eyes on you ✄ jeon jungkook.

cap.17

Desperté totalmente desorientada, después de que Taehyung dejó mi departamento caí rendida en un sueño profundo; ni siquiera había llegado a mi habitación, había dormido en el sofá.

"Si buscas, te darás cuenta".

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, sacudiendome levemente. Miré hacia mi alrededor con lentitud en medio del inmenso silencio que inundaba al departamento.

Siempre me sentía observada, día y noche, sin pausa. Desde hace años, y era por lo mismo que a veces lograba ignorarlo. Estaba acostumbrada.

Pero, ¿qué podría ser? Siempre había pensado que era idea mía, pero...

Me levanté con suavidad intentando no emitir sonido alguno, cerré mis ojos intentando mantenerme firme y no desistir de lo que haría.

Di unos cuantos pasos hasta llegar al marco de la puerta de mi habitación.

Era uno de los lugares en donde más observada me sentía. Miré alrededor intentando encontrar algo extraño, claramente todo parecía normal.

Tenía unas cuantas plantas de tamaño mediano decorando la sala, unos pocos cuadros que Alena me regaló cuando me mude.

Mordí mis labios con fuerza y me acerqué con temor hasta las plantas, con las manos temblando las tomé y lentamente las levanté.

Nada.

Tragué gordo situándola en su lugar inicial, giré mi vista y me acerqué hasta los cuadros de la pared de al frente.

Me mantuve unos segundos a observarlos, ningún rastro de polvo; ni el más ínfimo.

Parpadeé rápidamente intentando no pensar en nada, ni en sacar conclusiones. Lo tomé con cuidado para alzarla, no había nada extraño.

¿Qué estaba haciendo?

Devolví el cuadro a su lugar soltando aire de manera pesada.

Decidí por ir a mi habitación, me ducharía para luego ponerme pijama y comenzar a estudiar.

Entré a mi habitación en silencio y pude notar que Gi seguía durmiendo, realmente estaba cansada. Suspiré y antes de dirigirme al baño comencé a desvestirme en mi habitación, me saqué la chaqueta con cuidado y la colgué cerca de mi armario. Camine nuevamente hasta mi cama para tomar el dobladillo de mi remera, miré hacia el frente y vi mis peluches absurdamente ordenados.

Por alguna razón mantuve mi mirada en ellos hasta que solté el dobladillo de mi polera con lentitud.

Ni siquiera pensaba en lo que estaba haciendo.

Tomé uno de mis peluches con angustia, lo miré en detalle mientras mis manos temblaban con violencia. Finalmente decidí por ejercer presión.

Inmediatamente sentí un sudor frío por toda mi espalda.

Aguante un sollozo y ejercí nuevamente presión en este con los ojos cerrados.

Había algo en el interior.

Abrí mis ojos y con cuidado lo miré de cerca intentando encontrar algo extraño. Finalmente noté una pequeña marca en su costado, era totalmente limpia, casi parecía un detalle del peluche. Era mi peluche favorito, lo tengo desde que tengo memoria por lo que sabía con seguridad que eso no estaba antes.

Miré a Gi con los ojos llenos de lagrimas, ella seguía durmiendo plácidamente.

Mordí mi mejilla rezando porque no fuera nada. Que solo fuese mi imaginación y paranoia.

Fui hasta la cocina con el peluche en mano, a tientas y causando alboroto, tomé un cuchillo para cortar el peluche. Lágrimas caían libremente por mis mejillas.