Poesía insípida • #PGP2020 • [ 3 ]

Neither do I

Mamá, mi depresión es como un oso.
Se para frente a mí y mis piernas tiemblan de miedo
(mentira).

Es como taparle los ojos a una muñeca
y apretarle el cuello y el pecho,
impidiéndole respirar
si es que en algún momento ha inhalado oxígeno.

Es como bajarte el pantalón y meterle el miembro a una prostituta esperando que lo sienta rico
aun cuando la estás violando.

Es como ir dando fuertes pisadas y quedarte trabado en el fango
y que tu cuerpo se lo trague la tierra
y alces tu mano
pero nadie la pueda sujetar

porque no te ven
y tu tan solo
te hundes,
te hundes.
Te hundirás.

Mi depresión es ir viendo hacia el frente
sin ser conciente del presente
y justificar tu falta de movimiento
con un estado mental.

Mi depresión es pensar en el futuro
pero saber que no habrá futuro
porque tu no quieres que haya futuro
porque no te sientes listo para combatir la adultes
con madurez e independencia económica.
Es estarte quejando de un estado emocional
que nunca has podido controlar.

Entonces piensas que el suicidio
es una solución racional.
Y te quieres matar
y quieres seguir viviendo
y deseas dejar de respirar,
todo eso al mismo tiempo.

Mi depresión es algo que no se dice en voz alta
porque de todas formas no lo entenderán.
Es ir acumulando energías
para eventos del mañana que no sucederán.

Y está bien y lo entiendo y sigo teniendo miedo
pero considero molesto salir de casa y avanzar por un camino borroso. Si, ya lo sé, mamá, quieres lo mejor para mí, pero como verás... No me siento lista para esto, o quizás
nunca lo voy a poder estar.

Y quisiera decirte en voz alta
que mi depresión es una excusa válida
pero sé que no es así y que debo recuperar-
algo. No sé, ¿qué esperas que haga?,
cuando ni yo misma he visto el futuro de una forma que no sea borrosa.

Es ahí donde me dan ganas de quedarme tirada en la cama
o solo escuchar música
o solo dejar de pensar.
Porque mi mente nunca está en calma, mamá,
mi mente nunca está...

Y por las noches
en eso que ustedes llaman insomnio
es donde realmente puedo fantasear
con ese millón de cosas que deseo
pero al mismo tiempo
no quiero tocar.

Porque la inercia es sinónimo de regular,
es sinónimo de no quiero avanzar,
de "¡no puedo avanzar!".
Y no extiendas tu mano
que fijo no la voy a tomar.

Porque la prostituta solo se deja follar
por un par de dineros
efímeros
que pronto se gastará.
Y luego vuelve a abrirse de piernas
a dejarse penetrar, sangrar, gemir, rogar...
por ese dinero que ahora le hace falta.

La prostituta solo sigue esa rutina porque es esclava de la inercia
y no sabe hacer o pensar o idear
algo mas,
una mejor vida.

Entonces llega la droga
los cigarros, el acohol, los antidepresivos...
Y yo no me tragaré la magia
de ese medicamento obsoleto
hasta que me haga efecto

y eso aún no pasa.
Mamá,

no quiero ir a la universidad.
No quiero socializar,
no quiero salir de casa

y me siento muy insegura
porque ni si quiera la escritura
se ha vuelto salvavidas
porque no me salva.

¡Mamá!

¿Podrías parar todo esto?

Sé que no,
sé que soy una carga,
soy un derroche de dinero,
un juguete obsoleto,
una boca que no has dejado de alimentar.

Y no quiero saber nada del dinero
que hace falta,
ni de cuándo te vas a divorciar.
No quiero saber de tu desamor
y tus problemas de ira,
¡no quiero saberlo!

No quiero ser testigo de muerte y decadencia
en esta que me has obligado a llamar
mi familia.
Porque no me siento lista, mamá,
no me siento capaz
de llevar responsabilidades cargadas
en mi espalda.
No me siento lista para valerme por mi misma,
ni siquiera quiero ir a la universidad...

Y hablan de aprovechar oportunidades
y dicen que tengo una mente brillante
y presumen de todo el posible futuro por delante

pero yo no veo nada.
Solo deseo quedarme tirada en alguna cama
y escribir si es que me da la gana.

¿No ven que solo soy una inútil descarada?
¿No ven que desprecio todo lo que ustedes amaban?
¿No ven que la persona en este cuerpo es una impostora sin alma?

¿No lo ven?
¿No ven como me derrumbo lentamente
mientras ustedes hablan y presumen del oro vigente,
del dinero gastado y oportunidades desperdiciadas?
Y es que yo no veo nada...
No deseo salir de la coraza
porque no sé cómo se siente avanzar con la masa.

¿Es acaso mi culpa que la materia de este cuerpo saliera fallada?
Veo en el pasado y no encuentra respuesta.
Así que, ¿por qué? ¿por qué? ¿Por qué
siento todo esto si no me ha pasado nada?

Soy una falla injustificada.
No tengo motivos ni objetivos ni nada.
¿Acaso no ven que estoy fallada?
¿No ven la enfermedad siseando en mis vértebras?

No me considero capaz de soportar lo que ustedes han aguantado,
no me veo siendo feliz o criando niños mimados
igual que yo.

No me veo.
Tan solo
no veo y yo
siento que solo soy...

Hay una pieza que falta
que quizás nunca sea hallada.

(Porque esa pieza nunca fue creada)