Desnuda

Burbuja

La música se detiene. Salgo de mis pensamientos de repente y veo que el teléfono tiene la pantalla encendida.

«Llamada entrante. Max.»

Por un segundo pienso dejar que la llamada se caiga, pero reúno el valor y le hago frente.

- ¡Hola señorita! - me dice con voz calmada.

- Hola señor! ¿Cómo está?

- Todo bien, tranquilo.

- Como siempre- a veces he creído que es una respuesta que da por costumbre.

- Así es! Te llamaba para ver en qué estabas.

- Escuchaba música, pero alguien hizo que se detenga.

- Tendremos que hacer algo con ese alguien. ¿Qué harás hoy en la tarde?

- Bueno, estaba pensando ir a hacer unas compras.

- Aaah, yo que quería sorprenderte.

- ¿Como así?

- Quería llegar de repente y llevarte helado de tu sabor favorito.

Tonto, estúpido y sensualmente tierno Max, usa mis gustos para conseguir llegar a mí.

Quizás tenga un punto por eso.

- No te creo.

- Pues ya que me dañaste la sorpresa, ¿qué dices si nos vemos?

- Mmm puede ser, solo tendrías que llegar al supermercado que está cerca de mi casa.

- Eso no sería problema. Yo llego y allí nos juntamos.

- Pero...- ni siquiera me deja terminar cuando cuelga.

Creo que las cosas puedentomar buen camino, que a pesar de todos los fallos esto se puede enderezar.Quizás desde fuera de nuestra burbuja se vea algo raro o que no funciona, perosolo él y yo sabemos los esfuerzos que hacemos por buscarnos a pesar de habertanta gente en el mundo.