Una historia que estuvo oculta por mas de un siglo, una historia de amor que no terminó como se quería, una historia que no tuvo un final feliz gracias a los prejuicios...
Una historia que un siglo después finalmente es desenterrada, una historia de...
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Las semanas después de regresar de la playa fueron lo mas difícil del mundo... Lo que quedaron de días se podría decir que Shawn y yo teníamos muchísima intimidad... Yo no lo creí cierto pero si paso... Mi cuerpo cambió.
La ropa me quedaba mas ajustada de las caderas y del pecho, no estaba tan mal pero no era buena idea regresar así a casa.
En cuanto regrese mis padres sospecharon al instante que algo me había pasado, y era claro, la ropa ya no se me veía igual.
Incluso tuve una pelea con mi padre, me llamó ramera, me llamo así por que creyó que me acoste con un desconocido... Pero a decir verdad prefiero que el piense que me acoste con un extraño a que me acoste con Shawn... Si se enteraba seria capaz de ir a matarlo.
Mi padre me dejó de hablar durante dos meses, dos meses donde me trato como una desconocida...
Con Johan fue algo diferente, él sabia que de una u otra manera mi padre nos acabará casando, él lo quería.
Al igual que mis padres sospecho pero no dijo nada, fue hasta que un día mi padre le pidió perdón... ¡Si! Maldita sea le pidió perdón por que me acoste con alguien y no lo espere a él.
Creo que Johan me ama tanto que no le importo, no me trato diferente, no opino ni dijo nada del tema, lo cual agradecía.
Me costó mucho trabajo convencer a mi padre de que me dejara ir con la abuela, de hecho no fui cuando lo acordamos, debía ir en año nuevo, pero es hasta ahora que me dejo ir, y solo me dejo por que se lo pedí de regalo de cumpleaños.
- ¿bien entonces que harás? - pregunté por milésima vez.
- no soy tan estúpido - hablo riendo shawn. Se que no es un estúpido, pero nada puede salir mal, por lo que le di una mirada seria - bien, bien. Mañana llegare mucho antes a la estación, me subiré y ahí te esperare, no es complicado - no, no lo es.
- nadie te puede ver, nadie conocido - el movió la cabeza diciendo que si.
- ahora cierra esa bonita boca y dame un beso - reí por cómo lo dijo. Me tomo con fuerza y me jalo haciendo que entrará a su casa. Me besó, me dio un beso muy desesperado.
- Shawn - susurre - nos van a ver - estábamos en su casa, en su sala, literal en cualquier momento nos verían.
- no hay nadie - apenas dijo eso me jalo hasta que caímos en el sillón, quedé sentada arriba de él, pasó sus manos por mis piernas recorriendo cada centímetro.
- ¿qué? - en su casa siempre había alguien.
- mi padre se llevó a mi hermano a trabajar - soltó rápido y comenzó a desabrochar los botones de mi vestido con desesperación, podía sentir el problema en sus pantalones.
