Poesía insípida • #PGP2020 • [ 3 ]

La versificación de una punzada

I

No ando ganas.
Y mamá dice que debo entender la
importancia de estar vivo, de estar vivo.
Pero yo creo que solo respiro
y así evito que miren cuan podrido
me hallo. Justo en medio de la acera,
ahí, en ese rincón de los recuerdos
donde todo el sinsabor se degenera
y se va por rumbos desconocidos,
es cuando mi alma se encuentra en pena
y sale de mi cuerpo, se va. Se va lejos
ese niño que ya casi no conservo,
se va, se va a un país que nunca he descrito
porque lo veo borroso dentro de mi mente.
Mi cerebro duerme
cuando mis pensamientos
están más alborotados.
Quisiera descansar sin llorar, reír sin volar.
Quisiera conocer el camino correcto
para transitar. Pero nah, nada es así de fácil
y ahora estoy perdido, con astronautas
nadando en mi vacío. Corazón, ya no
te soporto y solo me dan ganas de huir.
Me dan ganas de suicidarme solo para huir.
Pero dicen que la vida no funciona así...
aunque eso no me quita lo cobarde.
Ah, si tan solo pudiera sonreír, si tan solo
el ahora no se volviera
un "es demasiado tarde".
Si tan solo mis ojos no fueran
un desierto lleno de lágrimas.
Pero yo...
no tengo ganas
y tan solo me quedo estancado
porque sé que no sé
lo que pasará mañana.
La pereza dentro de la vacía botella
es lo único que me embriaga,
solo de olerla me vuelvo adicto y borracho
y luego vomito
todo mi desdén entre versos
que se han vuelto aburridos.

II

Se clavó una aguja en mi pecho
y otra
y otra
y luego otra
y otra más.
No noté hasta ahora
estas irremediables ganas de llorar.

¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?
Mi cerebro sigue
sin coordinarse con mis dedos
y eso
entorpece mis palabras,
que fastidio.

De repente me entran náuseas,
leves ganas de vomitar
pero eso es solo el rechazo
ante la amabilidad
que trae consigo esta cálida comida.

Sin darme cuenta, ya estoy llorando.
(¿Por qué estoy llorando?)

Al final del día, todo lo positivo ha sido
desperdiciado (despreciado)
y la melancolía difusa toma
el control total.