f𝐎re𝐕𝐄𝐑 *•. {Corrigiendo}

.•* Capítulo 2, adiós *•.

~VICTORIA CARO EN MULTIMEDIA~

Entro al despacho del director cerrando la puerta tras de mi, y me siento en la silla que hay enfrente suyo.

—Hombre señorita Smith que grata sorpresa, no la esperaba hoy por mi despacho —dice sarcásticamente —y bueno... ¿qué hiciste esta vez?

—Uy dire, me han mandado por mal comportamiento, das por asegurado que hice algo —digo haciéndome la frustrada.

—Señorita Smith, la conozco mejor que a mis hijos, la veo mas a usted que a ellos —dice riendo, pero de repente se pone serio, bipolaridad diría yo —ahora dígame que hizo y no perdamos el tiempo de mandarla a casa —dice con los ojos clavados en mí.

—Está bien... en clase de química provoqué una explosión, y la espuma cayó sobre el falso pelo de la señorita Caro, quemando este al paso, y pues la he dejado más calva que a Caillou —digo lo último entre risas.

—ESTO ES INACEPTABLE —grita el director haciéndome botar en la silla del susto —ELISABETH SMITH QUEDAS EXPULSADA DE ESTE INSTITUTO, NO LA SOPORTO
MÁS —dice mi director gritándome y tirando toda su saliva encima mío, puaj que asco...

—Ey dire, trague saliva, y no me la escupa, un poco de modales —digo a lo que él me amenaza con la mirada mientras que yo me aguanto la risa.

—Perdón señorita Smith, pero eso no quita que esté expulsada de forma perpetua de este instituto, es decir, PARA SIEMPRE —me dice gritando. Yo no digo nada, la verdad es que me daba igual.

—¿No vas a decir nada? —me pregunta enfadado.

—¿Que se piensa que voy a llorar como las personas a las que expulsas? —hago una pausa —adiós director un placer conocerlo —digo saliendo del despacho del director rumbo a clase.

No me importaba que me expulsasen, la verdad es que odiaba este instituto a muerte, quitando a mi profe de química, pues ahora estoy de camino a clase para coger mis cosas y irme de este instituto para siempre.
Entro a clase y todos me miran, voy a por mis cosas y antes de salir por la puerta digo.

—Me han expulsado de este instituto para siempre, así que esto es una despedida, adiós profe, adiós chicos y adiós calva —digo saliendo de la clase y riéndome junto a mi clase, más bien, mi ex clase.

Salgo del instituto y voy de camino a mi casa, mi casa no se encuentra muy lejos de este, así que no me importa ir andando... después de 10 minutos llego a mi mansión, donde me esperan mis padres en la puerta de casa. Creo que me conocen mejor que yo a mi misma.

—Hola papis, ¿que tal la mañana? —digo intentando esquivar el tema.

—Oh pues muy bien, hemos... — empieza mi madre pero se queda callada un rato hasta que arranca —maldita cria, lo has preguntado para esquivar nuestro enfado —dice mi madre cabreada.

—Si pues... quiero la bronca toda de golpe, así que os diré que me han expulsado de forma perpetua del instituto —ellos se miran entre si, seguro están pensando 100 formas de matarme...

—Ven hija pasa al salón —dice mi padre respirando hondo para tranquilizarse.

Pasamos dentro de casa y vamos al salón donde yo me siento en el sillón y ellos en el sofá, mejor sentarme lejos por si acaso me van a estrangular, pueda reaccionar antes y salir corriendo.

—Bueno hija, pues nosotros también tenemos que decirte algo —dice mi madre iniciando la conversación —los señores Roberts nos han propuesto un trato, que le vendrá genial a la empresa... —dice mi madre con una mirada de comprensión, igual me querían meter ya en la empresa, pero prefiero ponerme en lo peor...

—Va mama no te enrolles y suéltalo ya —digo aburrida, es que no se para que tanto suspense.

—El hijo de los Roberts, Seve Roberts, será tu futuro esposo, y tu actual novio —dice mi padre tranquilo, ¡¿ES ENSERIO?!

—¡¿QUEEEE?! Y UNA MIERDA, ME NIEGO —dije alzándoles la voz.

—A NOSOTROS NO NOS ALZAS LA VOZ —dice mi padre alzando aún más la voz. (si es que se puede)

—Vamos hija... a la empresa le vendrá genial si nos unimos en una gran familia —dice mi madre, ¿una gran familia? Esta mujer es tonta y en su casa no lo saben.

—NO LO VOY A HACER, SALDRÉ CON QUIÉN QUIERA Y CUANDO QUIERA —digo intentando finalizar esta conversación para irme.

—Vale hija, te dejo dos opciones —dice mi padre, la verdad es que tengo miedo —o te prometes con Seve o te mandamos a un internado reformatorio —dice mi padre.

¿Un qué? Un internado reformatorio, espero que no sea un internado de monjas, que se piensa que por ser un reformatorio ¿Voy a cambiar? ¿Que me voy a portar bien? Además, he oido que de los reformatorios no pueden expulsar a nadie...

—Está bien, me voy al internado —no pienso prometerme con alguien que ni siquiera conozco —ya habéis conseguido deshaceros de mí, estaréis felices —digo sarcástica.

—Eso no es así hija... por cierto el internado es de chicas —¡¿de chicas?! Me gusta fastidiar a las pijas plásticas, seguro que allí hay muchas, pero me suelo llevar mejor con los chicos.

—Mañana te llevamos y nos harán un tour explicando todo sobre el internado —dice mi padre finalizando la conversación.

—Sin problemas, me voy a hacer la maleta —digo saliendo del salón rumbo a mi habitación.

Ya en mi habitación empiezo a buscar mi libreta de bromas, en esa libreta he ido apuntando muchas de las bromas que he hecho, y tengo apuntados materiales claves para estas. Al internado voy a llevarme 2 maletas, 1 maleta para la ropa, maquillaje y todo lo necesario, y en la otra, pondré bombas de pintura, y otros materiales para liarla.

La verdad me va a ser raro estar solo con chicas, las chicas son mas estiradas, los chicos son muy enrollados y se unen a cualquier lio en el que te quieras meter, ojalá en ese internado encuentre chicas como yo.

La verdad me cabreaba un poco la idea de que mis padres me chantajearan así, sé que siempre han querido mandarme a un internado, alejarme de ellos, y ya lo han conseguido, mandarme a ese asqueroso internado de princesitas y príncipes.
Unos pequeños golpes en la puerta me sacan de mis pensamientos.

—¿Quién es? —le digo a la persona que se encuentra al otro lado de la puerta.

—Soy yo —dice mi maduro hermano.

—Pues pasa "yo" —digo antes de que se abriera la puerta y entrara un Orson salvaje a mi habitación —¿Qué quieres Orsi? —seguro que viene a convencerme de que el internado no era tan malo, ya que el fue unos años allí...

—Se lo que estarás pensando, y no es como lo maquinas en tu cabeza —wow ¿acaso mi hermano lee mentes y no lo sabia? —ellos te quieren mucho, igual que yo, lo hacen por tu bien, aparte el internado no es como piensas, te llevarás una sorpresa —dice sonriente mi hermano.

—Sabia que dirías eso... no intentes animarme hermano, pero que sepas que no vendré como una princesita y que ese internado no me va a cambiar en absoluto —digo un poco cabreada.

—Ya te digo yo que no te van a cambiar —dice para seguidamente salir de mi habitación.

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❦ Pues aquí os dejo otro capítulo, espero que os guste ❦
Y en este no dejo intriga porque no puedo dejar intriga de ninguna manera we jjaja

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