[Como decir hasta luego] •Troy Otto•

16.

- Bethie...Bethie despierta.

La pelirroja abrió los ojos instantáneamente al escuchar la suave voz de su hermano, como si se hubiera tratado de una alarma para asistir a la escuela. Se sentó en tiempo récord desesperada, cayendo en la cuenta de que Trevor mataría a Troy por haber dormido allí con ella.

Pero no había rastros del muchacho, ni siquiera de sus botas. En cuanto logró adaptarse a la oscuridad, también notó la presencia de Jake Otto en la sala, haciendo que se extrañara aún más por lo que estaba sucediendo.

- ¿Te quedaste dormida aquí, pequeña?- su hermano la ayudó a levantarse de una vez, indicándole que se ponga las botas y se vista con más abrigo.

- ¿Qué pasó?

- ¿Viste a Troy antes de dormirte?- le preguntó Jake ignorando la pregunta. Los dos hombres se dirigieron a la puerta, así que ella supuso que debía seguirles el paso.

No iba a decirles que había dormido con él, pero si algo malo había sucedido, tenía que decir al menos alguna porción de la verdad.

- Si, llegó tarde y me despertó. Lo vi ir a la cama, no tenía pensado salir. - la ventisca del exterior pronto la recibió, haciendo que su cabello volara, tapándole la cara.- ¿Algo le pasó?

- No está y la milicia tampoco, no hay rastros de Madison o Nick.- en cuanto Jake confesó, la pelirroja cayó en la cuenta de que la rubia había convencido a Troy para ir al rescate de Alicia.

- ¿Alguna idea de lo que podría haber pasado?- preguntó el pelirrojo, siendo socorrido por su hermana hasta la casa de los Otto. 

- Bueno, ustedes díganme. Son más cercanos a Troy de lo que yo fui durante los últimos años, debe haberles dicho algo que no están recordando.- como si se tratara de una amenaza de parte de Jake, Trevor se colocó frente a su hermana.

- Oye, te hemos dicho que no tenemos idea de lo que pasó.- En cuanto llegaron a la gran casona, cerraron la puerta y Jake se dirigió a la cocina para hacer café para todos. Si tenían que aguardan a que llegaran, sería una noche larga y necesitarían café.- Troy me lo hubiera dicho, si algo pasó no fue su culpa. Ya deberías dejar de culparlo por cada maldita cosa que sucede en el rancho.

El mayor de los hijos Otto sonrió incrédulo hacia los pelirrojos, ambos dos estaban a la defensiva como si estos estuvieran tratando de encubrirlo. Le extrañaba de Trevor, quien había sido su mano derecha desde que lo había rescatado de la frontera...pero entendía porque Elizabeth escogió esta vez estar del lado de Troy.

- No estoy culpándolo, sólo estoy buscando respuestas.

Una hora pasó, y los hermanos Nolan ya no podían soportar la idea de estar cautivos con Jake solo porque él creía que sabían algo que él no. Jeremiah aún no había despertado y eso era bueno, no querían ensuciar la poca confianza que el anciano había depositado en ellos.

- Sólo intento mantener el rancho a salvo, y si ellos hicieron una locura...- alguien interrumpió al muchacho pálido que servía la tercer ronda de café.

- Fueron por Alicia, ¿está bien?- soltó de repente la pelirroja, haciendo que su hermano también la mirara dubitativo. Ya no aguantaba más las preguntas curiosas de Jake, y ya estaba comenzando a preocuparse por la tardanza de los que habían salido.- Madison lo obligó.

- Demonios...- maldijo el mayor de los Otto, justo cuando el frenar de unas ruedas hicieron que los tres salieran despavoridos hacia el exterior.

Los integrantes faltantes de la milicia bajaron del auto, junto con toda la familia Clark y el menor de los Otto, quien parecía completamente exhausto.