EL PRIMER LATIDO © | #SagaLatiendo (Libro #1)

Como un dominó

Capítulo XL: Como un dominó.

Connor

Observo el edificio de Dimitri, es realmente alto y lujoso. Asiento para mí mismo, esto es ostentoso. Entro por la puerta giratoria y me dirijo a recepción. Todo tiene un objetivo me digo cuando paso esa línea.

—Buenos días, tengo una cita con el señor Holmes.

—¿Su nombre?

—Connor Taylor.

Me sonríe mientras ve la pantalla del computador. Me volteo a ver el lobby y me doy cuenta de que hay mucha seguridad y muchas cámaras. Uno de los guardias está muy atento a mis movimientos.

—Aquí esta, lo está esperando, piso 26. —me da un pase de visitante.

Asiento mientras camino al ascensor, entro y aprieto el número 26. Al llegar una chica, que es muy joven me sonríe. Lleva una falda entubada y una blusa muy bien planchada con peinado de cola alta igual de impecable.

—¿Señor Taylor?

—Eso depende. —se sonroja y sonrío.

—El señor Holmes lo espera en la sala de reuniones. —me comunica muy tímidamente o puede que sea amable—. Por aquí, por favor.

La sigo. Todo es blanco y pulcro. Si, tiene un orden que me gusta. Pasamos murallas de cristales que dividen las oficinas, esto definitivamente no les sirve a los holgazanes.

No negare que me gusta pero mi idea de encerarme en una oficina por el resto de mi vida aun no es de mi agrado, quizás cuando tenga unos treinta y cinco años quizás lo piense. Lo veo sentado viendo unos documentos muy concentrado en ello. Abro la puerta de cristal para pasar y levanta la vista.

—Hola, Dimitri.

—No dejaras de llamarme así ¿no? —me pregunta, me encojo de hombros—. Ese es un no.

—Ese es un no lo sé ¿Quieres que te llame papá?

No me responde porque sabe que para eso hace falta un largo camino pero en mi corazón solo tengo uno y ese es Patrick Taylor, siempre será así.

—¿Olivia, nos puedes traer un café?

Me siento cómodamente y le sonrío a Olivia que parece impresionada al saber que soy hijo del jefe.

—Negro sin azúcar —le digo antes de que se marche, la sigo con la mirada antes de poner mi atención a Dimitri—. Los cité aquí.

Alza sus cejas. Sabe que haré lo que sea que este en mis manos para que Thomas no se acerque a Dan o cualquiera persona que me importe. Las amenazas de Damián o Preston no son para dejarlas pasar y Little fox puede interferir o me descubrirán. Por otro lado me quieren a mí y a Dylan. Temo que su silencio sea ensordecedor, es como saber que traman algo muy feo. Esto no tiene nada que ver con Little fox más bien con Kilian.

—Avisare a la recepción. —dice tomando el teléfono—. Claudia, llegaran unos agentes del FBI. Si, hazlos subir por favor, gracias.

Corta.

» ¿Qué les dirás? Ellos sabrán quien soy. Quizás me arresten.

Todo lo que hago tiene un plan jamás hago algo sin antes saber cuáles son mis opciones. Además eso de que lo arresten es falso.

—Lo sé, pero tomaremos el riesgo.

Miro hacia la ventana donde se puede ver el mar, es una muy linda vista.

—Luces muy calmado.

Me rio.

—No lo estoy.