Amor de Época

.XXII.

Toque la puerta un par de veces y me quedé callada esperando una respuesta.

No se si esto es lo mejor que voy a hacer, pero tengo que saber que él esta bien.

Creí que nadie me abriría pero antes de irme se abrió la puerta.

La luz de su casa iluminó la oscuridad que me rodeaba y me abrazaba.

- ¿hola? - hablo la mujer mirándome con curiosidad.

- estoy buscando a Shawn - hable en voz baja mirando mis pies, no quiero que me trate igual de mal que el hermano de Shawn solo por que soy Balan.

- oh - se escucho tristeza en su voz - él no se encuentra bien ahora - pase duro y la mire a los ojos, se parecían.

- lo sé... - susurre - yo venía con él - la señora soltó un suspiro y tapó su boca.

- ¿sabes quienes le hicieron eso? - la mire a los ojos y se estaban llenando de lágrimas.

- William... Es un compañero de nuestro salón - sentí una fuerte corriente de aire haciendo que suspirara.

- querida, pasa, hace demasiado frío afuera - se hizo a un lado y yo dudé por un segundo pero realmente lo quería ver.

Entre y la casa no era tan grande como la mía pero era muy bonita, olía delicioso y estaba calientito, cosa que nunca se siente en mi casa.

Me quite la capucha dejando ver bien mi rostro.

- ¿te conozco de algún lado querida? - hablo la madre de Shawn.

- los he visto en la iglesia - hable recordando que se sientan cerca de nosotros.

- oh sí, seguramente ahí te he visto ¿quieres ver a Shawn? - yo moví la cabeza diciendo que si - sube las escaleras, todo derecho y es la última puerta.

- gracias - hable en voz baja.

Subí y en las escaleras habían algunos cuadros, algunos con fotos y una o dos pinturas.

Camine por el pasillo sin hacer ruido.

Al llegar a la puerta la toque 3 veces.

- ¿ahora que mierda quieres Andrés? - se escuchaba molesto y como si le costará hablar. Abrí un poco la puerta y me asome, Shawn estaba en cama con los brazos sobre la cara - ya te dije que me dejes en paz - se quito los brazos de la cara y me miro.

Tenía el ojo izquierdo morado y más cerrado que el otro, así como el labio de abajo un poco más hinchado y se veía la sangre seca.

- ¿Alexa? - se escuchaba confundido y como no estarlo, yo no debería estar en su cuarto - entra - se quiso sentar pero solo se quejo y pasó su mano abrazando su costado.

Entre y cerré la puerta de tras mío.

Camine hasta su cama y lo mire, me sentí mal y culpable, él no debió acompañarme a casa.

- yo.. - me quedé sin voz al llegar a su lado - yo lo siento Shawn - hable en voz baja mirándolo.

- ¿por qué lo sientes? - hablo preocupado mirándome.

- tu no debiste acompañarme, fue mi culpa - se sentó completamente y me jalo haciendo que lo abrazara.

No llevaba playera, solo una venda por lo que sentí sus hombros desnudos.