Nacido para donar (YOONMIN)

Capítulo 4

El fin de semana llego inclusive antes de que Jimin lo pudiese notar, y las cosas entre él y Yoongi seguían tan frías como el inicio, pero ahora, por lo menos Yoongi comía lo que Jimin le ofrecía y para este eso era un gran avance.

Fue mientras el desayuno estaba trascurriendo que Jimin escucho algo que le dio una idea para acercarse más a Yoongi. El hermano y amigo de su esposo solían hablar mucho y llenar el silencio que Jimin estaba seguro que se produciría si solo fueran él y Yoongi.

- ¿Entonces iras hyung? -. Bien, Taehyung habla pues le había contado sobre una fiesta de alguien que Jimin no conocía, pero según Taehyung era agradable.

- No-. Responde Yoongi.

- ¿Yo puedo ir? -. Pregunta Jimin levantando un poco su mano.

- Nadie estaba hablando contigo-. Responde Hoseok de mala forma.

- Si quieres claro-. Responde Tae.

- Si yo voy, él no ira-. Es lo que dice Yoongi ahora.

- ¿O sea que si iras? -. Pregunta Tae.

- Si-. Jimin baja su rostro entristecido, pues él quería tener una cita con Yoongi, aunque eso no sería una cita, pero en su mente sí.

- Yo no dejaría alguien desconocido en la casa-. No, no es que Tae considerara que Jimin les robaría o algo así, para ellos el chico tenía mucho dinero, pero había sentido pesar por este y solo quería ayudarle. -Que vaya, es una fiesta, quizás encuentre alguien más lindo que tú y centre toda su obsesión en alguien más-. Para Yoongi, aunque lo dicho por Tae fue con total burla no había sonado como una.

- Bien, que vaya-.

...

Jimin estaba aprendiendo la rutina de los fines de semana de esa familia, pues luego del desayuno Yoongi fue al sofá y se echó allí, Hoseok se quedó en su habitación pegado a su computadora y Taehyung se hizo a su lado acompañándole mientras la tele en el cuarto hacia ruido.

Jimin quiso acompañar a Yoongi, pero sabía que este se levantaría si él se sentaba en el otro sofá, por lo que se quedó en la cocina de pie sin saber qué hacer muy bien.

- Hey, Jimin, ve a comprar unas sodas-. Unos diez minutos después Taehyung apareció dejando sobre la isla de la cocina unos pocos billetes, Jimin ni refuto, los tomó y salió de la casa dichoso de ayudar.

- Tae-. Fue la voz de Yoongi, que, aunque parecía ignorar a Jimin estuvo muy atento a lo que el chico hacía, lo cual solo fue mirar a la nada por mucho tiempo, acción que le hizo preocuparse por su seguridad, Jimin no lucia bien mentalmente para él. -Ve con él, te mandaron a ti-.

- Yo no iré, no es mi esposo-. Yoongi suspiro al comprender lo que su hermano quería decirle.

- ¿Si quiera sabe dónde está la tienda? -.

- Yo que se-. Se limita a decir Tae bastante despreocupado.

Yoongi se puso de pie, se mostró molesto y Tae creyó que iría a buscarle, pero al parecer desistió de su idea a segundos de hacerla porque volvió acostase en el sofá. Tae se mostró decepcionado, pues Jimin le había comenzado agradar y consideraba que tal vez el chico no era de todo malo para su hermano.

Jimin evidentemente no sabía dónde debía ir por las sodas, pero eso no pareció importarle ya que pregunto y alguien amablemente le dio las indicaciones correctamente.

Quizás su emoción seria catalogada por todos como una exageración, pero, para alguien como él, que nunca salió el estar en ese lugar era emocionante. Había tantas cosas que se le antojo probar y fue así como las sodas fueron acompañadas por otras compras hasta que pudo llenar dos bolsas por completo.