Para desgracia de muchos y suerte de algunos otros, el ansiado domingo en el que se disputaría el primer partido de Quidditch de la temporada había llegado.Emma estaba dentro de uno de los vestidores, escondida en un rincón del vestuario de Gryffindor. Hacía por lo menos cinco minutos que se había terminado de poner el uniforme para el partido, pero no quería salir antes de tiempo porque sabía lo que le esperaba.
En aquel vestidor estaban su novio falso, el chico que le gustaba y el chico que la había besado.
Tras aquel beso tan repentino, Emma había tomado la decisión más inmadura y menos meditada de todas y había huido para después tratar de evitar cruzarse con Fred por todos los medios. Había llegado tarde a todas las comidas para poder elegir no sentarse a su lado, se había pegado a las chicas en todas las clases y había procurado ir siempre acompañada de los demás por los pasillos. El pobre chico había intentado hablar con ella en múltiples ocasiones, pero ella se había alejado.
En su interior, sabía que era lo mejor hasta que no supiera con certeza qué era lo que quería decir. Sentía que si intentaba expresarse solo saldría un batiburrillo de cosas sin sentido que solo empeoraría la situación, y por más confuso que todo estaba siendo, Emma no quería estropear su amistad con él por nada del mundo.
Aunque quizás ya sea un poco tarde.
Simplemente, no sabía qué sentir.
No estaba enfadada por que Fred la hubiera besado. Estaba, sobre todo, sorprendida, porque no lo había visto venir. Había pasado muchas horas junto a él y no se había dado cuenta de que él se sentía atraído por ella. De hecho, pensaba que le daba reparo estar junto a ella, por cómo siempre retiraba la mirada y a veces se quedaba callado.
Ahora lo veo diferente, claro.
Lo que tampoco sabía era si le había gustado el beso o no.
Desde luego, no le había desagradado. Recordaba a la perfección la suavidad con la que el chico le había acariciado la mejilla y el respeto con el que la había besado, con miedo pero con decisión. Recordaba que su cuerpo había reaccionado bien a aquel gesto.
No se había fijado verdaderamente en Fred hasta ese momento, claro, porque había estado demasiado ocupada tirándose de los pelos por su hermano. Tal vez, Fred había estado siempre ahí y Emma no lo había tenido en cuenta lo suficiente. Él era claramente más atento que su hermano, y al menos no la utilizaba por sus apuntes.
Bueno, a veces sí que se los doy. ¡Pero me los pide por favor!
Sabía que en algún momento tendría que enfrentarse a Fred y hablar de lo ocurrido, pero hasta entonces había fingido estar muy nerviosa y concentrada por el partido, asegurando que eso era lo único que la preocupaba. Después, cuando pasara el evento, ya se ocuparía de todo lo demás.
Solo se atrevió a salir del vestidor cuando escuchó que Angelina salía del suyo. La chica le guiñó el ojo para darle confianza y Emma le sonrió para agradecérselo, pero justo en aquel momento escuchó un trueno ensordecedor.
Miró hacia el exterior de la tienda y observó con desasosiego la tormenta que se había desatado. Llovía tanto que dudaba que fuera a ser posible volar en aquellas condiciones, pero el Quidditch era un deporte que no solía suspenderse por absolutamente ninguna razón, contra todo sentido común. Solo de pensar en jugar a la intemperie, Emma sintió un escalofrío que hizo rebotar sus huesos.
Oliver llamó al equipo para que formara un círculo a su alrededor. Comenzó a repetir la estrategia que habían repasado durante toda la semana, enumeró las virtudes y defectos de los jugadores contrarios y dio un bonito discurso de motivación. Cada vez que el chico apuntaba con el dedo a la pizarra, Emma podía ver cómo le temblaban las manos. Iba a ser muy difícil jugar con aquel temporal, pero al menos ellos contaban con la ventaja de que habían entrenado durante más tiempo que los de Hufflepuff, ya que el partido tendría que haber sido contra Slytherin y no contra ellos.
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I Didn't See You · George Weasley ·.
FanfictionElla lo ve todo. Él solo la ve a ella. Tras la trágica e inesperada muerte de su madre, Emma Blackwood deja atrás su vida en Estados Unidos y sus estudios en la escuela de magia americana Ilvermorny para trasladarse a Hogwarts. Allí, su vida dará un...