𝐌𝐈𝐋𝐈𝐓𝐀𝐑 ♥︎ᵎ Emiliaco

09

Joaquín

Cuando me aproximé a él y lo envolví en un abrazo, sentí que fue lo más arriesgado que había hecho en mi vida. Abracé a Emilio Blissett y juro por Dios que se sintió bien, sus brazos me envolvieron segundos después, por un segundo creí que me empujaría, pero no lo hizo, en cambio, me correspondió por completo.

La primera vez que hablé con él, me pareció un engreído irrespetuoso, alguien a quien nunca le hablaría, pero ahora ya no me parece así. Solo ha pasado un mes desde que hablé con él por primera vez, hemos tenido roces, nos hemos dicho mierdas pero al final del día, siempre terminamos agradeciéndonos por algo. Irónico.

Admito que me asusta todo esto, como hemos avanzado, como pasamos de un "Gracias, Hudges" a un "Gracias, Joaquín", aunque sé que no suena como una gran hazaña, es un cambio, y no sé por qué pero puedo llegar a creer que tiene una gran importancia, en mi interior puedo sentirlo así.

Me asusta saber que lo abracé, y peor aún, que él me abrazó también. Pero lo que más me asusta es que ya han pasado cinco días desde eso y no me lo he sacado de la cabeza, o cuando me ayudó con la posición del arma, como tocó mis brazos con delicadeza, como susurró en mi oído y su aliento se emanó de forma tan profunda en mi cuello, erizándome por completo, provocando en mi estómago un revoltijo y una estúpida corriente cruzar mi espina dorsal que casi me hace temblar las piernas. Su simple tacto provoca en mi ser un sinfín de sensaciones.

¿Quién coño no se asusta si se siente así? Porque yo sí, estoy muy asustado.

No lo he visto ni una sola vez en estos cinco días, sé que mañana debemos entrenar otra vez, tendré que verlo, tal vez tocarlo, y hay un poco de ansiedad en mí por eso. Muy en el fondo, ya quiero que sea mañana.

Pero mientras deseo cosas absurdas que me producen un conflicto interno, veo cómo Nico y Cody se golpean. Han estado discutiendo todo el día, si no es por la almohada es por las gafas, y si no es por las gafas es por el plato de comida. Y ahora yacen en el suelo tirándose manotazos porque Cody dijo que ya no quería hablar más con Nicolás, así que este comenzó al golpearlo... y aquí están, rodando como troncos.

— ¿Cuánto les falta? —estoy sentado frente a ellos viendo el espectáculo, Lucky y Ben ríen de algo mientras ven una revista, Garret se fuma un cigarrillo mientras corta un pedazo de madera con su navaja y Robert con Thomas hablan de una chica súper sexy que vieron en una película. Ya son pasados las nueve así que ya estamos todos aquí, todos lucen cansados, hoy día ha sido agotador, nos hicieron corten por tres horas y luego armar nuestras propias carpas, desarmas y volverlas a armar veinte veces. Estoy muerto.

Aunque esta vez, no fui el peor en hacerlo. Y además, la buena e infaltable noticia, es que di un tiro demasiado bueno, no perfecto, pero fue suficiente para que el sargento cerrara la boca. He pensado en agradecerle a Emilio, pero no lo he visto.

—Dales dos minutos y se cansan. —me dice Garret sin mirarme, le da una calada a su cigarrillo y suelta el humo por la nariz.

No le respondo, me quedo mirando a ambos chicos hasta que Cody se detiene y se levanta, tiene todos los brazos rasguñados, la cara roja y esta sudado. Nico está rojo igualmente y sudado pero no tiene ningún rasguño.

—Me va a salir un moretón en la mejilla. —le miro con determinación la mejilla a Cody, y al parecer está un poco hinchada.

—Lo siento, no quise golpearte fuerte. —menciona el pelinegro con un pequeño puchero en sus labios.

— ¿No? Me diste una patada en la mejilla Nico, estás loco. —la verdad se ve muy enojado.

Busca sus lentes y cuando los encuentra, los deja sobre su cama para proceder a tirarse a ella boca abajo, cubriendo su cabeza con la almohada. ¿Es que siempre hace el mismo drama?