El camino había sido muy largo.
Los guardias lo habían llevado hasta el aeropuerto, luego subió al avión dónde durmió por mucho, mucho tiempo.
Cuando llegaron, JongHoon sintió un enorme choque de emociones.
Estaba feliz. Muchísimo.
Por fin retomaría de nuevo su vida, regresaría a la lugar dónde había nacido, dónde conocía muchas personas… Y luego recordaba a Kyuhyun.
Nunca se había sentido tan dividido.Se alegraba de que por fin iba a ver a su familia y amigos. Pero no había creído que una despedida fuera tan amarga.
Bonnie lo había abrazado, luego Cho la llamó. Era obvio que no la quería haciendo más larga aquella despedida.
Melo se había quedado. Lo había decidido y así fue. No iba a volver a casa con ella, con la ropa ya era suficiente para recordar a Kyuhyun por un muy buen tiempo.
Resopló mirando el cielo de Corea. Su Corea.
La noche era grisácea, no había ni luna ni estrellas que iluminaran.
¿A quién buscaba engañar? No iba a olvidar a Kyuhyun jamás.
Qué extraño era todo ahora.
Si Kyuhyun se hubiera mantenido como el patán insoportable que era al principio, seguramente estaría saltando de alegría.
Pero no.
Me he ido de todo eso.Y deje atrás un corazón herido. Otro, lo he traído conmigo.
¿Qué le diría a su madre cuando llegara a casa? ¿Cuánto tiempo habrá pasado?
Seguramente mucho.
Se había llevado muy poco con él.Y justamente, en la almohada había dejado su diario. Esperaba con muchas fuerzas que Kyuhyun lo leyera.
Cuando entró en el aeropuerto, sintió una enorme alegría. Entendía mucho de lo que estaba escrito y al fin oía a muchas personas hablando un idioma conocido.
Siguió su camino, empapándose de estar nuevamente en casa.
— JongHoon. — Su nombre había sido pronunciado por una voz femenina. Una muy conocida.
Giró al lugar donde había oído que lo llamaban. Y sintió como si su alma volviera de lleno a la vida.
— ¡Mamá!
Ella estaba ahí.
No podía creerlo. ¿Cómo había sido posible? Corrió hacia ella y se lanzó en un abrazo fuerte. Tocó su cabello que ahora estaba más corto. Iba vestida muy formal y con un bolso que parecía bastante fino.JongHoon la miró con atención.
De verdad era ella. Su corazón latió tan alegremente que no pudo evitar llorar.— Mamá… ¿Cómo supiste que iba a llegar?
— Tu director me envió un mensaje. ¿Por qué lloras?
JongHoon lo sabía. Lloraba por todo. La extrañaba tanto que no podía controlarse.
No iba a gritarle lo que había ocurrido. No era creíble en lo absoluto.— Te extrañé muchísimo. — Se limitó a eso, solamente a eso. No podía creer que estuviera frente a ella de nuevo. Su madre lo abrazó antes de comenzar a caminar.
— Ay bebé, sólo fueron unos meses. Ya estás aquí, con mamá.
— ¿Meses? — JongHoon se giró a verla con gran sorpresa.
ESTÁS LEYENDO
Diario de un Creyente (KyuSung)
Fanfiction"Jamás le había pedido perdón a Dios por algo... No tenía la necesidad de pedir más de lo que debía. Pero en la oscuridad de mi esclavitud mental ya no sé siquiera si me ha llegado a escuchar. ¿Puede oírme realmente? ¿O se ha ensordecido por los gri...