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-¿Bakugo?-

Hace un rato lo habías llamado para que bajara al primer piso a desayunar, pero no lo hizo así que solo te quedó ir a buscarlo a su cuarto, donde diste unos pequeños golpecitos en la puerta, hasta que esta se abrió.

-Buenos días...-

Tú intento de actuar normal fracaso cuando el rubio ceniza chasqueo la lengua al mismo tiempo que clavaba sus ojos en tu rostro, lo que le provocó más molestia y para no hacer o decir nada inadecuado, pasó de largo hasta las escaleras.

-¿Me vas a ignorar?-

-¡No me molestes!-

Viste como se apresuraba en bajar los escalones y doblaba al comedor, donde lo esperaba su madre un tanto feliz pero igualmente abrumada debido a lo que tenía que escoger.

-Katsuki ¿qué necesitas? habló de...-

-Si quieres iniciar una maldita charla de lo que yo quiero, para que después hagas todo lo contrarío ¡ni lo sueñes!-

-¡Me haces ver como una mala madre y no lo soy! ¡así que me vas a escuchar!-

La mujer tiró suavemente de la oreja de su hijo al pasar a su lado, logrando que el mismo derramará un poco de su café, luego la miró más fastidiado pero sin tener la autoridad para poder reclamarle, por lo que la escuchó mientras ella se sentaba en frente de él, al otro lado de la mesa.

-Bueno, me parece que Tn es una buena chica y ella me ha demostrado su preocupación por ti...

-¿Y que?-

-Y qué, estaba pensando en pedirle que se quedé-

Aquello llamó la atención del rubio, por una parte era bueno que su madre lo haya visto de esa forma, y que te aceptará pero, no era el mejor momento para él que se hayaba enojado  contigo, lo suficiente para fingir que no le importaba el asunto.

-Siempre y cuando tú me prometas que te comportaras-

-Tks, no tengo por qué hacerlo-

-Si, si quieres que ella se quedé-

En su mente pensó "pues que se valla" pero no le salió de la boca, y en instantes se retractó de su pensamiento.

Solo actuaba como un idiota por lo ofendido que se sentía, pero también era inteligente y sabia lo bien que podía cagarla si seguía así, por lo que no dijo nada y sólo mantuvo el silencio ya que su orgullo tampoco le permitía admitir cuanto quería que te quedarás.

Además de eso, no podía dejar de pensar en Izuku y All might, para él era significativo saber que relación tenían, así que su cabeza estaba hecha un lío.

-Mitsuki ¿debo cuidar la casa entre que ustedes van o algo?-

-No en realidad, puedes hacer lo que gustes-

-Ya no siento como si estuviera trabajando...-

-Lo sé pero será temporal, luego ya veremos-

Nuevamente la confianza entre ambas regresó y le ayudaste a lavar algunos trastes que allí habían, para que ellos pudieran alistarse y salir, solo que antes le avisaste a Mitsuki que igual saldrías por un rato, causando más dudas en el rubio.

Ya cuando se fueron hacía el departamento de la policía, te aseguraste de que todo esté en orden dentro del hogar para partir al de tu amiga, que te había invitado después de que le contaras tus supuestos proyectos a futuro.

-Entonces... ¿te quedan tres  meses de empleó pero sólo por seguridad estás buscando departamentos?-

-¡Exacto!-

•ℭ𝔞𝔯𝔢 𝔣𝔬𝔯 𝔪𝔢•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora