Capítulo 4

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— ¿A donde quieren ir esta vez?—. Pregunta Kristoff a la pareja de Corona.

— Yo quiero ir al bosque—. Dice Flynn.

— Me gustaría ir a un castillo de hielo, ¿Quieres Elsa?—. La rubia se acerca a Elsa.

— ¿Podemos ir?—. Dice Anna golpeándola con el hombro.

— ¡Claro!—. Responde entusiasmada.

Todos suben al trineo. Olaf iba montado en Sven, Kristoff y Eugene sentados al frente, y las chicas en la parte de atrás. Y un guardián sobrevolaba divertido.

— ¿Es tu castillo? ¿desde cuándo no vas?—. Le pregunta Jack bajando a la altura del trineo, recostándose en el aire. Por suerte ella iba sentada en la orilla.

— No puedo responderte aquí Jack—. Le susurra con precaución. — No quiero parecer una loca—.

— Ya lo haces, mira a tu derecha—. El muchacho vuelve a elevarse sobre ellos, sin dejar de ver a Elsa.

La princesa le hace caso y mira para el otro lado, Rapunzel la miraba con una cara chistosa.

— ¿Con quien estás hablando Elsa?—.

— Con nadie Punzie, solo hablo sola—. Dice inquieta.

*Al llegar me las pagarás, Jack Frost* Pensó, mientras le lanzó una mirada asesina al chico que estaba sentado sobre el escalón del lado.




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— Bienvenidos a mi humilde morada—. Dice Elsa, al pasar tras un pino caído y ver la montaña del Norte con su imponente castillo.

— Es hermoso—. Dice Eugene. — Podría vivir aquí—.

— Ya quisieras Flynn—. Le dice su novia al castaño.

— Solo bromeaba Rubia—.

— Ahora puedes llorar Kristoff, nadie te juzgará—. Dice la reina a su esposo, mientras subían las escaleras. Ambos rieron juntos.

Llegaron a la gran entrada.

— Antes de abrir, me gustaría avisarles que hay un amigo que cuida el castillo...—. Avisó mientras abría las puertas con su magia.

Antes de que las puertas se abrieran por completo, un gigante muñeco de nieve, con picos de hielo incrustados en el, les lanza un rugido dejando a todos cubiertos de nieve. Obviamente menos a Elsa, que estaba a un lado.

— Tranquilo—. La peliblanca se dirige al gigante. —Son solo amigos—. Este se retira a otra habitación del castillo, dejando pasar a los invitados.

¿𝒴 𝓈𝒾 𝓂𝑒 𝒶𝓂𝒶𝓈? ||  ᴶᵉˡˢᵃWhere stories live. Discover now