𝘵𝘳𝘦𝘪𝘯𝘵𝘢 𝘺 𝘤𝘪𝘯𝘤𝘰.

1.5K 161 125
                                    

otra notita: ¿por qué leen este cochinero? gracias por los 10k, sucias 🥺✌️




bueno, bueno, bueno... estábamos en problemas. no tenía nada más que decir. ¿qué probabilidad había de quedar embarazada la primera vez que no usas protección? ¡todo es culpa de ruel! por ser un provocador, por ser tan hermoso y... pues porque quiero. shawn nos va a matar. nos va a matar a los dos y no sé qué vamos a hacer si las pruebas que tenemos frente a nosotros dan positivo. ¿cómo les vamos a decir esto a todos? ¡que vergüenza! aunque hay una posibilidad muy grande de que la prueba también diga negativo. ojalá que así sea, ¿y si a tom holland se le ocurre notar mi existencia? ¡no puedo estar embarazada si él quiere hacer eso!

—creo que me voy a desmayar.— ruel caminaba de un lado a otro por toda la habitación, poniéndome más nerviosa de lo que ya lo estaba.

—ruel, no estás ayudando en nada, por favor quédate quieto.— me quejé con las manos en el cabello, frustrada.

—es que... ay, creo que voy a vomitar.— lloriqueó sentándose a mi lado y mirándome preocupado. claro que los dos estábamos que sudábamos nervios por todas partes. ¡olvidamos la protección!

¡teníamos un trabajo! ¡uno! y olvidamos la única cosa importante que no debíamos olvidar. el pinche condón.

—ruel, quiero decirte algo muy importante.— dije tomando su mano y mirándolo directo a los ojos cuando se acercó hasta donde yo estaba.

—¿qué cosa?— me preguntó nervioso.

—si estoy embarazada quiero que se llame tom holland, aunque holland sea apellido pero me vale. o peter, sí, quiero que se llame peter parker. no, mejor que se llame...

—ni siquiera en momentos así te sacas a tom de la cabeza. no voy a dejar que le pongas el nombre de la competencia.— se quejó indignado, soltando mi mano —¿qué? ¿también me vas a decir que te lo imaginaste a él o qué?— abrí la boca para responder pero me interrumpió —¡mejor ni me digas!

—hey, sabes muy bien que tom no es la competencia.— le sonreí y volví a tomar su mano.

—¿ah no?— me preguntó con una sonrisa muy bonita.

—pues no, si tom me hiciera caso ni siquiera tendría que competir con nadie. estoy a sus órdenes.

—me caes mal.— bufó volviendo a soltar mano.

ya podía imaginarme el desastre que se iba a hacer si los demás se enteraran de todo esto. casi podía escuchar a shawn gritando en mi cara, a ruel llorando cuando lo golpee, a coco haciendo escándalo...

teníamos dos pruebas de embarazo frente a nosotros, sin poder ver los resultados al estar las dos volteadas hacia abajo. dos siempre era mejor que una ¿no?

—bueno, yo giro una y tú la otra.— dije tomando una bocanada de aire, tratando de prepararme mentalmente. la verdad es que no estaba lista. jamás iba a estarlo. ¡no me imagino teniendo un bebé! ¡es una responsabilidad muy grande para dos estúpidos como nosotros! a duras penas me mantengo viva a base de cheetos y café, no voy a poder alimentar a un bebé. y ni hablar de ruel, ¡él ni siquiera sabe saltar la cuerda! ¿cómo va a cambiar pañales? esto es una locura. somos unos irresponsables, nos odio por esto.

—oye, pero... ¿qué no hiciste pipí en esa cosa?— me miró con una mueca de disgusto. lo miré mal y él me sonrió inocente —es broma, es broma.

—a la cuenta de tres.— murmuré con las manos temblorosas.

no quería ver los resultados. no quería hacerlo.

—shawn me va a matar. primero me va a romper su guitarra en la cabeza, después me va a ahorcar, me va a pasar con su auto por encima, me va a arrastrar por todas las calles hasta llegar a canadá y me va a ahogar en el lago para después colgarme desde el balcón de su departamento.— decía ruel moviendo la pierna nervioso, más pálido que una hoja de papel.

—¡ya cállate!— me quejé golpeando su brazo.

—¡no puedo! estoy muy nervioso y cuando estoy nervioso hablo mucho, y cuando hablo mucho digo estupideces y...

—te juro que si no te callas quien te va a matar voy a ser yo y no shawn.

—ya, ya.— inhaló y exhaló, dando unos saltitos para sacarse los nervios de encima.

—a la cuenta de tres.— repetí, intercambiando miradas con él una última vez —1...

—2...

—3...— dijimos al unísono, cada uno girando una de las pruebas que tenía en la mano. casi me desmayo al ver las dos líneas en la mía. creo que el corazón me había dejado de latir. no podía ser posible.

—ay, no...— murmuré sintiendo que me daba un ataque en cualquier momento. creo que voy a vomitar.

—¡sí, no se va a llamar tom holland!— chilló ruel haciendo un bailecito ridículo. lo miré confundida y tomé su mano para revisar la prueba. una sola línea. fruncí el ceño confundida y volví a mirar la mía si entender —¿por qué tienes esa cara? no entiendo, dice que no.

—no, mira.— dije mostrándole la otra prueba. me miró sin entender nada.

una positiva y otra negativa.

ahora la pregunta aquí era: ¿cuál de las dos tenía el resultado correcto?





—¿y? ¿qué pasó? ¿qué te dijo?— ruel se acercó a mí a penas me vio salir de la oficina de la doctora, atacándome con preguntas —¿tengo que prepararme para ser golpeado con shawn? lo he visto ir más seguido al gimnasio, me preocupa mi estado físico, de eso vivo, seguro que me rompe un hueso de un solo golpe.— pasó grueso, moviendo las manos de forma nerviosa.

solté un suspiro y negué. sentía que me había quitado un peso encime de encima.

—no, idiota.— dije riendo más de nervios que de nada. en serio me había dado un buen susto. no estaba preparada para tener un bebé. yo sé que siempre bromeaba diciendo que quería uno de tom holland, pero no quiero volver a pasar por estos sustos nunca más.

no son sustos que dan gusto.

—¡que bueno!— suspiró aliviado —esto hay que festejarlo.— se acercó a mí con una sonrisa y quiso besarme, pero me alejé.

—tú no aprendes ¿verdad?— me quejé negando y alejándolo —mejor ya vámonos antes de que nos busquen los demás.— suspiré tomando su mano.

—estoy muy feliz.— sonrió saliendo del lugar conmigo —feliz porque no se va a llamar tom. no podía permitir eso, ¿estás loca? me preocupa que te guste tanto tom holland, no es normal. ¿no quieres ir con un psicólogo? a lo mejor tienes algo.

—ya cállate ruel.





pues no hubo bendición para los irresponsables
¿saben qué significa eso?

𝐁𝐀𝐁𝐘, 𝐈'𝐌 𝐘𝐎𝐔𝐑𝐒    (𝐑𝐔𝐄𝐋 𝐕𝐀𝐍 𝐃𝐈𝐉𝐊)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora