Lover 🌻 EN EDICIÓN

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Voten y comenten mucho si quieren que suba otro hoy
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-Disculpen.-murmuró en voz baja, alejándose de todos los invitados reunidos a su alrededor para felicitarla.

Luke se había ido hacia la casa de sirvientes hace como unos siete minutos, el verlo aguantarse las lágrimas con los ojos totalmente rojos, terminó de romperle el corazón aquel primer día de verano del año 1821.

Sentía que ya no podía aguantar el llanto por más tiempo, así que se adentró discreta pero rápidamente en la mansión, yendo directo hacia su habitación, sintiendo las lágrimas comenzar a caer por sus mejillas.

Sollozó al cerrar la puerta detrás suyo, recargando su espalda sobre ella.

No podía creer que de verdad hubiera pasado.

Se esperaba que mínimo se tomaran la molestia de avisarle que la habían prometido, no que le soltaran esa terrible noticia de pronto, frente a tantas personas.

Frente a su verdadero y legítimo prometido.

Un nuevo sollozo escapó de sus labios al recordar la mirada de Luke.

El plan era irse antes de que estuviera oficialmente comprometida, para evitar que cualquiera de sus hermanas tuviese que vivir con la deshonra de que su hermana mayor se fugó con un sirviente.

Acarició con dolor la bella gargantilla que Luke le había dado sólo unas horas antes, cuando lloraba de felicidad.

¿Que rápido cambian las cosas no?

Unos toques en la puerta la hicieron callar su llanto en contra de la palma de su mano, pero ni así era suficiente para que el sufrimiento no se escuchara.

La puerta se abrió lentamente, mostrando a su abuela, quien sólo pudo mirar con tristeza a su destrozada nieta.

-Conozco ese sentimiento mi querida Delilah.-susurró con una mueca, adentrándose en la habitación.

La menor sollozó, intentando limpiar sus lágrimas, aunque no servía demasiado, porque muchas más salían de sus ojos.

La canosa se sentó en la cómoda cama de Delilah, mirando a su nieta en silencio.

-Se que es doloroso cariño, pero piensa en esto.-murmuró, captando la atención de la menor.-Todo este teatro te dará las agallas suficientes como para huir con ese jovencito, serás libre como mujer y también serás libre de amar.

La amielada la miró sorprendida.

-¿C-cómo -tartamudeó, sin comprender cómo su abuela sabría eso.

Habían sido realmente discretos con el tema.

-¿Quien crees que le ayudó eh?-preguntó con una pequeña sonrisa, Delilah la miró con esperanza.-Le di dinero, lo suficientemente como para comprar unas tres casas, él me contó que le había comprado una casa a sus padres y el resto planeaba gastarlo en una bonita casa, para ustedes dos, en Francia.

Delilah la miró boquiabierta, mientras su llanto se regulaba, solo para poder escuchar a la ojigris mejor.

-¿Tu sabias lo nuestro?-la mayor asintió.

-Los vi un par de veces, déjame decirte mi cielo, que nunca debes dejar ir a alguien que te mira con tal admiración y brillo, es raro encontrar a un hombre que admire a una mujer.

Delilah sonrió, sintiendo sus mejillas calentarse, llevó sus manos hacia su rostro para limpiar sus lágrimas.

-Y deberían ser más discretos, que pudo verlos cualquiera.-regañó de forma dulce.-Delilah, cariño, ¿que planeas hacer ahora?

La tristeza volvió a su rostro.

-Yo...no lo se.-sintió su labio temblar en cuanto recordó al señor Campbell.-Teníamos un plan, era un buen plan.-limpió una lágrima rebelde.-Pero ahora han avisado mi compromiso.-No pudo evitar soltar un pequeño lamento en forma de sollozo.

La mayor suspiró, alisando la falda de su vestido mientras se ponía de pie.

-Cariño, no voy a decirte que hacer o que no.-murmuró caminando hacia la puerta de la habitación.-Pero te puedo asegurar, que si te quedas aquí solo para mantener la reputación de tu apellido por tus hermanas, sufrirás mucho, no vale la pena arriesgar tu felicidad por eso. No cuando tu padre tiene tanto dinero, a nadie le importará lo que pase contigo, solo quieren un poco de su fortuna y eso es todo.

-Tengo miedo.-admitió entre lágrimas.-¿Que pasa si me encuentran? No quiero que le hagan daño a Luke por mi culpa, no quiero que lo lastimen y mis hermanas, ¿que si las obligan a casarse mucho antes que a mi?

-No sabes si eso va a pasar Delilah, tu madre alargó lo más posible tu búsqueda de marido.-Delilah la miró sorprendida.

-¿En serio?-No podía creerlo, su abuela le dió una sonrisa reconfortante.

-Si, y sobre lo otro, hay muchos posibles finales para tu historia de amor, felices y trágicos, depende de ti saber cuál elegir.
»Si el seguro y doloroso o el arriesgado con la posibilidad de ser feliz por un corto o largo tiempo.

-¿Cómo se supone que sepa que debo elegir?-sollozó.-Amo a Luke, lo amo tanto que podría romper mi corazón solo para que él esté bien, pero ¿cómo sabré que elegí la opción correcta?

La canosa se encogió de hombros.

-No lo sabrás hasta que lo vivas, pero dime Delilah, ¿prefieres darte cuenta de eso cuando un hombre al que a penas conoces te haga su esposa o alejada de todas estas personas, sin algo que realmente te ate y controle?

La menor miró fijamente sus manos, pensando, pensándolo demasiado.

-No quiero ser un objeto, no quiero que me miren como un accesorio, soy una persona y tengo sentimientos y cerebro, aunque algunos hombres no lo crean.-susurró.

La mayor sonrió ladinamente, sentándose frente a ella sobre el suelo, acarició su mejilla limpiando sus lágrimas.

-Ignora lo que te han dicho todo este tiempo Delilah, una mujer no es débil, una mujer es mucho más fuerte de lo que crees, los hombres como tu padre tienen miedo de lo que podríamos llegar a hacer si sentimos esa fuerza.

»Ningún hombre te debe imponer con quien casarte ni lo que debes hacer por el resto de tu vida, tu eres una mujer fuerte y no necesitas seguir sus órdenes, hazle saber que no te importa lo que diga, que no podrá detenerte nunca más, que serás la única dueña de tu vida, que no necesitas de un hombre para estar completa, Delilah, por favor vete.

»Se la mujer libre que todas tus antepasadas quisimos ser, haznos sentir orgullosas de saber que al fin, una de nosotras tuvo las agallas para levantar su voz en contra de los hombres que abusaron de nosotras durante años.

»No importa si te vas con ese joven o huyes tú sola, solo prométeme que siempre vas a confiar en ti, que el ser mujer no te hace más débil ni menos competente.

-Te lo prometo abuela.-susurró, sonriendo levemente.-Y...solo para que lo sepas, Luke es el único hombre que me trata como igual, me hace sentir importante e inteligente.

La canosa besó su frente.

-Eso está bien, por eso me agrada ese chiquillo, te respeta, eso debería de ser lo más importante en una relación, no el dinero ni el poder.

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K opinan?

Feminismo a la orden,
en el siglo XVIII

Ya se, es corto y además me tarde mucho en actualizar y pido disculpas.

Pero me volví loca actualizando THE PIRATE, de vdd, me poseyó una fuerza sobrenatural.

No hubo romantic moment here pero aún así me gustó.

Amo a su abuela un chingo nmms.