Capítulo 11 • Confianza

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Dos días habían pasado. El chico no había tenido noticias de Kyuhyun en ese tiempo, no habían llegado tampoco aquellos momentos de libertad. Pero por la tarde de ese mismo día, JongHoon escuchó los firmes pasos aproximándose a la habitación. Se levantó de la cama inmediatamente y espero que la puerta se abriera.

Kyuhyun apareció ahí, con el rostro serio, mirando la bandeja intacta del desayuno. Jong agachó la mirada.

- Tienes que comer.- Dijo el castaño con voz firme.- Bonnie me dijo que llevas dos días sin comer ni cenar. Eso es muy grosero JongHoon.

Él lo sabía. Entendía que luego de las atenciones que Bonnie había tenido con él, era un acto completamente injusto el rechazar lo que ella con tanto esfuerzo hacía.

- Discúlpeme. - Se disculpó en un casi susurro.

- Sólo quiero que te mantengas bien. Aunque te suene a locura... Tu me preocupas, tengo una responsabilidad contigo desde que...

- Pagó por mí.- Interrumpió el chico, la verdad, la situación acerca que el mayor lo compró como si fuera un objeto, lo tenía ya bastante cansado.- No necesita recordarmelo.

Kyuhyun arqueó una ceja. Era una de las pocas veces que JongHoon se mostraba rebelde ante él.

- ¿Puedo hacerle una pregunta? - Jong relajó el tono de su voz. No tenía caso ser grosero. Eso sólo le daría más problemas.

Cho asintió curioso.

- Claro.

- ¿Dónde estuvo estos días? - De manera graciosa para Kyuhyun, JongHoon se sentó sobre el borde de la cama, con los brazos cruzados y mirándolo con atención.

Kyuhyun se acercó unos pasos hacia él. Jong levantó la mirada cuando el castaño se posó frente a él. Uniendo su tierna mirada oscura con los ojos del mayor.

Una bella imagen mental azotó en la cabeza de Cho. Tentador... tentador.

- Vaya! vaya! - Kyuhyun levantó ambas cejas, movió sus labios en una sonrisa de lado y con una mano acarició el mentón de JongHoon.- Ya estás teniendo interés en mí. Creo que no voy tan mal.

"Había algo... Juro que no sabía que era. Pero algo me hizo sonreír después de mucho, cuando lo escuché decir aquello."

- Es sólo curiosidad. - Aclaró.

- La curiosidad es el primer paso para grandes cosas.- Kyuhyun se sentó finalmente a su lado.- Estuve en un negocio muy importante... Me fui después de hacer lo que me pediste.

JongHoon se sonrojó totalmente, sintió que el cuerpo se le convertía en gelatina. El castaño atrapó su mano y la enlazó entre sus dedos en un acto de apoyo y consuelo.

- Estoy muy feliz de lo que hiciste... Abrirte de esa forma y contarme sobre Joseph fue un gran avance en nuestro vínculo de confianza. - Una sonrisa más. Una de forma dulce, a pesar de la amarga situación.

- Si no fuera por ese tipo seguiría en casa.

- Pues gracias a él te conocí... Eso es una gran dicha.- JongHoon se giró a verlo en cuanto pronunció aquello. - Aunque, claramente, eso no quita el daño que te hizo a ti y a tu amigo.

De pronto una duda asaltó la mente del pelinegro.

- Creí que sólo lo dejaría pasar... Es decir... Creí que lo que yo opinara sobre Joseph, no tenía alguna validez para usted.

De cierta forma, a lo largo de los días Kyuhyun se iba mostrándo menos duro con él. Al principio incluso creyó que lo golpearía por la mínima razón de no decirle su nombre. Y ahora, incluso había desaparecido al culpable de aquél destino en la vida del chico.

Diario de un Creyente (KyuSung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora