AGRIDULCE

CAPITULO 44 - EN MARCHA

HOLA A TODOS!! AQUI UN NUEVO CAPITULO Y  CADA VEZ MAS CERCA EL FINAL!! GRACIAS A LOS NUEVOS LECTORES!!

GRACIAS POR TOMAR MNUTOS Y HORAS DE SUS VIDAS PARA LEER LAS LOCURAS QUE SALEN DE MI CABEZA!

LO APRECIO MUCHISIMO!!

ESPERO LES GUSTE EL CAPITULO!!

Y ASI CREAN O NO EN ESTAS FECHAS! LO IMPORTANTE ES ESTAR CON LA FAMILIA!

y ser muy agradecidos!!

SIEMPRE PAZ, AMOR Y FE GENTE! :)

Siempre había creído que si prometías algo debías cumplirlo a como diera lugar porque las promesas se hacen desde el fondo del alma porque son pactos y se sellaban con un apretón de dedo o con el dedo pequeño de la mano incluso con un abrazo o un beso, pero cuando te haces una promesa a ti misma es una promesa que viene desde las entrañas es un pacto no una promesa basada en un odio momentáneo o un amor de verano, cuando te prometes algo a ti mismo es por tu propio bien porque sabes que será mejor para ti mismo cumplirla, es un pacto contigo mismo.

En ese instante mientras recorría ese lugar tan simplemente perfecto y mis pies tocaban la naturaleza al pasar y se conectaban con esta como si le pertenecieran, mientras anthony caminaba detrás mió observando cada uno de mis pasos y riendo de que en cada instante me detenía a oler cada flor diferente que veía.

Me prometí a mi misma que me encontraría, que uniría a la Amelia de nueve años y a esta Amelia de ahora, me prometí encontrar a esa niña y abrazarla para consolarla, me prometí llegado el momento soltarla, me prometí a mi misma seguir a delante por mas duro que fuera, me prometí a mi misma reír mas de lo que podría llorar, me prometí a mi misma ser feliz y agradecer cada dia de mi existencia por tanto amor.

- me gustaría saber que es lo que piensas cada vez que te elevas – dijo anthony detrás mió, me detuve y voltee a verlo sonriendo.- me causa mucha intriga – este tenia sus manos  dentro del bolsillo de su pantalón y me veía con sus ojos llenos de curiosidad y su media sonrisa adornando su rostro.

- normalmente hablo con mi misma – dije riendo, anthony subió su ceja y rió conmigo – algunas veces reflexiono sobre la vida o pienso en lo que puede pasar y la mayoría de las veces le agradezco a Dios por todo.- anthony se cruzo de brazos y se quedo pensando viéndome.

- ¿confías mucho en el cierto? – pregunto viendo hacia el cielo.

- totalmente – dije decidida viéndolo – no podría no creer, me seria imposible, yo se lo debo todo.

- mama siempre nos hablo sobre Dios, nos enseño a orar, nos leía la Biblia hasta íbamos a la iglesia, pero cuando mi padre estaba con nosotros hacia todo lo contrario, solo decía cosas malas de Dios y nos prohibía orar y cualquier cosa que se le pareciera – dijo viendo hacia el valle sumergido en recuerdos por lo que podía suponer.

- asi que eso te creo como una confusión ¿no?- pregunte suavemente mientras caminaba hacia el.

- si – dijo en un suspiro – pero se que existe, se que esta y cada vez que hablas de el me convenzo de eso, pero no se como retomar esa conexión – dijo viéndome con preocupación.

- es como si hicieras algo que fuera vital para ti, algo que ya venia en tu naturaleza, es como si tan solo dejaras fluir tus palabras porque el siempre te escucha – dije viéndolo directo.

- ¿asi de fácil? – pregunto viéndome a los ojos.

- asi de fácil – le conteste sonriendo.

- gracias – me dijo sonriéndome de vuelta

- no tienes nada que agradecer – le dije mientras me daba vuelta y continuaba caminando y viendo todo a mi alrededor.

Ya nos habíamos alejado un poco de la cabaña, me sentía cansada pero quería caminar mas, sabia que anthony tan solo me miraba y caminaba detrás mió riéndose de lo que hacia.