Salieron en silencio para no llamar la atención de su padre, quien todavía estaba bajo los efectos del alcohol y se dirigieron al apartamento de Harrison, ambos en los respectivos carros de cada uno.
La cabeza de Harrison estaba girando en todas direcciones desde que salió de la mansión pero había algo que debía sacarse de encima o explotaría. "Debe ser hoy.."-Ali..-dijo después de un largo silencio cuando ambos estaban dentro del apartamento.-hay algo que debo decirte..-para él no era fácil decir ese tipo de cosas, al menos no ahora y después de todo el drama.
-Dime..-con una mano le indico que se sentara en el sofá frente a él, necesitaba tener más confianza al hablar y solo lo lograría viéndola a los ojos. "Aquí vamos.."
-Lo que dijiste antes, eso de que nunca puedes hacer nada por mi..-su ceño fruncido la estaba poniendo nerviosa; cada que lo tenía así, indicaba que algo le molestaba y eso no le agradaba ni un poco.-últimamente soy yo quien no puede hacer nada por ti..-se notaba como la inseguridad se apoderaba de cada parte de su cuerpo, desde su pierna temblorosa hasta su mandíbula tensa.-te he alejado mucho de mi últimamente y es porque creía que...-una risa exasperada salió de su boca antes de ponerse de pie y caminar un poco por el lugar.-sigo creyendo que no te merezco.-no podía despegar sus ojos de él.-sigo creyendo que este lugar oscuro en el que estoy es muy bajo para ti...-lentamente se levantó y caminó hacia él para abrazarlo por la espalda fuertemente; necesitaba que entendiera su punto de vista pero desde que se encontraron nuevamente, no habían tenido una conversación normal.-te amo tanto que me vale cuanto más tengas que bajar...-su sinceridad era palpable en el aire.-te necesito aquí conmigo...-un suspiro exasperado salió de sus labios al terminar de decir eso.
-Debemos hablar sobre todo esto Harrison..-lentamente giró para observarla.-esta claro que no me iré y que tú no dejaras que me vaya pero entiende que muchas veces el odio, no es el mejor camino..-lo guío hasta el sillón nuevamente para hablar tranquilamente.-hoy vi algo que no creí ni remotamente posible pero Víctor Gray superó mis expectativas de horrible ser humano en todos los sentidos..-no podía despegar sus ojos de ella.-si queremos ganarle este juego absurdo, no lo hagas con odio...-era difícil no odiar a alguien como su padre.-sé que es difícil pero el odio solo lleva a más odio y tú no eres como él.-eso era dudoso, por Víctor había tenido que pasar por mucha porquería y le era difícil no ver las cosas del modo malo como lo hacía.
-¿Como podría no odiarlo Alissa? -se levantó nuevamente y caminó hacia la ventana.
Millones de recuerdos vinieron a su mente en cuanto meditó sobre cuando empezó todo este odio y se dio cuenta que fue incluso más antes de lo que esperaba.
-¿Como puede haber una persona tan cruel en este mundo y porque es así? No entiendo porque tiene siempre algo por lo cual atacarte Harrison. -estaba realmente indignada ante el comportamiento de Víctor.
