Adrienna Giordano la nieta más querida del hombre que construyo un imperio, Pietro Giordano un hombre a temer con 74 años, viudo a corta edad. Constructor de uno de los imperios más grandes del último siglo con múltiples líneas de negocio que no hac...
Mi cuerpo sentía un calor inmenso y por más que movía mis piernas para deslizar mis sábanas no podía hacerlo. Abrí los ojos y sentí por qué la diferencia, Gustav me tenía rodeada con sus brazos lo pude notar al ver los anillos en una de sus manos que se encontraban bajo mi cabeza mientras su otra mano cubría mi abdomen.
Voltee y aun se encontraba dormido su rostro lucía tan relajado que me hizo sonreír parecía empezar a recuperar el color de su cuerpo. Me levanté levemente tratando de no despertarlo cosa que no logre mi cintura fue rápidamente tomada por Gustav quien me levanto hasta tenerme encima de su cuerpo.
- ¿Qué ha pasado en casa mientras no estaba?
-La votación en tu familia no se podía hacer hasta que despertaras y ya te robe un día entero. Esta noche deberás elegir de nuevo
Quede un minuto en silencio.
- ¿Cómo te permitieron entrar si aún faltaba mi voto?
El tomo mi cintura y me subió hasta quedar frente a frente después deslizó su nariz de mi mejilla hasta mi oreja me susurró- Porque entre con un equipo y estaba totalmente armado.
Sonreí en su mejilla después me empuje de su pecho para levantarme y empecé mi camino hacia mi vestidor tome una vestido azul pegado pase del sostén colocando unos zapatos cómodos de tacón. Peine mi cabello en el tocador cuando vi a Gustav levantarse, estiró su cuerpo e ingresó al baño mientras se encontraba ahí maquillé mi rostro haciendo lucir mis ojos con el vestido.
Mi cintura fue atraída a su cuerpo y me dio un apasionado beso mientras ingresaba su mano en mi escote rozando mis pezones con sus dedos, solté una exclamación cuando apretó con fuerza. Mis ganas de tenerlo aumentaban hasta que el sonido de la puerta siendo tocada me calmo.
Fue un cubeta de agua fría cuando mis niños favoritos entraron Giovanni y Carlo, mis sobrinos vienen agarrados de la mano y aunque Carlo parecía querer salir corriendo hacia mí se contuvo hasta que Giovanni pudiera tocar mi pierna y en cuanto lo hizo lagrimas empezaron a salir de sus ojos. Me agache de inmediato y cargue a ambos en mis brazos, les repartí cientos de besos tratando de compensarlos por el tiempo perdido.
- ¿Cómo están?- Les susurre.
Giovanni lloró a pesar que nos habíamos visto anoche sentí lo mojado que estaba su rostro al tener contacto con mi cuerpo. Carlo acariciaba mi cabello mientras me veía con una gran sonrisa y hablaba acerca de cómo había extrañado salir a comer helado con su tía.
Empecé a caminar con ambos para salir de la habitación, Gustav de inmediato me abrió la puerta y antes de que pasara beso levemente mis labios, me acompañaba como un guardaespaldas. Baje hasta el comedor donde se encontraba toda la familia desayunando el abuelo bebía un jugo con color extraño me sonrió cuando me vio pidiendo que me sentara a su lado.
Coloque a los niños en el suelo y camine hacia él bajó la mirada de todos, Caterina fue la primera en hablar sosteniendo su barbilla con su mano- Ya que estamos todos de vuelta ¿Les parece si continuamos? Cinco días de encierro me parecen más que suficientes.
Todos lucían claramente de acuerdo pude ver como Boris me sonreía en el proceso- ¿Cómo te sientes?- Me habló mi tío Enrico mientras pasaba un plato de fruta frente a mí.
- Recuperada.
- Me alegra - Su voz sonaba melancólica su esposa tomó su mano dando una pequeña sonrisa.
- Nosotros...
Las voces se callaron de repente al ver a mi Sofía entrar, su brazo estaba en un cabestro y se mantenía completamente inmóvil. Se sentó cerca de Bruno y le pasaron de inmediato una compresa fría- Buenos días.
Tuvo una respuesta de todos y Bruno se volteo a verla mientras le susurraba al oído a lo que ella sonrió levemente, mi tío colocó sus manos en las mejillas de su hermana y se deslizó hasta dejar un beso en su frente. Parecía consolarla y ahora todos mantenían una conversación sencilla.
- Hagámoslo ya mismo- Dijo Caterina parándose de la mesa y tomando la atención de todos los presentes un sirviente le pasó el bastón de adorno que tenía se recargó en él mostrando sus voluptuosos senos- estaré en el estudio. Preparare todo para terminar con esto lo más pronto posible, los veo ahí.
Se fugó con sigilo del comedor y la familia la siguió poco a poco. Me despedí de Carlo y Giovanni con un beso cuando terminaron su gelatina solo Boris, Enrico e Irene quedaron aún en la mesa. Recorrí mi camino hasta que sentí el roce familiar en mi glúteo Gustav pronto olfateo mi cabello mientras me acariciaba fuimos juntos hasta la sala y al llegar ahí nos despedimos con un beso.
Él se quedó un tiempo parado en la entrada hasta asegurarse de que me sentara, mi madre con quien no había tenido contacto desde mi ataque estaba sonriéndome dulcemente mientras mi hermano se dirigía a mí con una botella de agua que recibí de inmediato.
Se sentó en la cabecera del sillón dando caricias reconfortantes a mi hombro levanté mi mirada para verlo y pude notar su vergüenza- Lo lamento- me susurro. Lo observé unos minutos más pero no pude definir como me sentía por lo que lo dejé pasar.
Todos reunidos de nuevo enfrente de la urna con una hoja que tenía los mismos nombres de la primera vez Bruno Giordano Stevens, Rebeka Giordano Conti, Enrico Giordano Anderson y por último Sofía Giordano Loaldi.
Encerré a Bruno después de meditarlo por unos minutos y lo dejé en la urna. Voltee a verlos a todos, Enrico era un mediador, Sofía una complaciente, mi madre una mujer con ganas de poder y por último Bruno un líder apegado a las reglas. No había mejor opción para este negocio.
Los gemelos me siguieron dejando su voto y nos tomó unos minutos esperando a Sofía la última que faltaba. Cuando su papel fue ingresado en la urna, Caterina se paró sonriente peino su cabello provocando que se bajaran los rulos de inmediato.
- Empecemos- Dijo mientras sacudía sus voluptuosas caderas- 10 personas votando.
Mis dedos martillaban mientras nombraba los nombres cuando el resultado después de 5 papeles nos llevó a la misma situación que la vez anterior con Enrico y Bruno como una competencia en el titulo me incline de mi asiento.
Al final no necesitábamos escuchar las últimas dos hojas el resultado ya estaba tomado y el ganador ya se encontraba prendiendo su puro. Terminamos con un aplauso y de inmediato sacaron el licor, Bruno abrió con una gran sonrisa la puerta antes cerrada. Levante mi boca para que sirvieran en ella vodka puro al igual que los demás preparaban su brindis.
Bruno se colocó cerca de la puerta teniendo la vista de todos- Gracias familia, seguiré haciendo de nosotros los mejores del mundo ¡Salute!
-¡Salute!
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Entramos en vacaciones chicos y chicas por lo que los veré hasta finales de Agosto.
