—sí, dime.— le di una pequeña sonrisa nerviosa.—primero que nada, quiero decirte que te quiero muchísimo, porque siento que no te lo he dicho lo suficiente en estos últimos días. no quiero que lo olvides nunca ¿si?— me miró directo a los ojos y asentí, invitándolo a que siguiera hablando —no importa si olvido decirlo, siempre te voy a querer. y me siento muy mal por haber peleado contigo. después de que te fuiste me arrepentí de lo que dije, pero no quise ir contigo porque sabía que ibas a estar muy enojada y querrías tiempo sola. si hubiera sabido que ibas a terminarte peleando con mary entonces sí te hubiera seguido para que eso no pasara. también quiero pedirte perdon por haberte ignorado, te juro que yo no lo hacía con intención, fui un idiota al hacerlo. yo solo estaba emocionado porque podía ver a una de mis amigas de australia y quería pasar tiempo con ella. quería que me contara de todo lo que me había perdido. extraño mucho a mis amigos y que mary haya venido fue como tener una parte de ellos conmigo... no lo sé, ahora que lo digo suena estúpido. ayer estuve el resto del día pensando en todo lo que me dijiste y tienes razón. siempre tienes la razón. no quería creer lo que me decías de mary porque estaba aferrado a la idea de esa mejor amiga buena de hace unos años, de la que siempre me apoyaba en todo y que yo pensaba que no me haría nada malo. no quería aceptar que sí le gustaba y que ella había cambiado, porque eso significaba perder a otro amigo, y estoy harto de eso. pero eso no es ningún pretexto, y no pienso defenderla. además no puedo fingir que todo está bien cuando vino a hacer todos estos problemas entre nosotros. ¿dónde está? quiero hablar con ella, las cosas no se pueden quedar así.
—no, no tiene caso, ya se fue. coco la corrió, y shawn también.— le conté con una sonrisa divertida, tratando de quitar la tensión del momento —y que bueno que aceptas que tengo la razón, porque siempre la tengo, al menos pelearme con ella sirvió de algo.— bromeé haciéndolo reír. negó con una sonrisa y después suspiró, mirándome a los ojos.
—perdón por hacerte sentir mal. no valió la pena, nada de lo que hice y dije en estos día valió la pena porque solo me llevó a estar mal contigo, y eso es lo último que quiero. perdóname, por favor.— me miró suplicante con sus ojos tan bonitos —ya no quiero estar así contigo, no me gusta. acepto que estuve muy mal y que fue muy bajo dejarme manipular por ella. jamás debí escucharla, ni siquiera debí invitarla al show desde un principio. te juro que no la habría invitado si hubiera sabido que iba a provocar todo esto.— lo miré en silencio por unos segundos y después suspiré.
—claro que te perdono, pero si vuelves a hacer algo como eso la próxima persona a la que golpee será a ti.— dije seria, sacándole una risita.
—estaría de acuerdo con eso.— sonrió acercándose más a mí y mirando mis labios de forma rápida —¿puedo...?
—sí, tonto.— me reí tomando sus mejillas y besándolo.
¡por fin volvía a besarlo! habían sido solamente unos días pero se sentía tan bien el volver a tenerlo cerca. no se hizo mucho del rogar, solo correspondió feliz y yo llevé mis manos a su cuello para acercarlo más a mí. había extrañado esto. había extrañado tenerlo cerca. esos cinco días fueron como una eternidad para mí.
—no quiero ser un encimoso, pero admito que extrañé no estar contigo todo el día.— se separó un poco —no vuelvo a hacer eso nunca jamás, fue horrible.
—anda, vuelve a hacerle caso a mary.— lo molesté. bufó divertido y volvió a abrazarme, dejando un beso en mi cabello. lo abracé por el cuello y apoyé mi cabeza en su hombro cuando me tomó entre sus brazos. me alzó de la silla para sentarse conmigo encima. acaricié su cabello y jugué con el que le caía por la frente. yo en serio tenía algo con su cabello.
—te extrañé mucho.— murmuró mirándome con su bonita sonrisa. me ponía muy nerviosa.
—y yo a ti.— admití concentrada en acariciar su carita —y no creas que se me va a olvidar que me dejaste sola en la noche de series por irte con ella, eh.— le reclamé viéndolo hacer una mueca.
—te juro que quería quedarme contigo y comer esos cheetos juntos, pero ella estaba insistiendo demasiado y dijo que no podía ser mal amigo y dejarla sola. no debí haber ido, ni siquiera tenía ganas de salir porque estaba cansado.— se quejó apoyando su cabeza en mi hombro.
—no sé si eres muy bueno o muy tonto.— dije ganándome una mirada indignada de su parte. me reí y acaricié su mejilla —sí, eres la dos.— me burlé.
—lo sé.— murmuró enredando sus brazos en su cuerpo y volviendo a abrazarme. amaba acurrucarme en él, era muy cómodo.
—¿por qué te alejabas de mí cada vez que mary estaba cerca?— pregunté bajito, tomando su mano y jugando con sus dedos para no hacer mucho contacto visual. ruel suspiró.
—porque ella me dijo que seguro iba a cansarte si estaba encima tuyo todo el tiempo. me dijo que probablemente ibas a aburrirte de mí y que no te gustaba el afecto. y sé que es estúpido porque ni siquiera te conoce, pero le creí, pensé que tal vez podría ser cierto... por favor perdóname, nunca debí hacerle caso a mary. lo único que buscaba era alejarme de ti. yo jamás haría eso. y te prometo que todo esto jamás va a volver a pasar.— dijo entrelazando nuestras manos. quizás seguía un poco resentida, pero sabía muy bien que ya no tenía caso enojarme con él. lo único que quería era que volviera todo a la normalidad. además me conocía demasiado y sabía perfectamente que no podía estar más tiempo lejos de él.
—está bien, te perdono, y ya vamos a olvidar todo esto.— me separé de su abrazo y lo miré con seriedad —pero quiero aclarar que tom holland jamás me trataría de esa forma.
—ya se me hacía que te habías tardado mucho en mencionar a tom.— torció los ojos con una sonrisa divertida —pero admito que extrañé que me molestaras con eso.— suspiró mirándome directo a los ojos. le sonreí.
—ya vi que se fue la loca.— ambos miramos al frente, donde estaba coco con las manos dentro de sus chaqueta —¿ya están bien?
—sí.— ruel sonrió, besando mi mejilla.
que bien se sentía que todo fuera como antes.
ESTÁS LEYENDO
𝐁𝐀𝐁𝐘, 𝐈'𝐌 𝐘𝐎𝐔𝐑𝐒 (𝐑𝐔𝐄𝐋 𝐕𝐀𝐍 𝐃𝐈𝐉𝐊)
Fanfiction❝ bebé, soy tuyo hasta que las estrellas caigan del cielo, o en otras palabras; hasta que muera. ❞ primer parte. minúsculas intencionales.