un grupo de chicas de clase media becadas en una de las mas prestigiosas universidades y el grupo de chicas ricas ¿que puede salir mal?
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≥ Hyewon
≥Mención de otros shipps
≥posible aparición de otros idols
Hyejoo y Chaewon se separaron del beso, las dos se quedaron con sus ojos cerrados y sus labios entre abiertos por aquello había sido ya mágico para ambas.
Iban a juntar estos nuevamente pero el celular de la más baja sonó interrumpiendo.
-Lo siento...- Chaewon se separó de la pelinegra y agarro su teléfono para responder la llamada.- Hola...
-La bese... ¡la bese! ¡Chaewon te amo, te amo, te amo! Tu carita, tu pelo, tu cinturita... tus ojitos tan bonitos, tu boquita... Me hiciste sentir la reina del mundo...- Pensaba Hyejoo con sus mejillas totalmente rojas mientras miraba su reflejo por el agua cristalina de su piscina.
"Quiero que el resto de mi vida sea junto a ti..."
-¡Hyejoo!- Chaewon dió un suave gritó que sacó a la pelinegra de su mundo provocando que se sobresaltase.
-Eh... Eh... ¿Si?- Intento tapar su notable sonrojó.
La rubia solo sonrió al ver a Hyejoo.- ¿Me llevas a casa?
La pelinegra también sonrió y las dos caminaron hacia dentro de la mansión para ir por las llaves del auto.
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-Hyejoo no, ya vete.- Chaewon se colocaba delante de la puerta de su casa impidiendole el paso a la mayor.
-Chaewon por favor, tu acabas de entrar a mi mansión es injusto que ahora no me dejes entrar a tu casa.- Se cruzó de brazos.
-¡Una cosa es tu mansión y otra mi casa!- Grito.- Yo no tengo piscina, no tengo un televisor plasma gigante, mucho menos un aire acondicionado.-
-Haber como te digo esto...- Rasco su mejilla.- ¡Ah si! No me importa lo que tienes y lo que no.- Sonrió.
-Bien te voy a dejar entrar a mi casa...- Chaewon sonrió y Hyejoo estaba lista para entrar hasta que la rubia colocó una mano en su cara.- El Viernes luego de nuestra salida.- Comenzó a reír.
-¡Hoy estamos muy chistositas! ¿no?- Hyejoo la abrazo por la cintura y la iba a acercar para besarla pero sintió que algo la mordió en el tobillo, miró al suelo y vio un pequeño cachorro jugando con la bota de su pantalón.- ¡Hey! ¿Y este amigo?- La de cabellos negros sonrió y levantó al cachorro en sus brazos.
-¡Canela!- se escuchó la voz de una pequeña niña correr hacia Hyejoo.
-¿Quien le pone Canela a un perro color blanco?- Chaewon miro a la pelinegra.-
-Ay Chaeeeee no seas tan amargada cuando era niña tenía un perro marrón que se llamaba "Rocky" y por favor el perro no era boxeador.
Chaewon al escuchar a la pelinegra decir aquello casi se cae de espaldas.
-¿Es tu perrito?- Sonrió Hyejoo entregándole el cachorro a la niña.-
-¡Si gracias señorita!- La niña agarro al perrito en sus brazos.- ¡Canela malo!
-Deberías de tener más cuidado... Otro perro podría verlo y hacerle daño.-
-¡Yo lo estaba cuidando pero mi hermano tonto abrió la puerta y Canela escapó!- La niña abrazo al perrito.
-¿Y donde está tu hermano? No sé para golpearlo.- Vio que la niña hizo cara de susto.- con esponjas...- la niña relajó sus gestos.- De pinchos.
-¡Hyejoo!- Grito Chaewon al escucharla.
-¡Ahí!- La niña apunto detrás de Hyejoo y está se dió la vuelta notando a varios niños mirando su Lamborghini.
-Bueno...- Hyejoo se acercó.- ¿Que pasó niños? ¿no quieren que los lleve a dar una vuelta?- La pelinegra sonreía y todos los niños se notaron emocionados.
-¡Cuando sea grande quiero un autote así de grande!- Grito un niño feliz.
-¡Claro campeón! ¡si te lo propones puedes tener uno de estos!- Hyejoo sonrió.
-Creo que ya te has ganado a los infantes.- Chaewon sonrió y abrazó a Hyejoo.
-Parece que si... Ya me debo ir, tengo que llamar a mis padres a esta hora...- Suspiro.
-Esta bien, más tarde nos hablamos.- Sonrió la rubia.
Hyejoo y Chaewon no sabían que hacer en ese momento, si darse un beso en los labios o solo un abrazo y despedirse así que la más alta actuó y solo se dieron un simple beso en la mejilla despidiéndose.
-¡Adios hermosa!- Grito Hyejoo con una gran sonrisa mientras la rubia se dió vuelta sonrojada y entro a casa.
-Yo si fuera Chaewon te hubiera dado un beso en la boca.- Dijo la niña que tenía el perrito.
-¡Niña! ¡¿Como sabes tú eso!?- Grito está.- Mejor ya ve a tu casa con Canela.
