CAP IV

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'¡Estaba todo buenísimo, Ran!" Exclamó Kazuha con el estómago lleno.

"Es verdad." Intervino Heiji. "Eres un afortunado por casarte con una cocinera de este nivel." Le dijo a su amigo dándole un toquecito con el codo.

"Tienes razón, soy un chico con suerte." Dijo él, provocando que su prometida se sonrojase por su alago.

El curry estaba muy bueno, no iba a negarlo. Ran era muy malitas en la cocina y siempre se esforzaba al máximo para complacer a sus comensales. Pero cuando sse trataba del curry, conocía a alguien que lo hacía aún mejor.

Ran se marchó con una pila de platos y Kazuha le siguió para ayudarle a fregarlos. Los detectives aprovecharon para a hablar sobre sus últimos casos entre otras cosas, no querían agobiar a sus chicas hablando a todas horas de cadáveres y casos.

"Kazuha me ha dicho que ya habéis encontrado el sitio para la ceremonia."

"¿Eh? Sí. Estuvimos mirando sitios, hasta que Ran se enamoró de una masía a las afueras con un lago bastante grande. Es un buen sitio y bastante espacioso." Contestó mientras sostenía la servilleta entre sus manos.

"El lugar es lo de menos. Lo importante es con quien lo haces." Dijo su compañero. "Te vas a casar, Kudo. A partir de ese momento, estaréis unidos cómo marido y mujer." Dijo mirándole fijamente.

"Sí lo sé." Contestó poco nervioso.

"¿Y por que estás inquieto?¿No estás seguro?" Preguntó su amigo confuso. Observándole detenidamente.

"No, no es nada de eso. No tiene que ver con Ran o la boda." Dijo sacudiendo la cabeza. "Se trata de un caso. Uno que ayudé a cerrar hace más de año y medio. Estoy repasándolo para intentar reabrir una nueva investigación. Pero todo esto es mucho más complejo de lo que me imaginaba." Le explicó a su compañero ras comprobar que estaban solos.

"¿De verdad me estás hablando de reabrir un caso?" Preguntó Hattori sin entender a donde se encaminaba. "¿Qué pretendes hacer con eso?¿Se trata de un caso en el que sabes que el asesino sigue suelto?¿Quieres reabrir un caso para buscar pistas y mandar a alguien a la cárcel?" Dijo sin acabar de comprender sus intenciones. Su amigo era muy eficaz a la hora de cerrar un caso, el más eficaz que conocía. Le descolocaba mentalmente que le hablase sobre reabrir uno.

"Más bien, quiero sacar a alguien de la cárcel." Le explicó al ver que se iba del tema "Se trata del caso de Shiho." Le explicó al notar su confusión.

Heiji cambió su expresión rápidamente y abrió los ojos sorprendido. Muy sorprendido.

"¡¿Estás loco?!" Preguntó. Sólo había conseguido descolocarle aún más.

Kudo sabía que su amigo reaccionaría así. "Se que no es ahora cuando debería hacer todo esto, pero el profesor me ha echo pensar mucho y llevo noches sin descansar bien. es una injusticia, no merece pasar el resto de su vida ahí. Ella no decidió nada."

"No te entindo Kudo. No vas a conseguir reabrir ese caso, su juicio está aparejado con el de los demás miembros. Nadie respaldará ninguna de las teorías que presentes, aunque sean ciertas." Dijo Heiji agachando la mirada. "Recuerda que las pruebas que teníamos se perdieron en la explosión. No tienes nada." Dijo arrugando la nariz.

Tenía razón. Pero no iba a rendirse tan fácilmente. Tenía una reputación por algo.

"¿Y por qué ahora?¿Se lo has dicho a Ran?"

"No." Respondió directamente. "Ella no la ve como yo la veo. No la conoce. Solo es capaz de juzgar los actos de los que todos hablan, pero no se cree la historia." Le explicó. "No quiero discusiones ahora que estamos organizando la boda. Esta ceremonia es algo muy especial para ella."

Vivir sin ver amanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora