El Imperio Uzumaki

Capítulo XXVIII: Exámenes Chunnin Parte 12

En el capítulo anterior de El Imperio Uzumaki, las fuerzas de la aldea oculta entre los Remolinos se estaban movilizando ante una posible guerra contra sus antiguos enemigos de la Segunda Guerra Mundial Shinobi, por eso mismo Yamato, el actual maestro uzukage después de recibir el informe de espionaje en la aldea oculta entre la Roca decidió hacer un reunión con rapidez.

Cuando todo el mundo estuvo en la sala de reuniones del consejo de la aldea oculta entre los Remolinos, el consejo junto a Yamato estuvieron conversando que tipo de estrategia tenían que efectuar contra sus más que predecibles futuros enemigos, para al final, el maestro uzukage cansado de tanta discusión, decidió movilizar a 14000 shinobis en las fronteras del País del Fuego, del País del Agua, y el País del Rayo en forma de precaución para la guerra.

P. O. V. Normal

1 mes después, en la aldea oculta entre las hojas

Nos situamos en la aldea oculta entre las hojas, donde todo el mundo de la aldea se encuentra emocionado por las finales de los exámenes de ascenso a grado chunnin, donde el combate más esperado era entre Mito Namikaze Uzumaki, la hija del cuarto maestro hokage contra Raúl Uzumaki de la aldea oculta entre los Remolinos. Quien se encontraba nervioso por esta ocasión, era Minato Namikaze, por varias razones, una de ellas era que el maestro uzukage venía a Konoha a presenciar la final, otra era que su hija menor se enfrentaría a uno de los alumnos de su hijo mayor, y para el colmo unos rumores decían que la aldea oculta entre los Remolinos empezó a movilizar a sus hombres en las diferentes fronteras más cercanas en forma de precaución por si una nación les atacaba.

Kushina: ¿Minato quien crees que será el actual maestro uzukage? Le pregunta la esposa de Minato e Madre de los Namikaze Uzumaki a su marido intrigada, porque el último maestro uzukage fue su padre, que por lo que ella sabe murió durante la destrucción de Uzu en la Segunda Gran Guerra Shinobi.

Minato: No lo sé, pero de él depende si formamos una alianza con tu aldea natal, y más nos vale que el consejo civil no haga ninguna de sus jugadas porque ya estoy perdiendo la paciencia con estos inútiles, todo lo que llevo de mandato han intentado dominar la aldea, pero se les ha hecho imposible porque estamos en una dictadura shinobi, igualmente aún mantienen mucha influencia en la aldea y tienen algo de peso en las arcas que recibe la aldea para paliar todos sus gastos. Lo único que he podido conseguir con gran éxito es el lavado de cara de la academia shinobi, ahora los gennins pueden hacer misiones de rango c con bastante facilidad, pero eso no quiere decir que Danzo no siga dando dolores de cabeza. Le responde Minato con gran frustración por las tonterías que había hecho Hiruzen cuando recibió de nuevo el sombrero de maestro hokage, aunque no le culpo porque ya era bastante mayor para ese momento y no podía imponer el miedo que imponía en su mejor momento, por otro lado Danzo no para de dar la tabarra con que tenían que atacar la aldea oculta entre los Remolinos si no aceptaban una alianza con Konoha, y añadiéndole que el bastardo tiene casi la misma influencia que él y no se la puede quitar gracias a que está protegido por varios nobles del País del Fuego.

Minato, Kushina, Jiraiya, Kakashi y 20 anbus de elite leales al cuarto maestro hokage se encontraban en las puertas de la aldea para recibir a los shinobis de la aldea oculta entre los Remolinos, que hablando de su delegación se les podía ver que se acercaban a ellos a paso lento sin preocuparse de que iban a entrar en la aldea que les abandono contra sus enemigos hace ya bastantes años atrás.

Yamato: Esa de allí es mi pequeña Kushina, ¿No? Pregunta el maestro uzukage observando a su hija que se encontraba a unos metros cerca de él y quería ir hacia ella y abrazarla por no estar con ella durante muchos años, pero cuando vio a Jiraiya de los sannins al lado suya, se cabreo por ver al alumno de Hiruzen, que como lo llamaba él, el idiota pervertido que quiere ser maestro de sellos, pero cuando cambio su mirada a Minato observo a un hombre que ha intentado hacer lo imposible para mantener a su aldea como la más poderosa de todas las grandes aldeas ocultas.

Poco a poco se iban acercando para observar que, los anbus desplegados cerca del maestro hokage estaban preparados para lanzarse contra ellos en cualquier momento, y Naruto observo que varios de esos anbus, una de sus manos estaban en el mango de su espada, y otros listos para empezar a hacer algún jutsu en nada. Por ello Naruto decidió elevar un poco su chakra para decir sin ninguna palabra que los anbus no hiciesen nada por su propio bien, o el de su maestro hokage.

Naruto: Anbus vigilad bien todo posible peligro que haiga contra mi abuelo, y antes de que digas algo abuelo, esos anbus que tiene el cuarto maestro hokage no parecen tan leales a su persona, porque si fueran leales no estarían listos para lanzarse contra nosotros para matarnos. Le dijo nuestro protagonista a su abuelo viéndole para que no hable porque, según Naruto esos anbus era mas leales a los consejeros ancianos que al propio líder de la aldea.

Los minutos pasaron hasta que la delegación de la aldea oculta entre los Remolinos llego junto a los representantes de la aldea oculta entre las hojas, que se sorprendieron, al menos Kushina y Jiraiya de ver a Yamato Uzumaki con vida, porque según se decía murió durante la batalla de Uzu.

Kushina: ¿Padre como estas vivo?¿Por lo que oí tu tendrías que estar muerto? Le pregunta Kushina a su padre con alegría, mientras que Jiraiya por alguna razón se encontraba sudando un poco por tener delante a tal monstruo de la guerra.

Yamato: Mi niña no te preocupes, que te lo responderé, pero en privado mejor que no creas que estoy muy cómodo con estar en la aldea oculta entre las hojas que es actualmente, con sus shinobis con el ego más subido de lo normal sin saber su historia a la perfección. Le responde Yamato a su hija con una gran sonrisa y calmado, mientras que Naruto observaba la interacción con un sentimiento que no creía que volvería a tener, pero lo oculto y se fijo en Kakashi, que al recibir la mirada de su antiguo alumno empezó a sudar por tenerlo mirándolo fijamente con esos ojos de color azul que penetraban hasta el alma.

Yamato: Espero maestro hokage que no le importe si empezamos a avanzar hacia el estadio que tengo ganas de observar como mis gennins destrozan a todos sus rivales. Le dice Yamato a Minato con una sonrisa de superioridad que nadie entendía salvo la delegación de Uzu, y sobretodo Naruto que se encontraba con una sonrisa que prometía que los gennins a los que se enfrentarían sus alumnos, no acabarían muy bien parados.

Minato: Está demostrando mucha arrogancia, ¿No cree Yamato dono? Le pregunta el cuarto maestro hokage mientras se encontraban dirigiéndose hacia el estadio para observar las peleas de las finales de los exámenes de ascenso a grado chunnin.