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"¿Sería buena idea decirle de verse en persona?"

Aquella idea no duró mucho en su cabeza.

No es que San no quisiera conocer por fin a ese chico, es solo que tenía miedo. 

¿Y si cuando se vieran le decepcionaba? ¿Y si resultaba ser distinto a como el otro pensaba?

¿... Y si se distanciaban a causa de ello?

San no estaba dispuesto a arriesgarse a perder aquello tan bonito que tenían por una quedada.

Así que el autoestima y el miedo le llevaron a abandonar la idea.


Pequeño ❤

¡hyung, hyung!

¿sí?

han puesto unas mazmorras nuevas!

podemos conseguir la armadura que llevas tanto tiempo queriendo!

oh, pues estoy libre de exámenes, si quieres podemos ir!

¡genial! 😊

adelantaré la tarea que me mandaron para poder jugar sin problemas

espero que vaya bien el día hyung!

ánimo pequeño ~

San tenía la intención de pasar el fin de semana sin hacer nada, simplemente disfrutando de su propia compañía, viendo cualquier serie, pero no puedo decirle que no.

La emoción que le causaba el simple hecho de pasar tiempo con el más pequeño superaba cualquier plan que pudiese pensar.


casi lo olvido! ¿quieres ver una película el viernes por la tarde?

aún me debes una de terror por la apuesta que hicimos 🙄

...yo realmente confiaba en que aquel mago ganaría

pero claro, ¿después de comer te vendría bien?

y luego podemos jugar un rato ^^

claro!

en cuanto esté listo te avisaré!


¿A quién pretendía engañar? Incluso si el menor le pedía que se pasara horas mirando un vídeo de perritos, él aceptaría con gusto con tal de hacerle sentir bien y pasar tiempo con él.

Las conversaciones entre ambos se hicieron cada vez más rutinarias, se podía decir que si no hablaban al menos una vez al día les faltaba algo. Especialmente para San.

No supo cuándo ni cómo, pero hablar con él había pasado de ser algo que no le causaba gran efecto a ser algo fundamental en su día a día y si estaba mucho tiempo sin hablar con él, sentía que le echaba de menos.


Pequeño ❤

voy a salir un momento a comprar palomitas para la película uwu

en unos 15 minutos estoy listo! 


San esbozó una sonrisa. ¿Cómo podía hacerle sonreír con tanta facilidad un mensaje tan corriente? Le parecía surrealista la debilidad que presentaba por él, pero no le disgustaba.

San se decidió por ver una serie que llamó su atención para hacer tiempo, mientras que "de vez en cuando" miraba su teléfono para ver si le decía cualquier cosa.

Escuchó su teléfono y ni siquiera se molestó en pausar el capítulo, cogió el móvil rápidamente.

— ¿Sí?

— ¡San!

— Oh, eres tú Yunho.

— ¿Quién esperabas que fuera?

— Nadie, ¿qué ocurre?

— ¿Estás en casa? Podría pasarme y vemos algo si quieres, estoy algo aburrido.

— Tengo que hacer algunos trabajos, pero si quieres podemos quedar mañana.

— ¡Okey, te dejo entonces, ánimo!


Tras cortar la llamada, San notó su propia decepción y desilusión. ¿Cómo pudo siquiera pensar que sería su pequeño?

Y en primer lugar, ¿cómo sería su voz? ¿Sería tan bonita como él?

San se avergonzó ante su propio pensamiento, se tumbó en su cama y se llevó sus manos al rostro. ¿Cómo podía pensar esas cosas?

Era cierto que hablar con él se había vuelto algo diario y necesario hasta cierto punto, sonreía más de lo normal cuando hablaba con él y podían hablar de cualquier cosa y el tiempo pasaría volando.

Era la primera vez que se sentía así, nunca había tenido un amigo que no hubiese conocido con anterioridad en persona. Y es cierto que había salido con alguna que otra persona, pero ninguna había conseguido tener el efecto que su pequeño en él.

¿Era por la distancia?

¿Era porque tenían gustos similares?

Realmente no lo sabía y conforme más lo pensaba, más crecía su miedo.

game ; woosanWhere stories live. Discover now