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Ya te habías duchado, despertado al rubio e incluso desayunado con el pero a pesar de todo ese tiempo, solo dijeron dos palabras "buenos dias" y luego, ninguno hablo más.

Por alguna razón no te sentías con ánimos y él no quería ser el primero en sacar algun tema.

Todo el camino en auto hasta la academia fue silencioso pero antes de que pudiera bajarse, lo detuviste.

-¿Me daras tu numero?-

-No-

Se bajó soltandose de tu agarre y tu sacaste las llaves del auto para salir con el, a lo cual se detuvo de inmediato.

-No te estoy ligando es por emergencias, no seas terco-

-Tks déjame en paz-

Comenzó a caminar nuevamente y tu lo seguiste hasta la entrada del lugar ganandote otras quejas por parte de él.

Sabias que no podías entrar a la academia sin ser estudiante, pero para tu suerte Uraraka estaba muy cerca de donde te encontrabas y en un segundo, se dio cuenta de que eras tu así que corrió para abrazarte seguida por un chico de pelo verde, que te saludo tímidamente.

-¡Hola! por fin nos vemos-

-Hacia mucho tiempo ¿no? ¡Oh, Tn el es Izuku-

-H-Hola-

-Un gusto, Oh ¿Bakugo? ¡Oye, aún no terminamos! ¡ven acá!-

Tomaste su brazo para que se detuviera ya que había seguido caminando después de ver con quienes te encontrabas, fue notorio su enfado contigo al hacer aquello pero no le tomaste importancia, a pesar de la horrorosa cara que había puesto.

-¡¡Sueltame!!-

-¿U-ustedes se conocen?-

Viste como la castaña y el peliverde se asustaban por la actitud de tu acompañante y te reiste por ello.

-Pues si, yo...

Estabas a punto de explicar que cuidabas de él desde hace unos días, sin embargo la mano de Bakugo que se había puesto sobre tu hombro, llegó a quemarte la piel dejandote perpleja.

El no quería que tu contaras eso pero te molesto bastante la manera en que te lo hizo saber, aún que preferiste hacerle caso esta vez.

-Somos amigos-

-¿A-amigos?-

Repitió Uraraka intentando creer que el rubio era capaz de tener amigos, incluso como tu. Ni a Izuku le convencio aquello aunque haya sonado natural viniendo de ti.

-Ochako ¿te parece si después de clases te vengo a buscar? asi podríamos hablar mas-

-¡S-si!, suena bien-

-¡Genial! Nos vemos entonces. Adiós Izuku-

Esperaste que se alejaran lo suficiente para reclamarle a Bakugo lo que había hecho, y no pudiste evitar sentirte más molesta cuando el mismo tiro fuerte de tu brazo para acercarte a él.

-¡No vuelvas a intentar decir eso!-

-¿Tan humillado te sientes?-

El noto que tu tono de voz había cambiado, incluso tu rostro demostraba como te sentías y eso hizo que soltara su agarre, así que aprovéchaste para empujarlo lejos de ti.

-No vuelvas a tocarme así-

-Tks, oye...-

-Que te valla bien imbecil-

•ℭ𝔞𝔯𝔢 𝔣𝔬𝔯 𝔪𝔢•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora