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El auto estaba siendo conducido por un chófer de raza negra con un exquisito traje de ver a este hombre fuera de aquí pensaría que es adinerado pero en cambio manejaba el carro de Gustav Blau.

Mi prometido jugaba con mis dedos mientras miraba hacia la ventana, me di cuenta de lo parecido que era mi anillo con los que él tenía en sus manos entre mis cortas miradas. Gustav y yo solo habíamos tenido pequeñas frases de conversación hace unos instantes cuando ofreció llevarme a la escuela de ahí el auto estaba embriagado en un absoluto silencio. Solo sentía el tacto cálido de su piel y el diminuto ruido de los anillos chocando.

En cuanto llegamos apretó fuerte mi mano y el chofer bajó a abrir mi puerta no hice más que salir en camino hacia la entrada pero antes de ello el hombre frente a mí me entregó una pequeña caja y volvió a su puesto. Gustav volteo a verme por primera vez desde la mañana recargó su cabeza en su mano y parecía querer inspirar todo de mi, un par de minutos pasaron cuando movió los labios y el auto prendió.

Cuando estaba cruzando la puerta de salida mi cabello voló por el fuerte aire después de peinarlo abrí la caja negra, un dedo estaba dentro parecía haber sido cortado por un tiempo lo pude saber al ver que la sangre estaba seca y los tejidos que antes habían podido ser cosidos de regreso a la mano ahora estaban muertos. Por el tamaño y la delicadeza de la lima de la uña se podía deducir que era de una mujer.

Observe el lugar donde se había retirado, guarde todo en mi bolsa y entre al edificio. Decenas de personas ya estaban empezando a dirigirse a sus salones correspondientes por unos minutos quede atrapada entre la multitud fue mi jugador de béisbol quien colocando su brazo encima de mis hombros logró alejar a la mayoría por lo grande que era su cuerpo, después de dejarme volteo a verme y guiño un ojo.

Seguí con tranquilidad mi camino el departamento de medicina que se encontraba en el edificio principal John se separó de mí luego de que la campana sonó anunciando el inicio de clases. Los salones en "The gift" eran en su mayoría lo parecido a auditorios subíamos escalones y largas mesas con sillas se encontraban en cada uno de ellos. Mientras subía pude escuchar los murmullos miradas cortas y unas cuantas burlonas.

Me senté después de pasar mi mano por mis glúteos asegurandome que mi larga chaqueta negra no se arrugarla.

- Hasta los dioses del olimpo caen. Al final de todo son piel y huesos.

Reconocía la voz de quien hablaba, Sahil Ram un indio de Mumbai su padre era director ejecutivo y gerente general de la Bolsa Nacional de Valores. Eran una familia muy rica e importante en la India pero lo más importante de ellos era su tío quien tenía el título de Emperador y al igual que nuestra familia él también compartía su poder. Pero al no ser del núcleo principal vino a Estados Unidos a estudiar a diferencia de su primo estaba en India dirigiendo con su padre.

Sentía como los grandes ojos de Sahil no apartaban la vista de mi cara pero no deje que sus palabras me afectaran es más ni siquiera le dirigí la palabra o la mirada, el se veía impaciente por ello. La clase empezó y terminó con cierta aura cargada pero después de salir de clase coloque mis audífonos mientras saludaba a unos pocos en el pasillo. Me encontré frente al jardín botánico de la Universidad camine a lado de los lirios y estanque de agua hasta subir las escaleras rodeando estatuas y bancas.

Llegue al salón de Técnicas quirúrgicas era una gran habitación con una enorme ventana a su derecha y tenía la misma dinámica de asientos que mi clase anterior. Sentada al frente y entusiasmada por el inicio estaba Violeta quien solo se inmuto de mi presencia después de sentarme a su lado. Tomo mis manos con fuerza y después besó mi mejilla.

- ¿Como estas, hermosa?

Mi respuesta fue recargar mi cabeza en su hombro y ella de inmediato dio suaves palmadas en mi cabello. Segundos después una hermosa mujer adulta apareció, la maestra Jane tenía más de cincuenta pero su figura y rostro seguían manteniendo la frescura de una joven, tenía el cabello rubio tan corto que a la distancia no se podía observar. Ella era la inspiración de Violeta en el campo quirúrgico y era una de sus amantes.

Mi MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora