Mi destino en tus ojos

Capítulo 105

Adrián

Termina el receso y regreso al salón luego de haber jugado fútbol...

Tomo asiento en mi sitio, y sé que el momento de declararme a María Raquel ya se acerca...

He planificado a detalle como lo llevaré a cabo

Primero esperaré a que sea salida y la seguiré con cautela, después la abordaré y la llevaré a un lugar apartado, acto seguido le confesaré mis sentimientos y le haré la propuesta de estar conmigo.

Quiero que sea mi novia...

La amo, y no puedo esperar a que pronto seamos algo más que amigos...

Tal vez mi plan no será el mejor de la historia, pero al menos estoy seguro de que tendrá un buen resultado

Me hacia ilusión que Rodrigo me ayudara, pero no pudo ser posible debido a su negativa, ahora tendré que hacerlo yo solo...

Todo saldrá bien....¡todo saldrá bien!

-¿sigues con la idea de declararte a María Raquel?- me pregunta Rodrigo sentado a mi costado

-si- respondo sonriendo

-espero que tengas suerte- comenta -la necesitarás...

-yo también lo espero- murmuro nervioso tamborileando los dedos en la mesa

Lo único que puede apaciguar mi ansia y mi inquietud es observarla

Dirijo mi mirada a la chica que amo, quien se encuentra conversando con Yovana de manera sosegada y feliz...

Me encanta...

Me encanta todo de ella...

Me encanta sus ojos, sus labios, su sonrisa...

Me encanta la manera tan pura en la que habla...

Me encanta la forma en como su voz es tan dulce y tan profunda...

Estoy demasiado enamorado...

Nunca había querido a una persona así, nunca sentí algo parecido a esto, nunca he amado tanto a alguien...

Me afectaría mucho que me rechace...

No lo soportaría...

Y es que la amo con cada centímetro de mi ser, todas las noches antes de dormir pienso en ella, al levantarme todas las mañanas también pienso en ella...

María Raquel ocupa mi mente día, tarde y noche, a cada acción que realizo, cuando me propongo a hacer alguna actividad o incluso en medio de las clases...

La amo...

Nunca la palabra amor había significado tanto para mí...

Me muero de ganas de estar a su lado, de decirle lo mucho que la amo y cuán importante es en mi vida, quiero protegerla de todo lo malo y hacerle saber que siempre estaré ahí para ella, nunca la abandonaré...

La amo, simplemente la amo....

Ella se merece este amor más que nadie...

Y es que nunca seré capaz de olvidarla...

Al principio pensé que solo era un gusto momentáneo, pero no es así...

María Raquel es todo para mí, nunca en mi vida dejaré de quererla...

Es mi amiga, mi compañera de aventuras,  mi consejera, mi amor, pero sobre todo...

Es mi vida...una vida que ansío tener lo más pronto posible....