El efecto mariposa (JuNo/H8shi)

Capítulo 8

Hoshi en ese momento no lo sabía pero uno de los infiernos más grandes se su vida se le aproximaba a pasos acelerados.

-¡Soon Young!- gritó Woozi con furia.

-¡Eh!- respondió exaltado Hoshi.

El de menor estatura se acercó imponente hacia Hoshi quien, a medida que Woozi avanzaba, él retrocedía.

-Es increíble que te hayas atrevido a hablarle a mi hermano de esa manera tan horrible- se quejó.

-Pero...- intentó excusarse Hoshi, mientras el temor lo invadía paulatinamente.

-¡Nada!- interrumpió Ji Hoon -Él es la persona que más se preocupa por ti desde que tus padres se fueron para no volver.

-Tú no sabes qué pasa entre él y yo- la voz de Hoshi se quebraba.

-¿Soy yo quien está desinformado?- preguntó de manera retórica.

-Sí- dijo Hao, quien había estado escuchando desde la puerta.

-¿Quién eres tú?- indagó, sintiéndose como una tormenta a punto de partir con un rayo todo a su alrededor.

-Soy Xú Ming Hao, estudiante modelo, un gusto- dijo con soberbia.

-No puedo decir lo mismo, con esa falta de educación- contestó Woozi.

-Quien carece de educación es tu hermano.

-¡No lo menciones!- gritó Ji Hoon

-No le grites- dijo Hoshi.

Instantáneamente, Ji Hoon giró para quemar con la mirada a Soon Young y luego volvió a ver a Hao.

-Así que estudiante modelo, ¿no, Hao?- preguntó con mucha calma Woozi.

-Sí- respondió soberbio.

-Ya que Hoshi te cuenta todo, ¿alguna vez te contó quién financia todo este lugar desde que sus padres no están?

-¿Qué?- preguntó Hao mirando a Hoshi y sintiéndose muy confundido.

-Pues resulta, alumno modelo, que yo financio todo este estudio. Él es el dueño parcial por ser un gran instructor y amigo, pero si yo lo decido, tú vuelves a China y dejas de ser todo lo que crees ser.
Las lágrimas de Hoshi caían de a poco mientras recordaba que sus padres se habían ido porque no querían "desperdiciar su dinero" en actividades insulsas y nada productivas, y que el único que estuvo económicamente para él fue Woozi quien, por cierto, su única condición fue que su hermano menor, Lee Chan, pudiese ser alumno; Hoshi había prometido, además, ser bueno y justo con el pequeño Dino: su, como lo llamaba, bebé.

Hao no tenía palabras. Jamás nadie había sido capaz de hacerle algo como lo que Ji Hoon había conseguido: cerrarle la boca. De todas maneras, al ver que Hoshi estaba sollozando, se acercó a él para consolarlo.

-Piensa que como te sientes ahora, no es nada comparado con cómo has hecho sentir a mi hermano- dijo Woozi, apático ante el llanto del mayor. Luego agregó: -Espero que te disculpes con él, y que no menciones nuestra conversación de hoy. Hazle creer a Chan que esta disculpa proviene desde lo más profundo de tu corazón.

Ji Hoon caminó hacia la puerta y, antes de salir, dijo:

-Tú también pedirás disculpas, ¿verdad, Hao?

Este último mencionado no supo qué responder y simplemente se quedó en silencio, como petrificado.

-No te he escuchado- levantó un poco el tono de voz Woozi.

La ausencia de respuesta prevalecía.

-¿Acaso quieres regresar a tu país?- preguntó. Luego, incisivo, añadió: -Contéstame.

-Sí, lo haré- contestó Hao cabizbajo, sintiéndose humillado.

Ya sin nada más que acotar, Ji Hoon se dispuso a salir del lugar. No se sentía bien por haberle reprochado a Hoshi acerca del financiamiento del instituto pero fue algo que debió hacer.

Al regresar donde Seok Min, le preguntó si sabía cómo se encontraba Chan.

-No lo sé. Ha salido hace unos minutos a caminar para despejarse- le dijo.

-No quería hablar con nadie, ¿verdad?- preguntó Woozi con preocupación.

-Me ha dicho que sentía un poco más calmado que antes- respondió Seok Min -pero que necesitaba estar solo un rato para poder meditar acerca de lo que le había sucedido.

Luego de mucho tiempo, Woozi comenzó a sentirse un tanto incómodo, por lo cual decidió ir a buscar a su hermano. Caminó por los alrededores, sin poder ver dónde se encontraba su hermano exactamente.

-¿Habrá vuelto?- se preguntó.

Para salir de la incertidumbre, texteó a Seok Min.

Woozi: Seok Min, ¿Chan ha regresado?

La respuesta llegó casi de inmediato.

Seok Min: Aún no ha vuelto, ¿por qué?

Woozi: Porque he estado caminando durante varios minutos y no lo veo por ningún sitio. Si llega, avísame cuanto antes, por favor.

Seok Min: Quizás deberías de caminar hasta la plaza. No está en las cercanías, pero es muy probable que esté allí.

Seok Min: Y sí, te avisaré en caso de que regrese.

Ji Hoon caminó hacia la plaza y, como era de esperarse, Chan estaba ahí. No obstante, él no estaba solo: un joven alto y carilindo estaba sentado a su lado, hablándole mientras Chan lloraba. Woozi, entonces, decidió interceder pero una acción del joven desconocido lo frenó en seco: abrazó a Dino. El abrazo fue recíproco. Ji Hoon, debido a la distancia, no era capaz de escuchar la conversación que su hermano sostenía pero lo veía sonriendo, como siendo consolado. Eso era importante: alguien estaba consiguiendo que su corazón hecho cenizas volviera a renacer como el Ave Fénix.