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- ¡Te gusta ese chico! - exclama Luzu, acomodando la bolsa de plástico en su mano.

- ¿Qué? - cuestiona el menor, negando rápidamente. - Claro que no.

- ¿Cómo que "claro que no"? - pregunta, riendo a grandes voces, vuelve a empujar suavemente a su acompañante. - Te conozco, De Luque.

- Que no, tío, ¿qué te hizo pensar qu~? - se detiene cuando mira a Luzu enmarcar una ceja en su dirección. - Está bien, quizás me guste un poco.

- ¿"Un poco"? - repite. - No había visto a nadie lograr poner nervioso al gran Samuel De Luque. - continúa, los ojos le brillan mientras habla. - Jo, qué feliz me pone saber esto.

- Lo noto, tú luces más feliz que yo. - ambos ríen, hacía bastante que no hablaban, especialmente porque Samuel se había aislado, pero ellos tenían una de esas amistades que perduraban a través de todo.

Seguían riéndose de las mismas tonterías, y seguían teniendo los mismos gustos en común.

Cuando llegaron al departamento, Samuel cargando la caja en la que iba el rascador para Kira, Luzu miró alrededor, sorprendido.

- Este departamento es más grande de lo que imaginaba. - murmuró, dejando la bolsa con comida para la gatita sobre el piso. - En realidad no me sorprende que todo esté tan ordenado, pero... ¿ese sofá no está un poco torcido?

- ¿Qué? ¿Cuál de todos? - Samuel se gira, perplejo, y entonces escucha a su amigo reír a carcajadas.

- Igual que siempre. - murmura por lo bajo, entonces escucha el maullido a sus pies, y se inclina para ver a la gatita, Samuel siente su teléfono vibrar dentro de su bolsillo y tiene que sacarlo para revisar el mensaje que aparece en la pantalla:

De: Rubén-Veterinario

Espero que tú y tu amigo se diviertan armando el rascador ;)

Pero... ¿qué?

Vet // RubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora