pude moverme, mis piernas no respondían y simplemente me di por vencido. Poco a poco me había preparado para este momento, incluso preparé a HaNeul inconscientemente para esto, verla llorar siempre rompe mi corazón, prefiero que me pegue y se aleje a que llore frente a mi, me vuelvo débil y no me gusta esa sensación.
Al llegar la mañana salí en dirección a mi trabajo, ahora trabajaba en una tienda donde venden instrumentos de música y mis turnos ya consumían más mi tiempo, necesito más dinero si de verdad quiero irme y cumplir mi sueño. Y para lograr esto le había pedido a mi jefe la oportunidad de pegar una hoja donde decía que daría clases particulares, gracias a que tengo una buena relación con el fue fácil convencerlo. En mi hora de comida escribí y borre mil veces en las hojas de mi cuaderno, simplemente no encontraba las palabras ideales para terminar una relación como la nuestra, cada que cerraba mis ojos podía verla sonriendo y eso me destrozaba más...
¿No puedes simplemente desaparecer?
Llegó una foto a mi teléfono, al abrirlo pude notar que HaNeul había enviado una foto en donde se mostraba su nombre en la lista de los aceptados en la escuela de enfermería de Seúl, inconscientemente una sonrisa se formó en mi rostro, sin dudarlo le envié un mensaje felicitándola esperando que en el ella notara todo lo que sentía en mi interior; su única respuesta fue un "Gracias".
Al llegar la noche y estar solo en mi habitación comencé a cerrar los ojos recordando todo lo bueno de estos años, cuando ella entró a mi cuarto por primera vez y jugamos por horas, los días en que me había convencido de hacer cosas que no me imaginaba como disfrazarme de personajes raros en halloween, las veces en que ella venía a mi cuarto y me ayudaba con mis tareas, todos esos recuerdos que me hacían sonreír e incluso reír. Abrí mi mochila para sacar el cuaderno que ella me había regalado, al pasar entre las páginas caí en un montón de hojas faltantes, hojas en las que había escrito mis ideas más profundas y en un desquito había arrancado y tirado por la basura, cuando quise recuperarlas estas ya estaban completamente perdidas para mi.
Estoy cansado de un amor así, me he repetido mil veces que me debo de alejar pero si sonrisa me sigue sosteniendo a su lado, mi cerebro me dice que me aleje pero mis manos y piernas me mantienen cerca de ella, mis dedos siguen jugando con nuestra pulsera de amigos...
Al llegar la noche noté como HaNeul ya había llegado a su casa, dude si debería salir y hablar con ella porque sabía que todos los escudos que ya le había logrado poner a mi corazón se derrumbarían en el momento en el que mis ojos se encontraran con los de ella. Mi cuerpo fue más rápido y me llevo afuera de mi casa, me acerqué con cuidado a la casa del vecino y arranque una rosa roja, en el momento que lo hice está corto mi dedo con una de sus espinas ¿Es esto una señal? ¿Si sigo forzándome me seguiré lastimando? ¿Estos sentimientos me están lastimando cuando no deberían hacerlo? ¿Ella es una flor llena de espinas que me seguirán lastimando?
Sacudí mi cabeza ante las preguntas que se generaban en mi cabeza, tome un gran respiro y comencé a lanzar pequeñas piedras a la ventana de ella, tomo unos segundos para que ella se asomara, le hice una señal para que bajara a lo cual ella rápidamente entendió.
— Me alegro por ti...Tus sueños se están cumpliendo...Estoy feliz por ti - golpe mi cabeza.— En verdad hay algo que tengo que confesarte...- di un salto cuando la puerta de su casa se abrió, mi corazón comenzó a latir con fuerza.
¿Me habrá escuchado? Ella dio unos pasos al frente mientras me observaba con una sonrisa, ella parecía un tanto confundida y comenzaría a hacer preguntas de las cuales no estoy seguro tener respuestas, fui más rápido y estire mi mano mostrándole la rosa, ella abrió sus ojos en sorpresa, incluso yo estaba sorprendido de mis acciones.
— ¿No la vas a tomar? Mi brazo se está cansando - Me queje para darle a entender que esto no era algo de mucha importancia, aunque si lo era. Ella sonrió para tomarla entre sus manos y llevarla cerca de su nariz apreciando el olor de esta.
— Tu no haces cosas cómo estás - Ells hablo con tranquilidad mostrando una tímida sonrisa.
— Tenía que felicitarte de alguna manera, ser aceptada en la universidad de Seúl - comencé a hablar soñando tranquilo pero mi corazón no paraba de latir con fuerzas, seguramente si me prestabas demasiada atención notarías las palpitaciones en mi cuello.— Solo los nerds son aceptados, claro que te aceptarían - Ella se acercó dándome un golpe en mi brazo provocando mi risa.— Estoy muy feliz por ti...- le confesé mientras sonreía, ella se quedó observándome con aquellos ojos brillantes, tome un tiempo para analizar todo su rostro, ella es hermosa ante los ojos de todos.
Mi cuerpo se tensó en el momento en que ella se acercaba a mi abrazándome con fuerza, si ella me sujetaba con más fuerza escucharía el incontrolable latir de mi corazón, sentir la calidez de su cuerpo junto al mío me hizo no querer nunca separarme de ella, con miedo lleve mis manos a su espalda aceptando su abrazo, antes no me hubiera sentido nervioso por abrazarlo pero extrañamente ahora la cercanía con ella me hacía nervioso.
Se que dije que hoy sería el día en que todo terminaría con ella pero simplemente no pude, no puedo ver las lágrimas en sus ojos en un día tan feliz para ella. La tome del brazo llevándola a caminar por las oscuras noches de la ciudad, todo estaba prácticamente vacío, solo algunas personas caminaban, llegamos a un parque en donde nos sentamos y comenzamos a platicar de cosas cualquiera esas pláticas que los amigos suelen tener, cuando el tiempo pasa y simplemente no se dan cuenta.
Me prometí que hoy era el día en que nos separaríamos pero eran las dos de la mañana y estábamos riendo sin control, me sentía feliz y libre de preocupaciones, sentía que el pequeño YoonGi estaba jugando con la pequeña HaNeul.
Ahora se que estoy totalmente perdido...
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Feliz San Valentín 🥰Fernanda💅🏻
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Red String [Min YoonGi]
Teen FictionNo creo en el destino, pero creo qué hay algo que nos mantiene unidos. 🌟🌟🌟 La leyenda del hilo rojo es una creencia procedente de oriente en la que se afirma que cada persona está destinada a encontrarse con su alma gemela. Puede ser que el hilo...