Capítulo 20

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No sé cuántas veces mis labios han estado soplando aquella embocadura durante todo el día. Aprovechando que es sábado me he dedicado a practicar más y más de la flauta traversa, tocando diferentes melodías y temas de distintas canciones, de todo tipo de género. No he tocado aquel instrumento por mucho tiempo, ya lo he mencionado varias veces, pero justamente una persona me había escuchado ayer. Eso no es lo importante, sino lo que sus palabras manifestaron. Hyunjin se impresionó por cómo manejaba la traversa que no evitó decir que era magnífica en eso. En verdad está exagerando, pero en el fondo, y aunque aún me cueste afirmarlo, ese acto había sido el empujón para enfocarme mucho más en ella. 

Luego de haber acabado impecablemente una canción bajo la flauta y mi mirada perdida se va hacia alguna parte de mi frente. Estoy en la terraza de mi casa y parada a un pequeño paso del balcón, sintiendo un poco el aire para poder relajarme e inspirarme más. Me concentré en lo que me dijo Hyunjin antes de que saliera del colegio y me metiera al auto de mis papás, sus palabras muy alentadoras y... realmente motivadoras. 

''No deberías de tenerle envidia a un profesional de la traversa. Más bien él debería tenerlo hacia ti''

Dios, eso fue demasiado.

Sonrío sin darme cuenta y alzo de nuevo mi instrumento para tocarlo de nuevo, esta vez una canción clásica de Beethoven. Siento que arriba en el último piso estoy más libre y puedo crear con más claridad en mi mente que estoy en frente de una multitud. Quiero creer que muchas personas me observan mientras toco para perder el temor. No sé si sea la mejor idea, pero al menos debo intentarlo.

Otros minutos más pasan y admito que mi boca se está secando, además me duelen un poco los brazos de tanto alzar. Es por eso que finalmente decido parar y dejo la traversa sobre el columpio de terraza para caminar hacia la mesa con el objetivo de seguir tomando mi vaso con jugo de naranja. Le doy los últimos sorbos y siento el fresco líquido invadir mi persona. He decidido también sentarme en el columpio.

No he hecho nada más que recostar mi cabeza hacia atrás para cerrar mis ojos y descansar un momento. Pero me veo totalmente interrumpida al sentir cómo mi celular vibra, dándome a saber que me llegó una notificación. Lo agarro para ver la pantalla y me percato de que se trata de un mensaje de Kano, por lo que mis ojos se abren más y me siento correctamente para mirar lo que me ha escrito.

''A veces es bueno adelantar las cosas para tratar de no perder tiempo y enfocarse en ello con tanto anhelo''

—¿Qué? —frunzo el ceño.

Luego recibo otro mensaje y al instante, con intriga, lo leo.

''Anda a la única tienda de cerámica y pintura que conoces ahora mismo''

Mis ojos vuelven a abrirse más y mi mente se estanca por un momento. No quiero entender a lo que se refiere, porque de saberlo y captar la indirecta hará que me ilusione demasiado y sienta una euforia dentro de mí. ¿Por qué no simplemente me muevo y hago algo? 

Pero lo primero que hago es volver a tomar el celular para mandar un mensaje al chico como respuesta. Le pregunto por qué tanto misterio y no me dice directamente lo que quiere, pero el gran problema es que lee mi mensaje y no lo responde. ¡Me dejó en visto!

Alzo ambas cejas, indignada, y vuelvo a mandarle otro mensaje. Otra vez me deja en visto, por lo que me quejo y de nuevo, como disco rayado, le escribo para ver si al menos en una me contesta. ¡En ninguna lo hace! Esto está cada vez peor.

Presiono mis labios y pienso en lo que me dijo al principio, por lo que totalmente rendida decido acatar. Resoplo junto a un insulto hacia Kano y me pongo de pie. No me queda de otra más que actuar y ver por mí misma lo que realmente quiero ver. Solo pido que sea cierto lo que estoy pensando.

Solo yo » Hyunjin; Stray KidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora