𝐁𝐀𝐁𝐘, 𝐈'𝐌 𝐘𝐎𝐔𝐑𝐒 (𝐑𝐔𝐄𝐋 𝐕𝐀𝐍 𝐃𝐈𝐉𝐊)

𝘷𝘦𝘪𝘯𝘵𝘪𝘤𝘶𝘢𝘵𝘳𝘰.

me puse uno de los hoodies que le había robado a ruel y, sin siquiera molestarme en ponerme zapatos o peinarme, me levanté de un salto de mi cama para ir a buscarlo. ya me había acostumbrado a su presencia y ahora era aburrido estar sin él. además no tenía nada mejor que hacer más que ir a molestarlo. mi familia se había ido hace unos días y últimamente solo me la pasaba chismeando con coco o pegada a ruel. no había nada más interesante que hacer.

—hey.— sonreí entrando a la habitación después de que gritara un "pasa". lo miré sentado en su cama con una guitarra y su celular frente a la mesita de noche —¿qué haces?— pregunté curiosa, acercándome a él.

—estoy en instagram.— me sonrió antes de volver a mirar su celular —miren quien acaba de llegar.— dijo moviéndolo en mi dirección para que sus fans pudieran verme.

—hola.— hice un saludo con mi mano —si quieres puedo irme.— le dije no queriendo interrumpir.

—no, quédate.— me sonrió tomando mi muñeca y sentándome a su lado en la cama.

—¿vas a cantar?— asintió y yo sonreí —uy, un concierto privado gratis.— dije haciéndolo reír.

—¿alguna recomendación?— me miró a los ojos y le dio un rápido vistazo a mis labios. negué divertida.

—¿qué tal esa canción de daniel caesar que estuviste cantando hace unos días?— pregunté con una sonrisa, cruzando mis piernas para estar más cómoda. pareció pensar a que canción me refería y después comenzó a tocar unos acordes.

—are you okay?— cantó de forma suave, mirando su celular y de vez en cuando a mí. yo me dediqué a admirarlo mientras cantaba —been starin' at your face from across the room now, you seem out of place...— siguió cantando y tocando la guitarra, mientras yo solo le sonreía y lo miraba sin perderme ningún detalle. se veía tan bien, sonaba tan bien; su voz era lo mejor que mis oídos podían escuchar.

—ruel, ¿ya viste todas las personas que te están viendo?— coco entró sin siquiera tocar la puerta, con su celular en la mano. solté una risita y miré como ruel dejaba de tocar para mirar a su hermana con une mueca de diversión.

—sí coco, puedo verlo aquí ¿sabes? estoy tratando de cantar, ya puedes irte.

—deberías hacer algo divertido si no quieres que se vayan. todos están pidiendo que haga presencia, si no fueras aburrido no lo pedirían.

—ella solo quiere aparecer aquí, quiere más seguidores.— se burló mirando a la cámara. coco torció los ojos y se fue. ruel iba a volver a lo que estaba haciendo, pero la puerta se volvió a abrir.

—ya perdiste a mil personas.

—¡coco vete!

•

ruel había visto que había un parque de diversiones cerca, y bueno, aquí estamos. coco y connor han venido con nosotros, pero es como si estuviéramos solos porque en cuanto pagamos las entradas ellos se desaparecieron y nos abandonaron. solo esperaba que no se olvidaran de nosotros y nos dejaran aquí.

—creo que primero deberíamos comer y después ir a la montaña rusa.— dijo entrelazando nuestras manos y mirando a todos lados mientras caminábamos.

—creo que esa es una muy buena idea si quieres vomitar.— me burlé.

—mejor vamos primero por algo de agua.— cambió de planes, dando media vuelta y llevándome detrás suyo. caminamos entre las demás personas hasta llegar a un lugar donde vendían agua. ruel compró dos botellas y se tomó la suya antes de que siquiera pudiera abrir la mía —¿qué? tenía sed.— se rió volviendo a tomar mi mano —dame un besito.— hizo un puchero y yo alejé su cara con mi mano.