Sweet Things (Richie Tozier)

Capitulo 16.- Friends don't lie

________ "Doce" Anderson

— ¿Estás bien? — pregunto, James sin dejar de abrazarme — ¿Por qué te fuiste? ¿En dónde estuviste? No sabes lo preocupado que estaba por ti.

Cerré mis ojos, intentando no pensar en las cosas que viví en Hawkins.

— Lo siento — murmuré.

Somos seres imperfectos que constantemente cometemos errores para después aprender de ellos, y yo había aprendido que la nostalgia es extrañar el pasado de lo que pudo haber sido, o de lo que fue, pero que ya no será jamás.

Estar en un abrazo con mi hermano, es lo único que necesitaba en medio de esta fría tormenta.
Estaba por separarme cuando otros brazos más unirse, hicieron que el abrazo se volviera mucho más cálido y acogedor de lo que ya era.

— Finalmente estás aquí — la voz de Eddie me hizo sonreír.

Los perdedores se fueron uniendo poco a poco, formando así un abrazo grupal que no creí que necesitaba, a excepción de Bill, él no se animó a acercarse, solo observaba pensativo.

El frío y la angustia que sentía habían desaparecido, ahora solo podía sentir el calor que aquellos chicos me transmitían, por qué el calor de un abrazo, es el mejor abrigó para enfrentar el frío de afuera de una mejor manera.

De pronto un fuerte trueno hizo que todos nos separemos asustados.

— Será mejor regresar — mencionó Ben después de unos segundos.

Todos estuvimos de acuerdo. Empecé a caminar junto con todos los demás chicos ignorando el hecho de que me sentia bastante decaída.
Alguien jalo de mi mano con delicadeza, deteniendo mi caminar. Richie.
Él sin decir nada más se quito su impermeable azul junto con su chaqueta, y sin esperar alguna respuesta de mi parte, me lo colocó con rapidez al igual que el impermeable.
Su chaqueta estaba tibia, y sorprendentemente seca, su aroma no paso desapercibido ante mi nariz.

— ¿Qué...?

— Supongo que tienes frío — dijo — te puedes resfriar.

— Richie, te estas mojando, no puedo...

— Tranquila, estoy bien — sonrió — ¿Tú estás bien?

Con la poca luz que había lo vi a los ojos, su cabello estaba húmedo y sus rulos se habían caído. Sus mejillas estaban ligeramente sonrosadas, al igual que la punta de su nariz. Él lucía, bastante tierno.

— Lo estoy — respondí — gracias.

Apartó un mechón de mi cabello y lo acomodo detrás de mí oreja, pude sentir sus fríos dedos rozando mi mejilla.

— Me alegra que hayas regresado — sonrió.

También sonreí sin apartar la vista.

— También me alegra.

Richie indeciso se acercó a mí y con algo de timidez me abrazó, fue algo extraño, pero no dude ningún instante en corresponderle.
Aproveché el momento para recargar mi cabeza en su pecho y escuchar el palpitar de su corazón acelerado. Él posó su mentón en mi cabeza, apretándome más a su cuerpo.
Era nuestro segundo abrazo, y había descubierto que me gustaban sus muestras de afecto, me hacía sentir cómoda y tranquila. Muy tranquila.

— ¡Hey! — nos llamó, James — ¡no se queden atrás!

Sinceramente, no quería apartarme de él pero a regañadientes lo hice, incluso llegue a pensar que Richie tampoco quería hacerlo.

— Vamos, nena — él me sujeto del brazo y me animo a caminar hasta donde todos nos esperaban — en tu casa deben estar muy angustiados por ti.

Una vez de nuevo integrados al grupo, me subí en la parte trasera de la bicicleta de Eddie, y me sujeté de su torso.