𝐁𝐀𝐁𝐘, 𝐈'𝐌 𝐘𝐎𝐔𝐑𝐒 (𝐑𝐔𝐄𝐋 𝐕𝐀𝐍 𝐃𝐈𝐉𝐊)

𝘤𝘶𝘢𝘵𝘳𝘰.

metí un cheeto a mi boca y me reí mirando la pantalla frente a mí. la verdad no tenía ni idea de donde estaban todos, bueno, sí sabía: algunos salieron a arreglar unas cosas y otros estaban en el lugar donde sería el próximo show. yo no tenía nada mejor que hacer más que quedarme en la habitación del hotel y mirar películas de marvel. acomodo la almohada debajo de mi cabeza y me cubro con la manta lo máximo posible. pasan como diez minutos cuando unos golpes en mi puerta me distraen de la película.

que flojera levantarme.

tomo mi celular de la mesita de noche y entro al grupo en el que estoy con el team. envío un mensaje preguntando si alguien de ellos está tocando mi puerta, pero todos dicen que no. en menos de un segundo recibo un mensaje privado de ruel diciendo que es él.

—¡pasa!— grito tirando el celular en algún lugar de la cama. el alto cuerpo de ruel se detiene frente al televisor, así que me quejo tirándole una bolita de papel —apártate, edificio.

—que amable.— suelta una risita y mira la televisión curioso —oh mierda, iron man.— dice dejándose caer a mi lado en la cama y robando mi bolsa de cheetos.

—hey.— me quejé volviendo a quitársela.

—comparte.— me miró con un puchero. torcí los ojos y él sonrió orgulloso de haberme convencido, dejando un rápido beso en mi mejilla que me dejó sorprendida. no me esperaba eso para nada. no dije ni una palabra, solo me quedé en silencio sintiendo mis mejillas rojas y rogando porque no volteara a mirarme. lo miré de reojo y vi como sus mejillas estaban algo rosadas, pero se veía muy tranquilo.

ambos nos quedamos en silencio por unos segundos, mirando a robert interpretar su fabuloso papel como tony stark, pero ruel decidió aclarar su garganta y romper el silencio.

—amo las películas de marvel.— me contó mirando entretenido la pantalla.

—¿en serio? yo también.— sonreí mirándolo por unos segundos.

—¿cuál es tu favorita?— me preguntó recostándose de lado y apoyando su mejilla en su puño para mirarme mejor. miré el techo por unos segundos y me lo pensé antes de responder.

—no lo sé... uhm...— solté una risita —no puedo decidirme.

—bueno, pero supongo que tienes claro quien es tu favorito.

—obviamente spiderman.— lo miré con una sonrisa y estiró su otra mano para que la chocara con él.

—es bueno saber que eres team iron man, sino hubiéramos tenido algunos problemas.— dijo haciéndome reír.

camila's.

—seguro debe tener mucha hambre, la dejamos sola todo el día.— dije saliendo del ascensor junto a shawn. me miró con una sonrisa.

—estoy 101% seguro de que llamó al room service y pidió algo de comer.— ambos nos reímos sabiendo que eso era más que cierto. como sea, igual habíamos llegado a comprarle una hamburguesa como forma de disculpa por desaparecernos casi todo el día. en unas horas iba a ser el próximo show y todos debían comenzar a estar listos para irnos.

caminamos por el largo pasillo hasta llegar a su habitación y tocar esperando que abriera. cosa que no pasó. volvimos a intentarlo, pero nada.

—quizás está dormida.— me encogí de hombros.

—andrew me dio una tarjeta de su puerta.— shawn la sacó de su bolsillo y abrió dejándome pasar primero. entramos sin hacer el mínimo ruido posible y mi corazón dio un vuelco al ver a leah y ruel dormidos. la televisión estaba encendida con una película que no conocía, y había bolsas de frituras y palomitas por todas partes. no estaban abrazados ni nada, pero verlos así era muy lindo. ambos dormían frente a frente, con una distancia prudente, mientras compartían la manta amarilla, aunque leah se robaba gran parte de esta. eran adorables. no perdí tiempo en tomar el celular de shawn y acercarme a tomarles una foto que sería enviada directo a karen.

ella amaría esta foto tanto o más que yo.

ambas somos fieles creyentes de que estos dos van a terminar juntos. o al menos eso anhelamos.

—mira, son muy lindos.— sonreí tomando una foto más y mirando a shawn emocionada.

—odio decirlo, pero tienes razón.— soltó un suspiro y dejó la bolsa de comida sobre la mesa de noche —muy lindos y todo, pero tenemos que despertarlos.

—¡shawn no!— me quejé en un tono bajito —déjalos.

—¿por qué? tenemos el show en unas horas, ruel tiene que irse y estar listo, dormido no lo va a hacer.

—sabes que eso es solo un pretexto porque estás celoso.— me crucé de brazos recibiendo un gruñido como respuesta. a veces podía llegar a ser muy protector cuando se trataba de sus hermanas, pero él solo quería lo mejor para ellas. lo entendía, yo también quería que mi hermana menor no fuera lastimada nunca por nadie, pero no podía impedir que ella creciera y quisiera experimentar cosas nuevas. mucho menos algo tan bonito como el amor.

—está bien, que duerman un poco más, pero vengo a despertarlos en veinte minutos ¿si?— entrelacé nuestras manos y asentí arrastrándolo fuera de la habitación.

—¿crees que se gusten?— pregunté emocionada cuando salimos al pasillo y caminamos hasta nuestra habitación. shawn lloriqueó como un niño y me miró suplicante —¿qué?— solté una risa viendo su mueca.

—no quiero hablar sobre si mi hermana y ruel se gustan o no.

—¿y por qué no?

—porque si se gustan significa que van a ser novios. yo no quiero que me hermanita tenga novio, ¡aún es una bebé!

—aaliyah es menor que ella y ya tiene novio.— me crucé de brazos mirándolo tirarse en la cama.

—lo sé, pero yo me encargué de amenazar a jordan cuando estaban saliendo.— confesó haciéndome soltar una carcajada. me tiré a su lado. shawn me abrazó por la cintura y me apegó a su cuerpo. pasé mis manos por su cabello viéndolo cerrar los ojos.

—cariño, no puedes evitar que ellas crezcan.

—ya sé, ya sé.— suspiró cansado —supongo que ruel tiene ventaja porque me cae bien... y siempre la hace reír, así que supongo que eso es algo bueno.

—es un buen chico.

—como sea, por ahora solo son amigos. hay que dejar de hablar de eso.— bufó escondiendo su cara en mi cuello y haciéndome reír —hay que dormir.