-estamos jodidos- dijo Chris intentando levantarse.
Asentí, a lo que habíamos llegado.
Me volví con rapidez hacia la estación de policías, Caleb se encontraba en la puerta recostado del marco viéndonos a todos.
-Nirry, suelta a Tanner- le susurré.
Ella asintió y moviéndose rápido se acercó a Tanner que se encontraba arrodillado en el suelo viéndome.
Caleb se volvió hacia Nirry y con un movimiento de muñeca ella salió disparada pegando de un árbol.
Tanner se volvió lobo de inmediato y empezó a masticar las cadenas, pero estas ni se doblaban.
-te dejo dar el primer golpe- dijo Caleb hacia mí.
Miré por el rabillo del ojo a Nirry ya como loba gruñéndole a Caleb.
-eres solo uno- le dije sonriendo.
-¿tú crees?
Sentí que alguien se pegaba de mi espalda, cuando me volví Chris estaba de espaldas a mí viendo a los cuatro brujos que habían logrado salir de la casa.
-lanza tu primer golpe- repitió.
-en el pueblo hay más de nosotros de los que tú crees- dije.
Me sonrió.
-“Kat por favor”- pensé intentando no desesperarme.
Chris me tomó de la muñeca y me haló hasta que llegamos cerca de Tanner.
-desátalo- me dijo intentando cubrirme.
Me arrodillé frente a él.
-Tanner… directo al cuello- le dije soltando las cadenas de sus patas.
Dio un salto aullando con fuerza, al segundo Kyle salió del bosque en su forma lobo, pude ver que los lobos del pueblo llegaron de inmediato.
-perro que ladra no muerde- dijo Caleb.
El gruñido de Tanner me dio escalofríos, se lanzó contra Caleb quien lo esquivó con demasiada facilidad.
-creo que tus lobos… están enfermos- Caleb frunció el ceño.
De pronto todos ellos cayeron al suelo gruñendo. Tanner volvió a ser humano y empezando a toser sus labios se llenaron de sangre al igual que el suelo bajo él.
-¿Qué les haces?- gruñí dando un paso hacia él.