-Esto empezó mucho antes de esta guerra absurda..-el brillo de las luces de la ciudad se perdió por un instante frente a él y sólo pudo ver en el cristal de la ventana las imágenes de todos los recuerdos.-fue mi padre antes de volverse un monstruo...-nuevamente el recuerdo de ir en sus hombros apareció en su mente y pesa como roca en su pecho.-la primera vez que me atacó, fue cuando supimos que tuvo una aventura con Catherine pero lo peor no fue su engaño..-podía ver las imágenes tan claras y tan repugnantes como el día que sucedieron.-fue la manera tan retorcida de decir simplemente que se iría con ella para hacer crecer la empresa..-una sonrisa cargada de tristeza se dibujó en sus labios.-mi madre lo aceptó sin chistarle y simplemente firmó el papel de divorcio...-la viva imagen de su madre invadió su mente.-¡Mierda! Aún la puedo ver sentada en la estúpida mesa, con la jodida pluma en su mano y mi padre frente a ella diciéndole que era inevitable retrasar aún más esto..-el peso de todo se le acumulaba en el estómago.-pasé mucho tiempo en el va y ven con mis padres pero el día que mi madre supo de Zoe...-cerró los ojos con fuerza.-entró en un estado que solo las pastillas podían controlar..-sentía que todo el mundo se le venía abajo con los recuerdos saliendo a la luz.-lloraba hasta quedarse dormida en la cama pero nunca derramó una lágrima frente a mi..-alzó su rostro hacia el cielo con frustración.-todas la noches rezaba para que mi madre se sintiera mejor y cuando creí que todo se había calmado...-lentamente clavó sus ojos en el cristal.-casi se quita la vida con la estúpidos calmantes y después de que los doctores hicieran todo lo posible para ayudarla....-solo el recuerdo punzaba con fuerza brutal.-no despertaba...-lentamente giro para volver al sillón y sentarse frente a ella.-yo la encontré en la cama cuando sucedió..-imaginarlo desesperando, sólo e impotente, le estaba quemando todo por dentro.-mi padre me obligó por años a mantener el secreto de que había tenido a Zoe mientras estaba casado con mi madre...-una sonrisa triste se dibujó en sus labios al decirlo en voz alta.-yo le seguí el juego sucio contra mi madre..-lágrimas cargadas de dolor descendieron de sus ojos azules, provocando en ella un inmenso agujero de dolor en el pecho.-mi madre estuvo en coma por mi culpa, porque no tuve los huevos de decirle la verdad el millón de veces que tuve oportunidad...-su voz quebrada fue el punto de quiebre para ella y simplemente se dejó vencer por el llanto.
Pocas veces lo había visto mal pero esta era distinta, esta vez estaba demostrando cuán quebrado y sólo estuvo por culpa de su padre.
-Harrison..-consiguió decir a pesar de llorar desconsolada.-no es tu culpa..-una sonrisa se dibujó en sus labios al escucharla diciendo esas palabras.
-Sí lo es Ali..-un suspiro ahogado salió de su boca.-la mujer a la que más amo en esta tierra fue herida de la peor forma y yo podía detenerlo.-niega con la cabeza mientras se acerca al sillón para sentarse junto a él.
-No podías hacer nada...-lentamente acercó su mano a su mejilla.-eres inocente Harrison..-una lágrima descendió de su ojo y recorrió la mano que ella mantenía en su mejilla.-siempre lo fuiste y siempre lo serás..-era la primera persona que lo miraba a los ojos y le decía algo que no estaba cargado de odio.-eres la mejor persona que hay en esta tierra y agradezco al cielo por haberte puesto en mi camino Harrison Gray..-una ligera sonrisa se dibujó en sus labios al escucharla decir esas palabras.-¿entiendes lo mucho que te amo? -asintió con la cabeza en respuesta.-Acabo de comprobar que no puedo pasar el resto de mi vida sin ti..-lentamente puso una rodilla en el suelo sin dejar de mirarla a los ojos.-Ali...-con delicadeza tomó su mano derecha.-ambos sabemos cuántos defectos tenemos, cuanto hemos pasado y cuanta mierda nos espera...-un remolino de felicidad se estaba creando en su pecho.-sabemos cuánto nos falta por mejorar...-había algo en medio de sus dos manos.-y ahora yo prometo amarte y cuidarte cada día de mi vida, de todos y de todo...-una sonrisa se dibujó en sus labios mientras separaba su mano de la de ella para que viera lo que había en medio de ambas. Un anillo dorado con pequeños diamantes en todo el aro y uno más grande en el centro descansaba en su palma, a la espera de ser colocado en su dedo.-¿te casarías conmigo?
Ella es la chica que fue creada para él.
Con todos sus defectos, sus virtudes, ella es el perfecto molde para él.
Su otra mitad.
Su destino.
El amor de su vida y el sitio de descanso creado especialmente para él.
Ella es su todo y no podía dejarla ir.
ESTÁS LEYENDO
Siempre mía, princesa 👑
RomanceTERCER LIBRO DE: Serás mía, princesa👑 -Cuatro.-se le corta la respiración.-te esperé cuatro años... -Jamas te pedí que lo hicieras.