One Shots - Camren

44

No, no es la tercera parte del capítulo 43

Soy tan mala :)

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Camila 16  Lauren 36

Narrador Omnisciente.

(Contenido G!P)

Las luces de neón iluminaban el ambiente. Princesas desnudas practicaban sin pudor alguno el pol dance. Lujosos escenarios con las strippers más hermosas jamás vistas eran testigos de erecciones y ojos lujuriosos que rodeaban el lugar, hombres de mucho poder elegían a las mejores para compatir una noche llena de placer. Mujeres con un gran estatus social pagaban el silencio del lugar para gozar de sus strippers, y todo se volvía un caos en el único e inigualable Magic Sex.

El club nocturno más visitado de Los Ángeles. Sofás de gamuza, mesas de roble talladas a mano, barras de vidrio reforzado acompañado de los mejores barmans de la ciudad. Un ambiente exótico y único era el que ofrecía éste club, las mejores noches de tu vida serían en ese mágico lugar. Las mujeres más hermosas del mundo sólo las encontrarías allí...pero, el precio a pagar era mucho más grande que cualquier cantidad de dinero que un ser humano tuviera en su poder.

Tu alma sin siquiera notarlo era la que se quedaba en los rincones del club. Tu vida era arrebatada sin piedad luego de compartir una noche deseada con alguna exótica bailarina, tu cuerpo sería el de un zombie sin vida una vez salgas de allí. No serás el mismo, quedarás condenado a volver hasta que finalmente mueras a los pies de su misteriosa dueña.

Stephany Lalaurie, una dueña realmente cruel. Arrogante y fanática de la oscuridad, era quién te veía caer sin vida a sus pies. Succionando tu alma sin cesar hasta dejarte sin nada, pecando con tu cuerpo hasta el cansancio para culminar atrayendo a todos los tuyos a sufrir la misma desgracia. Tu conexión con tus seres queridos sería la maldición de los mismos.

Magic Sex siempre tenía sus puertas abiertas. Y, Alejandro Cabello sería una nueva y exclusiva presa.

___Bienvenidos, caballeros. Por favor permítanme traerles algunas de mis niñas para que los divierta___.raras eran las veces que Stephany Lalaurie salía de sus aposentos para visitar alguna de las mesas abarrotadas de personas deseosas por pecar.

___Muchas gracias señorita Lalaurie. Nos recomendaron éste lugar, quisimos venir con Harry pero extrañamente no atiende las llamadas___.comentó uno de ellos, Stephany río por lo dicho. Por supuesto que recordaba a Harry, todavía era capaz de darle placer cada que quisiera. Pero ya se estaba pudriendo su exclusivo juguete sexual, ya necesitaba otro.

Miró fijamente a Alejandro, él le sonrió nerviosamente y aquello le encantó. Sería su próximo juguete, de eso no había dudas.

___Es mucho más increíble de lo que se nos dijo. Parece irreal.

Ella sonrió de manera sombría.

___Lo es. Disfruten la noche, muchachos___.se alejó con sus imponentes tacones sin mirar atrás.

El fino suelo de mármol en negro no poseía ni una sola mancha. Los barmans parecían robots pero nadie se quejaba, los camareros no hablaban pero absolutamente nadie lo notaba. Todos veían embelesados al grupo de bailarinas difíciles de ignorar en los grandes escenarios, cada una más hermosa que la anterior. Era sumamente imposible elegir a una sola para compartir, era por eso que todo aquel que pagaba por sexo... elegía a tres o cinco al mismo tiempo.

La avaricia y lujuria eran dos de los siete pecados capitales que ahí se practicaba. Los chefs jamás vistos por ninguno de los clientes preparaban los más finos platillos para cada persona en particular, atendidos como reyes por todos allí, eran pocos los que se atrevían a desear salir.